Un acercamiento a la rica biodiversidad marina de Antofagasta: un maravilloso espectáculo de ballenas jorobadas, ballenas fin y ballenas francas australes
Nuestro colaborador invitado, el fotógrafo Alex Sánchez, nos comparte una galería sobre su trabajo, el cual se centra principalmente -según él mismo lo define- en dar a conocer el patrimonio natural y cultural del norte de Chile. A través de la fotografía, ha logrado generar un mayor entendimiento sobre los grandes cetáceos que se alimentan en las costas de Antofagasta, quienes con gran resilencia han logrado adaptarse a un entorno portuario y de mucho tránsito. Aquí, el fotógrafo nos comenta sobre su experiencia capturando a estos grandes mamíferos y su principal motor para compartir su trabajo. “Tienen un secreto que inspira felicidad en todas las personas que ningún otro grupo de animales puede igualar. Las ballenas son tan fascinantes para las personas que se han convertido en herramientas poderosas para la educación de personas de todas las edades”, es parte de lo que comenta.
Desde pequeño realizaba fotografía como hobby, pero no fue hasta que se dió cuenta del gran potencial de aprendizaje que entregaba esta labor, que se dedicó a esto de forma profesional. Para el fotógrafo Alex Sánchez, la fotografía te puede transportar a un lugar o momento que inspira e induce a conocer, y nos entrega una emoción que te invita a descubrir. Como él mismo señala, a través del registro de la vida salvaje se puede enriquecer la percepción y conciencia de las personas, y es una invitación a reflexionar sobre la importancia de cuidar el medio ambiente que coexiste con su propia realidad. “Es una forma con la cual la comunidad puede adquirir cultura e interesarse por lo que nos rodea de manera accesible”, agrega.
Así, fascinado por la fotografía, la maravillosa biodiversidad del norte de Chile y todas las interacciones que se generan en un entorno que muchas veces pasa desapercibido, fue que decidió hacerse a la mar para retratar a los grandes mamíferos que visitan las costas de Antofagasta y que tiñen el paisaje marino de asombrosos saltos y preciosas escenas.
“Las costas de la región de Antofagasta son un paraíso natural que alberga una gran variedad de especies, es una aventura enriquecedora poder observar estos grandiosos animales y aves alimentándose, como no aprovechar de obtener imágenes de este increíble alboroto submarino y que este todo conectado”, señala Alex Sánchez.
Las costas de la Región de Antofagasta, a pesar del gran desarrollo industrial que se ha generado en la zona, albergan una rica biodiversidad marina y son reconocidas a nivel nacional como una zona de gran tránsito de animales marinos. No obstante, la salud de muchas poblaciones de cetáceos se encuentra constantemente amenazadas por las actividades industriales que se generan en el mar, lo que podría atemorizar, desplazar o dañar a estas especies. Por ello, el fotógrafo recalca la importancia de acercar esta importantísima biodiversidad a las personas, para generar mayor entendimiento y empatía.
“Antofagasta, y en especial la comuna de Mejillones, se encuentra en la encrucijada entre el progreso y el medio amiente y estas especies marinas, que son vulnerables a la contaminación y a la sobreexplotación pesquera, se ven muy afectadas, por lo que es importante proteger el recurso de anchoveta en el norte de Chile, que es crucial para garantizar que las ballenas sigan visitando nuestras costas para alimentarse”, asegura el fotógrafo.
En estas fotografías podemos ver tres distintas especies de ballenas: la ballena Fin o ballena de aleta, la segunda más grande del mundo; la ballena Jorobada, la más acrobática y la única capaz de sacar todo su cuerpo fuera del agua; y una ballena Franca Austral con su cría, las que pueden aumentar hasta 150kg por día durante sus primeras semanas de vida; todas capturadas en la región de Antofagasta.
En su ambiente natural estas ballenas, a pesar de siglos de haber sido víctimas de la depredación humana, demuestran una y otra vez ser excepcionalmente tolerantes de la proximidad de los humanos, y no sólo toleran sino que, además, muchas veces inician deliberadamente interacciones positivas con las personas.
Alex Sánchez agrega: “Las ballenas para mí son todo lo maravilloso que nos puede pasar, tienen una capacidad increíble para enriquecer la vida de aquellos con quienes entran en contacto pacífico. Tienen un atractivo universal único para el espíritu humano. Son grandes creadoras de asombro. Tienen un secreto que inspira felicidad en todas las personas que ningún otro grupo de animales puede igualar. Las ballenas son tan fascinantes para las personas que se han convertido en herramientas poderosas para la educación de personas de todas las edades”.
Alex asimismo señala que cada uno de estos encuentros fue un evento muy especial y maravilloso, un verdadero sueño hecho realidad. “Cada especie de ballena es distinta en su ritmo, en su manera de moverse, su curiosidad. Son encuentros únicos los cuales te invitan a investigar y conocer más de ellas”, agrega.
Es así como comienza un largo camino de exploración por la costa antofagastina, donde cada salida en busca de cetáceos es distinta, pero que siempre están presentes debido a su alimentación. Cada una de estas especies esta prolongadamente buscando alimento y esta zona de gran biodiversidad marina se las ofrece, por ello, uno de los elementos más característicos que tiene el avistamiento de ballenas es esta zona es que, generalmente, cada grupo familiar está integrado por algún ejemplar juvenil o ballenatos.
A través de esta galería, el autor nos invita a disfrutar lo que nos regala la vida y a observar detenidamente el maravilloso mundo marino que sale a la superficie a deleitarnos de paz.
“El arte es y será una herramienta muy poderosa de comunicación y de transformación. En los últimos años, las redes sociales han permitido acercar el movimiento ambiental a una audiencia más amplia y alejada de los ecosistemas naturales, y en ese sentido, el arte con sentido ambiental ha contribuido significativamente en la concientización sobre las crisis climática y ecológica, y también sobre el trabajo que se está haciendo para hacerles frente. A través del arte nos conectamos no solo con nosotros mismos sino también con el mundo que nos rodea”, finaliza Sánchez.