Dientes de Navarino: todo lo que necesitas saber para el trekking más austral del mundo
Conocido como el “trekking más austral del mundo”, Dientes de Navarino se ha convertido en el favorito de muchos aventureros por su exigencia media alta y por estar ubicado en un entorno privilegiado que se rodea de una vegetación única e intocada en Tierra del Fuego. Junto a Errante Lodge te dejamos todas las recomendaciones, tramos y actividades para que descubras este lugar espectacular.
La Patagonia chilena está llena de lugares únicos y eso nadie lo pone en duda. Cada uno de sus visitantes se aventura hasta este rincón del país para perderse en sus prístinos paisajes y para envolverse en su belleza natural. Y porque uno nunca termina de descubrirla, te presentamos un recorrido denominado por los expertos como el trekking más austral del mundo, en Tierra del Fuego: Dientes de Navarino.
Al sur del Canal Beagle, en la comuna de Cabo de Hornos, se encuentra la Isla Navarino. Es la última isla de Tierra del Fuego que se esconde en el fin del mundo y resguarda en ella una biodiversidad única, pues no fue por nada que en el 2005 la Unesco nombró a este territorio chileno de Cabo de Hornos como Reserva de la Biosfera. El territorio posee enormes hectáreas verdes que resguardan lagos, ríos y bosques sub antárticos, así como el gran cordón montañoso Dientes de Navarino que cubre gran parte de la superficie de la isla y que cada año, son más los entusiastas que se atreven a aventurarse a sus senderos.
Desde que en 2001 se realizaron trabajos de señalización y optimización del trazado de la ruta hacia los Dientes de Navarino, es que éste se ha posicionado como un referente mundial para los amantes del senderismo y la montaña, atraídos por su intocada naturaleza austral.
El circuito
El recorrido es una ruta de alrededor de cinco días en los cuales se rodea el cordón de los dientes -cuyas cumbres dentadas superan los mil metros de altura- dirigiéndose en dirección este-oeste, a través de diferentes valles y laderas que vierten hacia el canal Beagle por el norte y la bahía Nassau por el sur.
La ruta se compone de 38 hitos, que corresponden a los puntos destacados por el Ministerio de Bienes Nacionales a lo largo del circuito, y que poseen información útil para la orientación de los visitantes. Asimismo, encontrarás mesas de interpretación con información complementaria.
Los cinco tramos del recorrido duran entre cinco a seis horas por jornada, dependiendo del ritmo de la persona. Esta travesía tiene una distancia total de 50 kilómetros (ida y vuelta), con una exigencia media alta debido al relieve de la zona, las bajas temperaturas y la alta inestabilidad del clima, por lo que la experiencia se hace necesaria.
Primero es lo primero ¿Cómo llegar?
Una vez que llegues a Punta Arenas debes dirigirte a Puerto Williams, que corresponde al punto de partida de esta aventura. Para ello tienes dos opciones. La primera consiste llegar por vía aérea, a través de vuelos que se realizan de lunes a sábado y que duran un poco más de una hora. Las avionetas tienen una capacidad de 19 personas. También, en temporadas altas (noviembre a marzo) se pone a disposición un avión con capacidad de 90 personas que realiza viajes gran parte de la semana. En estas fechas se recomienda comprar anticipadamente tu pasaje y confirmar tu reserva.
La otra opción que tienes es por medio del mar. La empresa Austral Broom opera un ferry que transporta pasajeros, vehículos y cargas todo el año y a precios accesibles. Este viaje dura cerca de 32 horas, pero -a pesar de su duración- vale cada minuto por sus increíbles paisajes, pues estarás navegando por los canales magallánicos y por el canal de Beagle, donde – en su brazo noroeste- pasarás por la avenida de los glaciares, en el cual se ven 5 de los glaciares de la cordillera de Darwin que caen directo al canal. Además, en verano no es infrecuente ver ballenas.
Tramo 1: Puerto Williams- Laguna del Salto
El primer día de la travesía se parte desde Puerto Williams en dirección al oeste. En aproximadamente un kilómetro te encontrarás con la plaza de la Virgen y deberás tomar el camino de la izquierda y avanzar por 45 minutos hacia el sur. En el término del camino, junto a una cascada y un embalse de captación de agua, encontrarás el comienzo de la ruta para los caminantes con el panel de bienvenida y la demarcación del Hito N°1 que muestra la huella que entra al bosque.
Tu ruta inicia en este tupido bosque de lengas y coigues. Ascenderás por una acentuada pendiente que te llevará a la primera parada del tramo que corresponde al Cerro La Bandera, donde encontrarás una enorme bandera chilena que da nombre al cerro.
Desde aquí, comienza el trayecto por el faldeo de la montaña que te llevará sobre la laguna del Salto (Hito N°9), donde te encontrarás con una vista hacia el cordón montañoso que componen los Dientes de Navarino, todo esto si el tiempo te lo permite pues el clima es muy cambiante.
Finalmente, debes bajar con precaución por una pendiente pedregosa que se dirige hacia la laguna. Encontrarás el primer mirador habilitado para aprovechar las vistas y descansar, para luego continuar bordeando la laguna hasta las zonas aptas para campamento cercanas al Hito N°11.
Tramo 2: Laguna del Salto- Laguna Escondida
Tu segundo día comenzará con un ascenso hacia el Paso Australia, que corresponde a uno de los puntos más altos de todo el circuito. Para comenzar, debes bordear la laguna del Salto por la izquierda (este) y subir por el lado izquierdo del Hito N°11 siguiendo el riachuelo más cercano.
En esta sección se rodean los picos de la cadena de Dientes de Navarino, donde se realizan 3 pasos de montañas continuados: Paso Primero, Paso Australia y Paso de los Dientes, para poder llegar a los valles que se encuentran detrás de este cordón de montañas, mirando al lado sur de la isla.
En este camino podrás observar una serie de lagunas, riachuelos e increíbles vistas hacia la parte oeste de la bahía Windhond, la bahía Nassau, y el archipiélago de las islas Wollaston. Cabe destacar que este recorrido es bastante peligroso ya que el terreno está mojado o puede estar cubierto por nieve, por lo que hay que ser bastante precavido al caminar.
En el Hito N°19 se encuentra la Laguna Escondida, la cual se encuentra literalmente escondida entre los promontorios rocosos que forma el cordón de los dientes. Aquí encontrarás otro mirador donde podrás apreciar la vista hacia la laguna y sacar increíbles fotos.
Si bordeas la laguna hacia la izquierda, tomando rumbo sur, podrás encontrar el Hito N°20 donde hay una zona para acampar.
Tramo 3: Laguna Escondida- Laguna Martillo
Este tramo se inicia bordeando la laguna Escondida por la izquierda, rumbo al sur, remontando una subida hacia el Paso Ventarrón, que corresponde al Hito N°22.
De ahí, retomas hacia el segundo paso de este tramo, el Paso Guerrico (Hito N°24) en el cual se encuentra la Laguna Hermosa, la que se debe bordear por la izquierda hasta encontrar su desagüe. Debes avanzar con rumbo norte, atravesando el bosque hasta llegar a la Laguna Martillo.
En el extremo sur, cerca de su orilla, está el Hito N°26, donde hay varios sitios para acampar. En este sector podrás darte cuenta del fuerte daño que han ocasionado la especie exótica de castores en la zona, generando tal impacto que el paisaje patagónico no ha vuelto a ser el mismo, pues esta especie no tiene depredadores naturales en estos ecosistemas, por lo que su expansión no tiene límites.
Tramo 4: Laguna Martillo- Laguna Los Guanacos
Este tramo se parte recorriendo la orilla sureste de la Laguna Martillo (Hito N°27), bordeándola por la derecha hasta alcanzar la península que separa el cuerpo principal de la laguna de su extremidad noroeste.
Poco a poco te irás alejando de la orilla de esta laguna, pero te cruzarás con otras, como la Laguna Rocollosa o la Zeta. Te adentraras en los bosques de lengas y el camino se empina hacia el Paso Virginia (Hito N°34), el paso más alto del recorrido, desde donde se tiene una increíble vista a la Laguna Los Guanacos, a la parte norte de la isla, al canal Beagle y a todo el cordón montañoso por el que se ha atravesado. En este tramo se encuentra el tercer y último mirador, junto a una Mesa de Interpretación.
Por la orilla suroeste de la Laguna Guanaco (Hito N°36) hay un excelente sitio de acampada en la boca del bosque, donde el suelo está seco y protegido por los árboles. Asimismo por el lado noreste de la laguna, también existe otro sector para acampar, pero el suelo está permanentemente húmedo.
Tramo 5: Laguna Los Guanacos- Puerto Williams
En tu último tramo, debes seguir el río que desagua la laguna hasta internarte en un bosque el cual recorrerás por cerca de dos horas a través de un sendero con matas de Calafate y algunas lagunas de castores.
Una vez fuera del bosque te encontrarás con una panorámica hacia las instalaciones de la ex pesquera MacLean. Deberás seguir el camino de autos hacia el este durante 8 kilómetros y en un plazo de dos horas, llegarás a la ciudad de Puerto Williams.
Recomendaciones
Porque nunca están demás, te dejamos una serie de recomendaciones para que tengas en cuenta a la hora de querer realizar esta aventura y estés totalmente preparado. En esta ocasión conversamos con Constanza Portus de Errantes Eco Lodge ubicado en Puerto Williams, quien nos comentó algunas observaciones basadas en sus conocimientos y experiencias.
En una primera instancia, nos comentó que se debe saber leer el clima ya que este es variable y puede cambiar repentinamente: “Debes saber cuándo bajar a la montaña o cuando debes quedarte acampando (…) Tienes una experiencia de que te puede tocar el sol más bacan, paisajes lindos, todo tranquilo y que de repente haya viento y que te toque nieve. Pero la verdad es que es un encuentro con la naturaleza súper cercano”.
Dicho esto, las personas deben tener la indumentaria adecuada a lo que sugirió que- sobre todo en los temas de montaña- se debe tomar en consideración el peso de la mochila por lo que se debe llevar lo necesario y lo más importante. “Ropa que vas a usar para caminar; poleras de cambio en caso de que estés mojado o calcetines para cambiarse después, porque hay que asumir que probablemente estén mojados por mucho barro, porque si no es nieve, es barro. Capas para ponerse debajo del pantalón si hace mucho frío, abrigos, algo impermeable, cortavientos y algo más grueso. Guantes de todas maneras, anteojos de sol, gorros, orejeras y todas esas cosas salvan mucho porque te las puedes guardar en el bolsillo y las vas sacando”, detalla y agrega que caminando siempre puede dar calor pero te puede tocar zonas de vientos muy fuertes. “De hecho hay un paso que es el Paso Ventarrón que va dando la vuelta por el valle Guerrico y que ahí se forma una pasada de viento, y vientos que tienes que sentarte con la mochila”, detalla.
En cuanto a la experiencia, aseguró que lo más conveniente es que se tenga una experiencia previa en montaña o que se haya hecho otros trekkings anteriormente. “Por ejemplo, el de las Torres del Paine en ese sentido es más cómodo porque tienes refugio y lugares donde llegar. Acá es otro punto, no hay refugios, no hay baños, la senda está bien marcada ahora pero igual lo ideal es ir con un GPS- que se pueden arrendar en Puerto Williams- para saberse las rutas o haberse estudiado las guías que hay”, agrega.
Otras recomendaciones que te sugerimos y que mantengas en cuenta son:
- Antes de comenzar tu viaje, debes dejar constancia de tu salida y fecha de regreso en la Subcomisaría de Carabineros de Puerto Williams.
- Planifica bien tu viaje y confirma las reservas.
- Prefiere realizar la ruta acompañado y nunca solo, y si no cuentas con la experiencia suficiente hazlo con alguien experimentado.
- Si viajas en avión, recuerda que no puedes ingresar gas. En Puerto Williams hay muchos locales donde puedes comprar utensilios para el viaje.
- Durante el recorrido, recuerda que no puedes hacer fogatas, salvo el fuego de tu cocinilla.
- Toda la basura y desechos, llévala contigo y deposítala a tu vuelta en los basureros de Puerto Williams.
Si quieres conocer más de Cabo de Hornos y buscas donde hospedarte, te recomendamos quedarte en Errante Eco Lodge, un refugio ecológico construido por las propias manos de sus dueños, con maderas locales y con una arquitectura ecoeficiente donde la luz ilumina y abriga cada rincón del lugar. Su naturaleza se mantiene intacta y en su estado original, integrándose de manera respetuosa en esta Reserva de la Biosfera de la cual forma parte.