Los Juegos Olímpicos París 2024 llegan a su fin, pero la emoción de la competencia sigue viva en la naturaleza. En este contexto, nos preguntamos: ¿qué representantes de la fauna chilena también ganarían sus medallas? Con su agilidad y destreza, nuestra increíble biodiversidad tiene sus propios campeones olímpicos que brillan en disciplinas tan variadas como la velocidad, el salto, la natación y más. 

Velocidad

El atleta jamaicano Usain Bolt tiene actualmente el récord en velocidad: 44 km/h. Pero, por cielo, mar y tierra, la fauna chilena lo vencería. En la pista de atletismo, el ñandú (Rhea americana) se lleva el bronce. Esta ave corredora, que echa su cabeza hacia atrás y controla su dirección con las alas, puede alcanzar hasta 70 km/h, dejando atrás a muchos competidores terrestres. En el agua, el pez espada (Xiphias gladius), conocido en Chile como albacora, se alza con la plata, siendo el pez más rápido del mundo, nadando a 110 km/h. Pero el oro en velocidad va para el halcón peregrino (Falco peregrinus), que con más de 300 km/h en picada, es el ave más veloz del planeta. 

Salto

En el salto, el puma (Puma concolor) no tiene rival. Con su increíble fuerza, este felino es capaz de saltar 5 metros en vertical y hasta 12 metros en horizontal, lo que lo convierte en el campeón indiscutido de esta disciplina, duplicando el récord olímpico del humano (2,39 metros). Además, también es un excelente corredor con 60 km/h. ¡Un atleta extraordinario!

Puma. Foto: Ingo Arndt en Rewild Chile
Puma. Foto: Ingo Arndt en Rewilding Chile

Natación

Sabemos que Michael Phelps es el mejor nadador de la historia. Los chungungos (Lontra felina) también son excelentes nadadores, “capaces de vivir en el terrible mar abierto del Pacífico”, dice el biólogo Agustín Iriarte. Con sus patas traseras se impulsan y realizan movimientos ondulantes para deslizarse en el agua. Controlan su flotabilidad y hacen maniobras precisas para cazar en las corrientes. Su cuerpo hidrodinámico lo haría triunfar en competencias acuáticas.

Chungungo. Foto: Daniel Stange en iNaturalist
Chungungo. Foto: Daniel Stange en iNaturalist

Maratón

Para la maratón, no hay mejor contendiente que las aves migratorias. El flamenco chileno (Phoenicopterus chilensis), con sus vuelos estacionales de hasta 1.500 km entre Chile, Argentina, Perú y Bolivia, es un candidato sólido. Incluso, sus recorridos más cortos son de entre 150 a 300 km. Sin embargo, el cóndor andino (Vultur gryphus) podría arrebatarle el oro: «Recorre entre 400 y 600 km por día permanentemente”, añade el biólogo.

Escalada deportiva

Finalmente, en la escalada deportiva, una disciplina relativamente nueva en las Olimpiadas, el monito del monte (Dromiciops gliroides) se alza como el campeón. Este pequeño marsupial, habitante de los bosques andino-patagónicos, es un maestro trepador, utilizando su cola prensil, grandes patas y pulgares oponibles para moverse ágilmente entre las ramas de los árboles

Monito del monte. Foto: Daniel Stange en iNaturalist
Monito del monte. Foto: Daniel Stange en iNaturalist

La fauna chilena demuestra que la naturaleza también tiene sus propios Juegos Olímpicos, con atletas que, por cielo, mar y tierra, nos asombran con sus habilidades. La competencia es dura, pero nuestros animales son verdaderos campeones, dignos de medallas de oro. 

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