Tres rutas de kayak cerca de Valdivia: recorridos por el tiempo en compañía de las aves

El recorrido empieza a orillas del río. Al frente están los kayaks y remos que serán la compañía durante las próximas horas. Se sienten cantos de aves a lo lejos y más de alguna pasa volando. De seguro serán compañía para más adelante. Es hora de ponerse un chaleco salvavidas y un faldón que luego se acomodará antes de partir, con guantes si es que hace más frío. Luego, pies al kayak y hora de partir. Naturalmente, el remo se mueve con los brazos y no para. Derecha, izquierda, derecha, izquierda. Y ahí, uno se va deslizando por las aguas del río que nos mueve tranquilamente al destino. Serán horas por los paisajes e historia que nos entrega la Región de Los Ríos.

Ese será solo el inicio de una experiencia, que puede durar, dependiendo de lo que uno busque, diferentes horas o, incluso, más de un día con acampado. Es que, en los paisajes cercanos a Valdivia se pueden desarrollar diferentes rutas de kayak y, para conocer algunas de ellas, conversamos con Patricio Fernández, de Sylvatica Outdoor, una empresa de ecoturismo especializada en estos recorridos y con quien hemos visitado la zona gracias a Sernatur Los Ríos y Chile Es Tuyo.

Por medio día, una ruta por el estero San Ramón

A 20 kilómetros de Valdivia, está la localidad de Punucapa. Además de ser conocido como un lugar donde hay que hacer una parada a tomar sidra, es también el punto de inicio de una ruta de kayak que durará cerca de tres horas.

Es en el sector de El Potrero donde se emprenderá la remada por un estero interior que se llama San Ramón, y que se origina en la Cordillera de la Costa. Como dato, esta vía fluvial la utilizaban los lafkenches que iban hacia Valdivia a comercializar sus productos. Luego, el recorrido sigue adentrándose por humedales hasta el acceso fluvial del Parque Oncol. “Ahí hay unas ruinas de la familia Manns, uno de los primeros alemanes que llegaron y se instalaron en una parte que hoy es el Santuario de la Naturaleza Carlos Anwandter”, explica Patricio. Luego de los vestigios arquitectónicos, el camino es de vuelta al muelle de Punucapa.

“Este camino interior es muy tranquilo y da la posibilidad de ver aves. Más en esta época primaveral que hay muchos polluelos”, dice Patricio. Entre las especies que se pueden ver están el cisne de cuello negro; la garza chica, grande y cuca; el huairavillo, el run run (en esta época), el trile, el siete colores o el trabajador.

Por un día, un recorrido por el río Santa María

Nuevamente el inicio es en el muelle de Punucapa. Pero esta vez, el viaje nos internará por el Santuario de la Naturaleza Carlos Anwandter hacia el río Cruces. Según cuenta Patricio, desde el kayak se puede ver la isla Tres Bocas y la isla Rialejo: “pasamos por la intersección del Chorocamayo que es un afluente del río Cruces también, y por el río Pichoy. Por esa parte, pasado por la isla Rialejo hay un sector importante de nidificación de cisne de cuello negro y de cormorán. Es un sector de bosques hundidos”.

Luego, las corrientes y los remos se direccionan hacia el río Santa María, que nace en la cordillera de la Costa y desemboca en el río cruces. Por este tramo, además del bosque hundido (que es vestigio del terremoto que azotó la zona en 1960), hay mucha vegetación en la orilla. Es, de hecho, el único tramo con bosque nativo en la orilla. Las especies de avifauna que se ven en el tramo anterior, junto con la tagua chica, hualas o pato jergón. Pero sin duda, una de las visitas más esperadas es la del águila pescadora, un ave migratoria que visita la zona en el verano a cazar.

Por dos días, una noche, una visita por el río Colún y las lagunas Gemelas

Esta es una expedición de verano por el río Colún. Desde Valdivia se sale en auto hasta la localidad Chahuín y de ahí se emprende rumbo al río Colún. Una vez ahí, se siguen 12 kilómetros de kayak por el río que desemboca en el mar en la playa Colún. “Es muy grande y la idea es acampar en un lugar habilitado porque estamos en la Reserva Costera Valdiviana. Después está la posibilidad de ver las lagunas Gemelas, que están rodeadas de bosque nativo en un paisaje bien especial que tiene unas dunas gigantes junto al bosque”.

Aquí nuevamente las aves son la compañía constante, aunque es posible quizás sumar especies como el martín pescador.

¿En qué época ir?

Según explica Patricio, todos estos recorridos son ideales para cualquier época del año, salvo aquellos días invernales en los que hay temporales. Fuera de eso, hay algunas estaciones que acompañan el paisaje con algo especial. Por ejemplo, en primavera es plena época de nacimiento de polluelos, por lo que se pueden ver varios, con todas las medidas de alejamiento y seguridad para ellos. Así quizás, es posible ver cines pequeños, hualas o, incluso, algún nido del rápido sietecolores o gaviotas de cáhuil en época de reproducción.

Así, esta es una invitación para conectarse con el paisaje y conocer los vestigios de la historia de los alrededores de Valdivia: un paso por los vestigios antigua colonización alemana y el deterioro de la zona por un terremoto que, como consecuencia, transformó antiguos predios agrícolas y ganaderos en humedales o lugares de agua, así como hundió bosques que hoy son hogares de las aves que acompañan todo el recorrido en kayak.

*Estos recorridos no requieren experiencia previa en kayak, pero sí una condición física acorde a la actividad.

*Para más información, Sylvatica Outdoors cuentan con Instagram y Facebook.

*La expedición al río Colún está disponible durante el verano.

*Para todas estas actividades se recomienda llevar una muda extra de ropa seca.