Emblema de la Patagonia, joya de los Andes, lugar donde convergen los Andes con la pampa infinita; el Parque Nacional Torres del Paine representa para muchos lo más salvaje de la Patagonia, con torres de granito míticas e inmensos glaciares milenarios al extremo austral del Campo de Hielo Sur.

Es también el territorio de la población más saludable del puma de la Patagonia, el gato de mayor distribución de las Américas. Oportunista e increíble cazador de emboscada, el felino demuestra una excepcional adaptabilidad para vivir en ecosistemas muy diversos, desde los desiertos más áridos hacia los bosques húmedos amazónicos y las nieves heladas del Cono Sur.

©Jeremi Gouvevitch
©Jérémie Goulevitch

La nieve justamente fue el motivo que nos llevó a viajar a las Torres del Paine con los amigos, fotógrafos y amantes de la naturaleza Francisco Espildora y Miguel Fuentealba en búsqueda del puma. ¡Qué más maravilloso poder lograr una fotografía de puma en la nieve! Un sueño para nosotros.

En una fría mañana de invierno, en algún lugar de las pampas de la meseta arriba del lago Sarmiento, estábamos caminando a la orilla de un lago congelado. Todavía no encontrábamos el puma, pero las huellas omnipresentes lo traicionaban. Sabíamos que estábamos muy cerca. Teníamos esa sensación extraña que estaba allí mirándonos…

©Jeremi Gouvevitch
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En vez del puma, encontramos un cisne de cuello negro muy débil tratando de alimentarse a la orilla del lago. El pobrecito no había alcanzado a irse antes de la tormenta, y de no poder encontrar su alimento bajo el agua del lago, esa hermosa ave se encontraba en sus últimas horas de vida. Después de un par de fotografías, seguimos nuestro camino atrás del felino a través del desierto blanco. El silencio era total, no encontrábamos señales de su presencia y después de un tiempo tomamos la decisión de volver sobre nuestras huellas.

©Jeremi Gouvevitch
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Al volver a la famosa Laguna de los Cisnes, desde lejos nos sorprendimos al no encontrar el cisne. ¿Será cierto? La idea de que un puma pasó por allí minutos después de nosotros nació en nuestra mente, sin realmente creerlo. Se repente se nos apareció una hermosa hembra cruzando el camino delante de nosotros. Se detuvo, nos miró, y siguió subiendo unos pasos más arriba hacia un imponente macho que dormía atrás de una roca.

¡No podíamos creerlo! ¡Dos pumas juntos! Éramos testigos de una pareja de gatos al medio de sus aventuras amorosas. El pobre cisne por supuesto no sobrevivió.

©Jeremi Gouvevitch
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Y la naturaleza está tan bien hecha que el gato oportunista cumplió su rol ecológico.

©Jérémi Gouvevitch
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Todas estas fotos fueron capturadas por el fotógrafo Jérémie Gouvevitch. Puedes ver más de su trabajo en su Flickr y su Instagram.

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