En el marco del viaje que hicimos con mi polola, en el que recorrimos gran parte del sur de Chile, una de las tantas localidades que conocimos fue Quemchi, pequeño pueblo de la costa nororiental de la Isla Grande de Chiloé.

Como todos saben, en cada esquina de Chiloé hay una postal, Quemchi no está fuera. Luego de una larga jornada de fotografías, fuimos a almorzar a una picada de la zona, en donde los techos de baja altura hicieron de las suyas, haciéndome un profundo corte en la cabeza. Mientras iba al baño del lugar para curarme, con un gran corte en la cabeza, miro por la ventana encontrando semejante imagen.
No hay mal que por bien no venga.

Imagen y texto de José Manuel Mena.

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