Fue en 2017 que mi gran amigo Gerardo Köster, sabiendo mi profundo interés y conexión con el buceo y el mar, me envió un artículo sobre restauración de corales. Esa fue la semilla de todo. Desde ahí comencé a investigar respecto al tema y luego de darle vueltas por un tiempo decidí que quería aprenderlo y experimentarlo por mí misma.

Buceo entre corales en Utila, Honduras ©Bernardita Leria
Buceo entre corales en Utila, Honduras ©Bernardita Leria

Así es como me crucé con Daniela Mejía, cofundadora y directora del proyecto Utila Coral Restoration, la organización que trabaja en Honduras y que más tarde cambiaría el curso de mi vida. Después de un cruce de correos, pude darme cuenta del increíble conocimiento y experiencia que Daniela tenía y cómo todo esto era ‘algo real’ -donde incluso obtendría una certificación oficial- pero no fue hasta que estaba en clases con ella en Utila que entendí su pasión y cómo el tema estaba empezando a despertar algo realmente increíble en mí.

Me inscribí a una pasantía de 12 días con Utila Coral Restoration (UCR) donde aprendí sobre las condiciones a la fecha de nuestros océanos y arrecifes, y varias especialidades distintivas creadas por Daniela, incluyendo la identificación de corales del Caribe, identificación de enfermedades de corales, técnicas de restauración de arrecifes y mantenimiento de viveros de coral. Más adelante, trabajando con UCR, aprendí y experimenté incontables cosas más.

Buceo entre corales en Utila, Honduras ©Bernardita Leria
Buceo entre corales en Utila, Honduras ©Bernardita Leria

Me enamoré de lo que aprendí y entendí que había descubierto un nuevo sueño. Uno por el que estaba dispuesta a dejar todo el resto de mi vida por alcanzar. ¡Y lo hice!. Me quedé en Utila, donde me entrené y certifiqué como instructora de buceo recreativo y comencé a enseñar y entrenar a otros buceadores para la restauración de corales y conservación marina.

Daniela y Bernardita enseñado trasplante de corales ©Andrea Izaguirre
Daniela y Bernardita enseñado trasplante de corales ©Andrea Izaguirre
Mi lugar feliz ©Andrea Izaguirre
Mi lugar feliz ©Andrea Izaguirre

¿Por qué la restauración de arrecifes es importante?

Los arrecifes no sólo proveen refugio a un ecosistema increíblemente importante y protegen las costas al reducir el impacto de las olas, sino que además los arrecifes de coral alrededor del mundo son proveedores de ¡más de la mitad del oxígeno del planeta! (Algunos científicos plantean que ese número en realidad alcanza cerca del 70%). Este increíble aporte es hecho por ellos cubriendo tan solo un 0,2% del suelo marino.

Como ya hemos escuchado, los arrecifes de coral del mundo están en un estado crítico. El total de cobertura coralina en el Mar Caribe ha declinado desde 55% en 1977 a un 10% en la actualidad, y las tasas de crecimiento de los corales también están disminuyendo, con la calcificación coralina cayendo en 15-30% desde los años 90 (Rinkevich 2015).

Coral Colpophyllia natans infectado con la enfermedad de la plaga blanca ©Bernardita Leria
Coral Colpophyllia natans infectado con enfermedad de la plaga blanca ©Bernardita Leria

Parte de este problema es la aparición y propagación de enfermedades que han afectado hasta el 90% de las colonias de algunas especies de coral. Sin embargo, la mayoría de las amenazas directas a nuestros arrecifes son causadas por actividad humana, incluyendo no sólo acciones que contribuyen al calentamiento global sino también otras más simples como patadas accidentales o la introducción de sustancias dañinas como protector solar no ‘seguro para arrecifes’ o repelente de insectos.

Coral Colpophyllia natans sano ©Bernardita Leria
Coral Colpophyllia natans sano ©Bernardita Leria

La restauración de corales

La restauración se refiere al desarrollo de técnicas aplicadas a especies de corales muy importantes en la construcción de arrecifes y con alto riesgo de extinción, con el objetivo de proveer una pared más fuerte, resiliente y sana. Esto se hace creando espacios seguros y protegidos para que las respectivas especies puedan crecer y desarrollarse sanamente, con el fin de posteriormente plantarles de vuelta en el arrecife.

Fragmento de coral recién colgado ©Bernardita Leria
Fragmento de coral recién colgado ©Bernardita Leria

Existen diferentes técnicas de restauración aplicadas alrededor del mundo. Las que yo personalmente aprendí y que el proyecto de Utila Coral Restoration ha usado hasta ahora, mezcla una técnica extensa y exitosamente probada para las especies tratadas en la actualidad (Acropora cervicornis y Acropora palmata) y la experiencia respecto al ambiente y condiciones específicas del arrecife de Utila. Daniela y su equipo han trabajado en los últimos años en implementar un Sistema de Viveros de Coral submarino que funciona mejor para las especies Acropora de esta parte del planeta. Este ha obtenido tasas impresionantemente altas de éxito considerando sobrevivencia y crecimiento, y además ha permitido entrenar a docenas de estudiantes en un ambiente suficientemente cómodo. Una evaluación de proyectos de restauración de Acropora en el Caribe, encontró que el método de viveros es considerado el más efectivo (Young et al 2012).

Fragmentos de coral recientemente colgados en el vivero ©Bernardita Leria
Fragmentos de coral recientemente colgados en el vivero ©Bernardita Leria

¿Cómo funciona el vivero de corales?

Es una estructura dispuesta de manera muy cuidadosa en áreas específicas del arrecife donde se posicionan fragmentos de corales, con el objetivo de que estos crezcan en un ambiente seguro y con menor competencia. Esta estructura es limpiada, mantenida y monitoreada de manera frecuente por investigadores, científicos y biólogos marinos con el fin, además, de evaluar el crecimiento y desarrollo de los fragmentos de corales.

Fragmentos grandes de corales listos para ser trasplantados ©Bernardita Leria
Fragmentos grandes listos para ser trasplantados ©Bernardita Leria

Un espacio controlado que reduce la competencia ayuda a los corales a crecer más rápido y más fuertes, permitiéndoles enfocarse más en su desarrollo y menos en «pelear» contra depredadores, invasores y algas.

Limpiando el vivero de corales ©Andrea Izaguirre
Limpiando el vivero de corales ©Andrea Izaguirre
Monitoreando el vivero de corales ©Andrea Izaguirre
Monitoreando el vivero de corales ©Andrea Izaguirre

Luego de que los fragmentos alcanzan cierto tamaño, que les dará una mayor probabilidad de sobrevivir por ellos mismos, son trasplantados en áreas cuidadosamente elegidas (bajo un método específico) de manera de contribuir con la salud y resiliencia del arrecife. En el Simposio Internacional de Arrecifes de Coral en Australia, fue expuesto que desde un punto de vista biológico, los trasplantes generalmente alcanzan tasas de sobrevivencia entre 50% y 100% cuando los corales son trasplantados en hábitats similares a aquellos de los que fueron recolectados.

Fragmento de coral recién trasplantado ©Bernardita Leria
Fragmento de coral recién trasplantado ©Bernardita Leria
Fragmentos de coral recién trasplantados ©Bernardita Leria
Fragmentos de coral recién trasplantados ©Bernardita Leria

¿Cómo ayuda la restauración de corales?

Los proyectos de restauración son un esfuerzo por repoblar especies de coral amenazadas a la vez que educa buceadores y otros estudiantes mientras se recolectan y proveen datos de gran importancia científica, los que pueden ser usados por gobiernos y organizaciones no gubernamentales. Ellos apuntan a contribuir y ser un complemento a las políticas de protección marina existentes, además de crear conciencia y proveer oportunidades educacionales relacionadas a la conservación del medioambiente.

Buceo entre corales en Utila, Honduras ©Bernardita Leria
Buceo entre corales en Utila, Honduras ©Bernardita Leria

¿Qué hay de este lugar llamado Utila?

Es la más pequeña de las tres islas importantes de las Islas de la Bahía de Honduras, con un área total de 49.3 km².

Utila desde una avioneta ©Bernardita Leria
Utila desde una avioneta ©Bernardita Leria

El arrecife de Utila es parte del Arrecife Mesoamericano, el segundo sistema más largo del mundo. Con un poco más de 1000 km, el Sistema Arrecifal Mesoamericano (MAR) se extiende a lo largo de la costa este de México, Belice, Guatemala y Honduras, proporcionando sustento y trabajo para aproximadamente 2 millones de personas.

Utila, Honduras ©Bernardita Leria
©Bernardita Leria
Utila, Honduras ©Bernardita Leria
©Bernardita Leria

Debido a la geografía de la isla, el arrecife se posiciona a sólo unos metros desde la costa, siendo ésta una de las razones del increíble buceo que se puede experimentar allí.

Utila, Honduras ©Bernardita Leria (3)
Utila, Honduras ©Bernardita Leria 

Las condiciones del mar son muy cómodas y fáciles (agua de cálidas temperaturas, sin corrientes fuertes o cambios en la marea y gran visibilidad), haciéndolo un lugar ideal para aprender a bucear.

Buceo entre corales en Utila, Honduras ©Bernardita Leria
©Bernardita Leria
Buceo entre corales en Utila, Honduras ©Bernardita Leria
©Bernardita Leria

Es frecuentemente visitada por algunas de las criaturas marinas más increíbles, incluyendo al tiburón ballena, ballenas piloto, tiburón martillo, delfines de dientes rugosos y delfines acróbatas.

Tiburón ballena ©Bernardita Leria
Tiburón ballena ©Bernardita Leria

La isla está conformada por manglares, siendo hábitat para una gran cantidad de especies en peligro, donde organizaciones como BICA (Bay Islands Conservation Association) trabajan en investigación y creación de programas para tratar de proteger la vida silvestre en riesgo en la zona.

La región es también víctima de una población de crecimiento increíblemente rápido de pez León, una especie originaria del Indo Pacífico que fue introducida de manera errónea en el Caribe. No existe depredador natural para esta especie y su crecimiento genera un impacto negativo muy importante en el medioambiente.

Pez león en Utila, Honduras ©Bernardita Leria
Pez león en Utila ©Bernardita Leria

Este es otro de los elementos poniendo en riesgo la sobrevivencia del arrecife en la zona, por lo que varias escuelas de buceo enseñan una especialidad distintiva para aprender cómo cazarlos correctamente y tratar así de reducir la presión que ejercen sobre el ambiente local. Este en sí mismo es un tema gigante, no solamente por las consecuencias del problema, sino que sobre todo por sus causas.

De nacionalidad chilena, Bernardita Leria aprendió a bucear en 2016 y se convirtió en instructora de buceo el año 2019. A través de su cuenta de Instagram (@labernidelmar), comparte sus experiencias con el fin de compartir sus conocimientos y amor por el océano.

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