Las costas de Iquique se convirtieron en un dantesco escenario, luego de que el pasado 23 de julio se reportaran numerosos cadáveres de aves marinas en el sur de playa Brava. Las fotografías que denunciaban el hecho no se hicieron esperar en las redes sociales, incluyendo algunas donde incluso se mostraba a pelícanos atrapados en redes de pesca. Ante la denuncia, la policía marítima y funcionarios del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) acudieron al lugar, donde se constató inicialmente la mortalidad de 186 aves, correspondientes en su gran mayoría a cormoranes guanay, y en menor medida a cormorán yeco, piqueros y pelícanos.

Muerte de aves en Iquique ©Pukara Foto (2)
Muerte de aves en Iquique @pukarafoto

Sin embargo, en otros sectores de la costa iquiqueña se hallaron más cuerpos. Por ejemplo, voluntarios de una limpieza de playa encontraron cerca de 200 cadáveres en la Playa Huayquique, seguido de otros reportes de investigadores, incluyendo al biólogo marino de la Universidad Arturo Prat, Guillermo Guzmán, quien señaló a Cooperativa que el cálculo final rondaba las 500 ejemplares. Eso sin olvidar la desconocida cifra de animales que – presumiblemente – se hundieron en el mar, como los pelícanos que poseen mayor peso.

Pese a que el hecho sigue en investigación para determinar responsabilidades, ya se tienen antecedentes como la necropsia realizada por el SAG, que descartó inicialmente la presencia de enfermedades o la caza furtiva de los individuos muertos. De ese modo, la evidencia disponible da luces de que los animales murieron a causa de la pesca de cerco para la captura de la anchoveta, pez que constituye un alimento esencial para las aves marinas de la zona.

Muerte de aves en Iquique ©Pukara Foto
Muerte de aves en Iquique @pukarafoto

Así lo relata Verónica González, coordinadora de la ONG Golondrina de Mar, quien detalla que “según el informe SAG se descarta intoxicación y/o alguna enfermedad, dando cuenta que se trataban de ejemplares en perfecto estado, evidenciando que al momento de muerte estaban en pleno proceso de alimentación. Coincidentemente durante los días previos al varamiento se pudo observar la presencia de flotas pesqueras muy cercanas a la costa las cuales utilizan el método de pesca de cerco. El informe final del SAG es concluyente: la causa de muerte es edema pulmonar, es decir, muerte por inmersión o ahogamiento”.

Muerte de aves en Iquique ©Pukara Foto
Muerte de aves en Iquique @pukarafoto

Sin embargo, este hecho no sería aislado. El concejal de Iquique, Rodrigo Oliva, cuenta que “lo que hemos hecho nosotros y nosotras es básicamente poner los antecedentes sobre la mesa. Gran parte de los registros que han servido para exponer el tema de manera pública, han sido registros que hemos rescatado nosotros mismos, compañeros de trabajo de la pesca artesanal que, preocupados por la situación que habitualmente sucede cuando se abre la temporada de anchoveta, estamos tratando de exponer las consecuencias que genera esta actividad pesquera tan intensa y tan en la orilla”.

Pesca de Anchoveta – Cedida (3)
Pesca de Anchoveta. Cedida

Para hacerse una idea, el cerco que se usa para pescar a la anchoveta consiste en una larga pared de red enmarcada por una línea superior de flotadores, y por una línea inferior de plomos. Además, tiene colgadas anillas en la parte inferior, a través de las cuales corre un cabo o cable de acero llamado jareta, que permite el cierre de dicha red. Por otro lado, se habla de pesca incidental cuando ocurre la captura no intencionada de especies marinas que no son objetivo de la actividad pesquera, lo que muchas veces deriva en la muerte de estos animales.

Habría sido eso, precisamente, lo que detonó el deceso de las aves marinas en Iquique.

“A nivel mundial existe consenso que el descarte y la pesca incidental representan una fracción significativa de las capturas mundiales, constituyendo una de las mayores amenazas para la sustentabilidad de los océanos. Es por ello por lo que varias organizaciones internacionales han llamado la atención sobre la necesidad de evaluar el impacto de esta práctica y reducirla, promoviendo el uso de tecnologías u otros medios para mitigarla”, explica Miguel Araya, biólogo pesquero, investigador y académico del Área de Biología Marina y Acuicultura de la Universidad Arturo Prat, en Iquique.

Pesca de anchoveta. Cedida
Pesca de anchoveta. Cedida

Araya, quien es Magíster en Pesquería y Doctor en Sistemas Marinos Costeros, añade que “se estima que al menos 1 millón de aves marinas, 8,5 millones de tortugas marinas y 650 mil ejemplares de mamíferos marinos tanto protegidos, como en peligro o amenazados de extinción, interactúan globalmente con las operaciones de pesca cada año, pudiendo morir producto de dicha interacción”.

En ese sentido, González puntualiza que “lamentablemente esta situación es mucho más frecuente de lo que parece, sólo se visibiliza cuando los varamientos se producen en costas pobladas en donde las personas son testigos de los hechos y denuncian. Además, hay que considerar que sólo un porcentaje menor de estas aves muertas es el que llega a la costa”.

Muerte súbita en el frenesí alimenticio

El pasado 30 de julio se llevó a cabo una reunión que congregó a autoridades locales, representantes de instituciones gubernamentales y organizaciones medioambientales, con el fin de revisar y exponer los antecedentes recabados luego de la muerte de la avifauna marina.

Muerte de aves en Iquique ©Pukara Foto
Muerte de aves en Iquique @pukarafoto

De esa manera, entidades como el SAG informaron que las condiciones de los cuerpos eran más bien homogéneas, y que no se detectaron signos o síntomas de enfermedad (como la enfermedad de New Castle). Tampoco se observaron alteraciones en su plumaje, secreciones, presencia de elementos químicos, recubrimientos oleosos, ni laceraciones por elementos cortopunzantes o proyectiles.

Por el contrario, la condición corporal de las aves parecía ser adecuada. En otras palabras, se veían sanos. De hecho, la inspección detectó alimento en los cadáveres, es decir, las malogradas aves tenían anchoveta en el pico y en su esófago. Esto sugiere que se estaban alimentando cuando se desencadenó su súbita muerte.

Muerte de aves en Iquique. Gentileza ONG Golondrina de Mar
Muerte de aves en Iquique. Gentileza ONG Golondrina de Mar

La ecóloga marina Andrea Auger cuenta que “al ser la anchoveta el alimento principal en la dieta de estas especies guaneras, al momento en que se realizan las faenas de pesca de cerco de anchoveta, el cardumen es encerrado dentro de la red de cerco, las aves comienzan a ingresar para poder bucear dentro o lanzarse en picada y capturar los peces que están dentro de ella. Al momento de ‘calar la red’, o sea de lanzarla al mar, comienzan a congregarse diversas especies de aves marinas, cientos y miles de ellas comienzan un frenesí alimenticio, donde todas y cada una de ellas necesita comer lo suficiente para mantener su estado biológico óptimo”.

No obstante, cuando la red comienza a cerrarse, “las aves que están buceando no alcanzan a verla, emergiendo dentro de ella, por otra parte, aves que cazan lanzándose en picada quedan enredadas en la línea de corchos o en la abertura de malla de la red y al no poder liberarse mueren ahogadas o fracturadas por la tracción de la red”, sostiene Auger.

Muerte de aves en Iquique – Gentileza ONG Golondrina de Mar
Muerte de aves en Iquique. Gentileza ONG Golondrina de Mar

En cuanto a las estimaciones sobre el impacto la pesca incidental, un estudio del “Programa de Investigación y Monitoreo del Descarte y la Captura de Pesca Incidental en Pesquerías Pelágicas, 2019-2020”, del Instituto de Fomento Pesquero, mostró que de 3.039 lances se registraron 20 especies de mamíferos, aves y tortugas.

Captura y mortalidad incidental por especie en la flora cerquera industrial que operó sobre el recurso anchoveta, entre las regiones de Arica y Parinacota, y Antofagasta. Datos provenientes del registro de observadores científicos sobre 3.039 lances de pesca comerciales durante el periodo 2017-2019. (Tabla 1)
Captura y mortalidad incidental en la flota cerquera industrial que operó sobre el recurso anchoveta, entre las regiones de Arica y Parinacota, y Antofagasta. Datos provenientes del registro de observadores científicos sobre 3.039 lances de pesca comerciales durante el periodo 2017-2019. (Tabla 1)

En la pesquería artesanal de cerco, en tanto, se registraron 7 especies de 483 lances de pesca.

Captura y mortalidad incidental por especie en la flota cerquera artesanal que operó sobre el recurso anchoveta, entre las regiones de Arica y Parinacota a Antofagasta. Datos provenientes del registro de observadores científicos sobre 483 lances de pesca comerciales durante el periodo 2017-2019.(Tabla 2)
Captura y mortalidad incidental en la flota cerquera artesanal que operó sobre el recurso anchoveta, entre las regiones de Arica y Parinacota a Antofagasta. Datos provenientes del registro de observadores científicos sobre 483 lances de pesca comerciales durante el periodo 2017-2019.(Tabla 2)

Aun así, Araya alerta que “la falta de datos confiables sobre los niveles de descarte y pesca incidental genera incertidumbre en la evaluación de la mortalidad total por pesca, introduciendo errores en las estadísticas pesqueras y en las estimaciones de rendimiento y esfuerzo, así como en la evaluación de las medidas de administración, alterando además las bases de la asesoría científica para el manejo bajo un enfoque ecosistémico. No obstante, la evaluación de los descartes es una tarea compleja porque en general éstos no han sido estimados correctamente y si bien se han observado mejoras en el número y diversidad de programas de observación, programas de autoreporte y sistemas de monitoreo electrónico, todavía existen muchas pesquerías y regiones para las cuales no existe información al respecto”.

Muerte de aves en Iquique – Gentileza ONG Golondrina de Mar
Muerte de aves en Iquique. Gentileza ONG Golondrina de Mar

Por ello, algunos buscan cambios mayores en la normativa que aseguren buenas prácticas en una de las pesquerías más grandes del mundo.

Correr el cerco

El académico de la Universidad Arturo Prat indica que “en la pesquería del norte de Chile participan dos tipos embarcaciones de cerco, la industrial (alrededor de 57 embarcaciones al año 2017) y la artesanal (eslora entre 9 a 18 m con un promedio de 16 m, 143 embarcaciones al año 2017). La flota artesanal generalmente opera entre la costa y en las 5 millas náuticas”.

Pesca cerquera en Iquique ©Pukara Foto
Pesca cerquera en Iquique @pukarafoto

En ese sentido, existen normativas que son de interés en esta materia. Por un lado, el artículo 7 C de la ley de pesca instaura la obligatoriedad de devolver al mar aquellos mamíferos marinos y aves marinas que quedan atrapadas en las redes, aunque González advierte que “al parecer esto no sería aplicado por quienes tienen la toma de decisiones a bordo de las embarcaciones con el consecuente desenlace que ya vimos”.

Por otro lado, se encuentra la resolución n° 718-21 de la Subsecretaría de Pesca que establece la nómina de especies objetivo, de fauna acompañante y de pesca incidental para la pesquería de la anchoveta entre las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá y Antofagasta.

Además, un fallo de la Corte Suprema sacó a la industria pesquera de las 5 millas, lo que repercutió – según distintas fuentes – en un boom de construcción de lanchas menores a 12 metros, a través de las cuales la industria terceriza la actividad extractiva a través de estas embarcaciones artesanales o semi-industriales.

Muerte de aves en Iquique ©Pukara Foto
Muerte de aves en Iquique @pukarafoto

Al respecto, Oliva señala que “lamentablemente es muy poco lo que a nivel local se puede generar dada la excesiva centralización del modelo pesquero y la toma de decisiones. Es insólito pero gran parte de lo que está sucediendo es considerado legal por la actual ley vigente, en particular sobre los elementos que propone la ley de pesca para poder categorizar lo que es la pesca artesanal, dado que después de la resolución de la Corte Suprema que se acaba el cerco industrial de las 5 millas, lo que ha sucedido es un afloramiento de distintas embarcaciones artesanales que, en definitiva, dada la incapacidad de la industria de poder trabajar en la zona de resguardo, están siendo estas embarcaciones artesanales transformadas en lanchas cerqueras, con una eslora menor a 18 metros, lo que les permite pescar cerca de la costa. Eso hoy día es legal”.

Por este motivo, algunos piden recategorizar al sector artesanal y mover el cerco lejos de la costa, donde se concentran algunas especies de aves, como los cormoranes.

El concejal de Iquique agrega: “Lo que hemos hecho a nivel parlamentario es presentar un proyecto de ley que pueda recategorizar la actividad pesquera artesanal y también cerrar la primera milla en particular o restringir en su totalidad la actividad cerquera en lo que son las primeras millas, y en particular la primera milla. Eso tiene que ir de la mano de un proyecto de ley que logre reformular por lo menos el artículo 47 de la ley de pesca que establece una zona de protección pero que, lamentablemente, ha sido vulnerada permanentemente”.

De esa manera, buscan no solo evitar el colapso de la anchoveta, sino también del ecosistema marino y costero.

González espera que “las investigaciones y denuncias hechas lleguen a buen término y la situación ‘no quede ahí’ y que, si no se logra sancionar a los responsables, se cumplan por último criterios de buenas prácticas (que ya existen) para así poder evitar en el futuro más muertes de las distintas especies, cuya alimentación precisamente depende del mar y su balance natural”.

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