Era 16 de diciembre en la madrugada, dos días después del esperado eclipse solar total que se vio en la Región de la Araucanía. Francisco Núñez (42) llegó a su hogar después de horas de manejar, luego de días de trabajo intenso documentando y realizando actividades relacionadas a lo que para muchos fue el evento astronómico del año en Chile.

Al llegar, prendió su computador para mandar una fotografía y vio su mail. Cuando vio que en sus recibidos estaba el fallo del jurado del premio Starlight 2020, apretó rápidamente el correo y el acto seguido fue, como él dice, llorar a mares. Es que, sin esperarlo, su emprendimiento AstroFotografíaChile había recibido el reconocimiento Astroturismo: el cielo como motor de desarrollo sostenible, astroturismo y desarrollo empresarial vinculado a la protección del cielo nocturno.

©Alexis Trigo
©Alexis Trigo

Se trata de un reconocimiento que forma parte de los popularmente conocidos como “Óscar” del astroturismo, entregados por la española Fundación Starlight, que busca la difusión y promoción de la astronomía internacional, a través de diferentes proyectos. En este caso, premió una iniciativa que empezó hace cinco años, que ha funcionado principalmente por autogestión bajo la misión de posicionar a Chile como el número uno en la industria del astroturismo en el mundo, acercando los astros a las personas.

“Luego de la emoción de recibir el premio, está la responsabilidad que lo involucra. Queremos abordarlo a mayor escala, lo que es más difícil solo con la autogestión. Hay todo un equipo detrás que seguirá buscando canales de visualización y cooperación. Están todos los esfuerzos para difundir la astrofotografía, el astroturismo y la astronomía, desarrollando ideas. Logramos el premio y hay que mantenerlo para potenciar los cielos nocturnos de Chile”, dice Núñez.

AstroFotografíaChile: difundiendo los cielos nacionales

Después de muchos años en los que Núñez visitaba el valle del Elqui y participaba en distintos proyectos turísticos, se empezó a interesar en el potencial de los cielos nocturnos de Chile. En redes sociales descubrió variados fotógrafos que desde todo el mundo viajaban a la Región de Atacama especialmente a capturar las estrellas bajo su lente. A raíz de esto, investigó y se interesó en rescatar el trabajo nacional.

Partió con redes sociales, gestionando alianzas y colaboraciones con entidades públicas y privadas para potenciar el turismo astronómico en Chile. “El objetivo siempre ha sido hacer difusión de los cielos a través del astroturismo, la astrofotografía y la astronomía como motor principal”, comenta Núñez.

©Alexis Trigo
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Esto, en un país que cuenta con una Hoja de Ruta para el Astroturismo en Chile (2016-2025), financiada por la Corporación de Fomento a la Producción (CORFO), que destaca el potencial astroturístico nacional para ser considerado “el más relevante del mundo”, en especial en localidades del norte como San Pedro de Atacama, Vicuña o el valle del Elqui, y otras en las regiones de Atacama y Coquimbo. Lugares que, además, cuentan con destacados observatorios como Mamalluca o Tololo.

Así, lo que se busca es “aterrizar” los cielos nocturnos hacia las personas. Compartir aquellos conocimientos científicos de los astrónomos para hacerlos más cercanos, y dar a conocer los trabajos que se vinculan a toda esta área.

“Con fenómenos como el cometa Halley en los años 80’ o la temporada de eclipses que estamos viviendo en Chile, realmente hay mucho interés por la astronomía. Viendo esto y el trabajo de un sinfín de personas, como la Fundación Chilena de Astronomía, nuestro trabajo es difundir a fotógrafos de nuestros cielos. Así utilizamos las redes sociales para empezar, etiquetamos instituciones, fotógrafos, hablamos de una ruta escénica, de un turismo de imagen”, comenta Núñez.

De esta forma, logró alianzas con la Film Commission Chile, La Fundación Chilena de Astronomía, El Instituto de Astrofísica de la Pontificia Universidad católica, el Instituto Milenio de Astrofísica MAS, la Oficina de Protección de los Cielos Nocturnos del Norte de Chile, la Fundación Cielos de Chile, PhotoPills, además de colaboradores menores y particulares que han apoyado y confiado en el proyecto.

Con ese apoyo, han podido desarrollar tours astronómicos a diferentes partes de Chile y sus observatorios, charlas, talleres de astrofotografías, observaciones con telescopios y capacitaciones a emprendedores sobre astroturismo. Además, han desarrollado series de podcast sobre astronomía y astrofotografía que mantienen publicados en su página web.

Cielos nocturnos: una alternativa de desarrollo sostenible

Una de las principales misiones, dice Núñez, es acercarse a los más jóvenes: “Se les puede mostrar a los más jóvenes que pueden hacer un match con la astronomía, ya sea desde la arqueología, la biología, la química, la matemática, e incluso desde el arte o la música. Si tu les muestras con ganas este mundo de inmensa información y que estamos en un lugar privilegiado, es posible que tengamos más astrofísicos, astrónomos, astrofotógrafos o personas que vean el potencial de sus cielos y comprendan que pueden ser un motor de desarrollo sostenible”.

En ese sentido, se puede abarcar una línea de turismo que implica la neta observación y atención del visitante, que involucra un aporte a las economías locales de distintos pueblos de Chile. De hecho, las proyecciones de la ya mencionada hoja de ruta, estimaban -sin considerar un contexto de pandemia- que las visitas se triplicarían y los ingresos se multiplicarían por cuatro en relación con el astroturismo. Esto involucraría a los dos eclipses ya pasados, que tuvieron su totalidad en San Pedro de Atacama (2019) y en la Región de la Araucanía (2020).

©Alexis Trigo
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Pese a que las medidas de confinamiento sí afectaron a esta área, como a todo el turismo, incluyendo las limitaciones de salir de noche por el toque de queda, Núñez se mantiene optimista porque el astroturismo en Chile, dice, “tiene un valor tremendo”.

“Si enfocas en esto tu emprendimiento, el desarrollo que tengas va de la mano de la educación y el lenguaje. Eso es lo que hay que entender: a partir de los cielos, su cuidado -por ejemplo, combatir problemas como la contaminación lumínica-, su lectura y el trabajo a través de ellos, se pueden lograr cosas buenas, bonitas e importantes. Estamos en una red que esperamos que crezcan proyectos para apoyarlos y abrirlos al mundo”, agrega.

De esta forma, con el premio otorgado por la Fundación Starlight, AstroFotografíaChile busca, a través de todo el equipo de astrofotógrafos, astrónomos y profesionales que participan del proyecto, continuar con más iniciativas y asociaciones. En un futuro, buscan desarrollar una línea de documentales, hacer un registro nacional y rutas de astroturismo en Chile, así como proyectos relacionados con la arqueología y las herencias de culturas ancestrales y sus lecturas de los astros.

©Fernando Guzmán
©Fernando Guzmán

Así, uno de los desafíos más grandes es educar a través de los cielos a las personas. Dejar de ver el suelo y mirar al cielo: abrir rutas de astroturismo y entregarles a las personas posibilidades de desarrollar proyectos en relación con esto. De esta forma, comenta Núñez, en Chile están todas las herramientas para desarrollar el astroturismo, entonces es importante crear consciencia y que gente se empodere de los cielos, el cuidado de ellos, de conocerlos, y creo que ahí hay un motor de desarrollo sostenible importante”.

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