Todos los viernes, sin falta después de clases , protestan en La Moneda. Toman los carteles que ellos mismos confeccionaron que dicen mensajes como “-ego, + eco”, y alzan la voz. Así buscan que el gobierno los escuche y que tome acciones para ayudar a combatir el cambio climático: insisten por una transición energética a energías renovales no convencionales, la reforestación de 600 mil hectáreas de bosque nativo y promover, informar y proteger la participación ciudadana mediante educación ambiental, entre otras exigencias.

“Voy cada viernes a manifestarme en la moneda para alzar mi voz y defender a la madre tierra y a todos los seres quienes la habitan para poder alcanzar el futuro que tanto he soñado y que cada vez se ve más irrealizable. El tiempo se nos está agotando y si no actuamos ahora podríamos acabar sin nada”, comenta Katherinne Ovalle, activista de Fridays for Future Santiago.

Cortesía de Patagonia
Cortesía de Patagonia

Junto a ellos, otros jóvenes universitarios manifiestan su apoyo buscando un mismo objetivo. Son medioambientalistas independientes que participan de manifestaciones, marchas e intervenciones, además de comunicar su mensaje por las redes sociales. “Trato de representar desde mi parte, mi sentido y todo lo que significa para mí tomar acción por el cambio climático”, dice Macarena Mella, activista medioambiental de 23 años.

Marcha mundial por el clima

El 27 de septiembre de 2019 se realizó en 150 países una marcha en protesta del cambio climático. En Chile las imágenes de la Alameda repleta llamaron la atención, ya que cerca de 15 mil personas fueron a protestar. En esa oportunidad los jóvenes activistas no se quedaron fuera.

©Martín del Río
©Martín del Río

Es en este contexto que Patagonia no se quedó afuera y lanzó una campaña durante esa semana para dar más protagonismo a los jóvenes activistas por el medioambiente. El día de la marcha la empresa cerró todas sus tiendas para estar presente en la Alameda, además de llevar gigantografías y carteles en apoyo de la causa joven.

Junto a esto, en las mismas tiendas, redes sociales y sitio web, se están dando a conocer las voces y miradas de los miembros de Fridays Fort he Future y otros jóvenes,  a través de imágenes impresas gigantes y banners en medios nacionales. Además, como parte de la campaña, se convoca a todos a firmar una petición dirigida al Gobierno chileno, apuntando que sus acciones no pueden ignorar ya los alcances del cambio climático.

“Creo que los impactos más grandes se han visto en la marcha que Patagonia fue con los rostros de los activistas y eso fue un alcance mucho más potente para nuestra generación”, dice Mella, quien agrega: “Me han llegado muchos comentarios de que la campaña es muy potente, de que se está notando, y eso obviamente a nosotros como activistas nos beneficia porque nos hace visibilizar de que hay un problema presente”.

“Este movimiento no se trata de nosotros. Estamos orgullosos de apoyar a los jóvenes manifestantes uniéndolos y ofreciéndoles una plataforma para expresar sus preocupaciones y esperanzas para el futuro. Es lo menos que podemos hacer, sabiendo que los estamos dejando con la perspectiva de una tierra inhabitable. Creemos que es nuestra responsabilidad con las generaciones actuales y futuras”, dice Tania Garimani, Directora de Marketing de Patagonia.

¿Qué es lo que sigue?

Cortesía de Patagonia
Cortesía de Patagonia

Según explica Mella, gracias al apoyo de Patagonia,  en el último tiempo los jóvenes activistas se han sentido más escuchados y han tenido nuevos adherentes. Sin embargo, la lucha y las manifestaciones continúan para seguir presionando al gobierno para que tomen acciones inmediatas.

Es por esto que el próximo paso, dice, es seguir manifestándose, interviniendo y marchando: “Obviamente con las pasiones y convicciones; todo lo que nos hace sentido al final. Es por el planeta, la naturaleza, los animales y nosotros”.

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