Los tesoros que esconde la primera Área Marina Protegida en Tierra del Fuego
En este Día Internacional de los Océanos, no se pierdan esta galería que muestra la espectacular fauna submarina que pudimos observar a principios de este 2018, cuando fuimos parte de la inédita Expedición Marina al Seno Almirantazgo de WCS.
A fines de enero me embarqué diez días junto al equipo de científicos de la Expedición Marina al Seno Almirantazgo, liderada por la ONG WCS. A bordo del Marypaz II, una embarcación adaptada para fines turísticos y de investigación, navegamos por los canales patagónicos estudiando el estado de conservación de los bancos de ostiones del sur, un recurso de gran valor comercial para la región. Pero también gracias a un equipo de buzos liderado por el biólogo marino alemán, Dirk Schories, pudimos conocer la espectacular y escasamente estudiada fauna submarina que habita estas aguas remotas.
Sólo unas semanas después de nuestro regreso, la ex Presidenta Michelle Bachelet, firmaría el 27 de febrero de 2018 los decretos de creación de dos nuevas Áreas Marinas Protegidas en Magallanes: Seno Almirantazgo e Islas Diego Ramírez – Paso Drake, que incrementaron la superficie de protección de los mares, canales y fiordos australes de Chile de un 0,1% a casi 21%.
Pero… ¿qué podemos encontrar en este seno que se interna 80 kilómetros en dirección sureste en Tierra del Fuego y rodeado por las montañas del Parque Nacional De Agostini y el Parque Karuinka? La respuesta se las entregamos a través de esta espectacular galería, cortesía de los buzos que formaron parte de la Expedición Marina al Seno Almirantazgo, Dirk Schories y Mateo Cáceres, además de Jorge Vidal, guardaparques de Karukinka quien nos acompañó en un inicio de la expedición y la ONG Wildlife Conservation Society.
El Área Marina Costera Protegida de Múltiples Usos (AMCP-MU) Seno Almirantazgo, abarca 764 kilómetros cuadrados y es la primera área marina protegida de Tierra del Fuego. Ésta protege ecosistemas subantárticos únicos.
Aquí habita la única colonia de albatros de ceja negra de la que existe registro que anide en la zona de canales y fiordos, en aguas interiores. Lo que le otorga especial valor de conservación desde el punto de vista ecológico y evolutivo.
También es el hogar de elefantes marinos, la foca más grande del mundo. La caza indiscriminada casi acabó con esta especie, pero lentamente ha regresado a la Patagonia donde ha encontrado un lugar ideal para habitar y reproducirse: bahía Jackson.
Sin embargo, es la fauna submarina del Seno Almirantazgo, la que más incógnitas mantiene. ¿Qué especies habitan estas aguas casi inexploradas? Es la pregunta que teníamos antes de partir esta aventura.
En la zona era común ver los bosques de macroalgas o huiros en las orillas. Éstos juegan un importante rol en los ambientes marinos ya que son utilizados como áreas de reproducción, alimentación y refugio por muchos organismos. Fue precisamente en uno de estos bosques, que los buzos encontraron una minúscula medusa, que podría tratarse de una especie nueva para la ciencia (Cnidaria, en la foto).
Los ostiones del sur eran especialmente abundantes en el área y representan un importante recurso de alto valor comercial, para las comunidades y pescadores artesanales locales. Esa capa gris que se ve en la fotografía, es el sedimento arrastrado por el agua glaciar.
El equipo de buzos, conformado por Dirk Schories, Jorge Holtheuer, Mateo Cáceres y Hans Bartsch, llegó hasta los 47 metros de profundidad encontrando en su camino especies tan extrañas como esta estrella canasta.
Incluso vieron pulpos.
O peces que se escabullían rápidamente entre las rocas del fondo marino.
Y enormes nudibranquios o babosas de mar.