Chile: un refugio de naturaleza indómita
Poco a poco en Chile se va haciendo más conocida nuestra espectacular fauna, que a lo largo del territorio encuentra especies tan únicas como el pudú, la ranita de Darwin o el imponente cóndor andino. Hoy Jean Paul de la Harpe, biólogo y fotógrafo, nos muestra a través de sus espectaculares fotografías algunas de las especies que dan vida a nuestro territorio en los distintos ambientes que conforman nuestro país.
Cuando pensamos en fauna asombrosa, probablemente se nos vienen a la cabeza imágenes que hemos visto a través de NatGeo o Animal Planet de los majestuosos leones, las increíbles migraciones de mamíferos que ocurren en África, o algún otro animal como el oso polar o los elefantes asiáticos. Esa es la imagen que reside en nuestro inconsciente ya que desde pequeños hemos visto películas o escuchado cuentos de este tipo de fauna. Pero no existe lugar en el planeta en donde no podamos encontrar maravillosas formas de vida, y Chile no escapa a ello. Es más, en nuestro país podemos encontrar una fauna asombrosa, que ha sabido adaptarse a una tierra de extremos, con condiciones ambientales que muchas veces desafían la permanencia de la vida. Una fauna que en gran parte es endémica, o sea, solo pertenece a esta zona del planeta. Es tanto así que más del 70% de los anfibios y reptiles que habitan el territorio chileno solo se pueden encontrar aquí.
Probablemente el motivo por el cual nuestra fauna no es tan conocida o valorada, es porque es mucho más críptica que la que encontramos en otras zonas, como el trópico. Aquí, el nivel de mimetismo de las especies con su ambiente es muy alta, por lo que verlas en terreno puede ser a veces muy desafiante. Además, gran parte de los animales que uno ve en un excursión a la naturaleza, son aves y reptiles y con suerte algunos mamíferos. Otros grupos como los anfibios son más difíciles de observar, debido a sus hábitos nocturnos, y siempre asociados a humedales o cursos de agua.
Diferentes ambientes, diversas especies
En el altiplano, la vida ha sabido encontrar su camino y proliferar por todos los rincones, desarrollando adaptaciones fisiológicas específicas únicas en el mundo como es el caso de las vicuñas y los guanacos, grandes mamíferos perfectamente adaptados a la escasez de oxígeno. Otros mamíferos que destacan en esta zona son la vizcacha, el zorro, gato andino y el puma. En cuanto a las aves, habitan cóndores, suris, guayatas y las tres especies de flamencos que habitan en Chile (Flamenco andino, Flamenco de James y Flamenco Chileno).
En el mar de nuestro país, tanto bajo como sobre el agua, podemos encontrar grandes concentraciones de vida, como cardúmenes de peces y aglomeraciones de aves como pingüinos, piqueros, pelícanos y diversas especies de cormoranes. Es también relevante destacar la cantidad y diversidad de mamíferos marinos, ya que se estima que el 50% de la diversidad mundial de este grupo está representada en las costas chilenas. Destacan aquí varias especies de ballenas, como la gran ballena azul, diversos tipos de delfines, marsopas, lobos y focas.
Los humedales son otro ambiente que concentra una gran cantidad de aves, llegando a encontrarse hasta un centenar de especies como el siete colores, la garza cuca, el rayador y distintos tipos de patos que vienen a poblar estas reservas de vida. También mamíferos como el coipo y el quique son habitantes habituales de estos ambientes.
En la cordillera, la presencia del Rey de los cielos, el cóndor, es omnipresente, junto a una gran cantidad de aves rapaces, reptiles y mamíferos como la vizcacha.
Aunque quizás uno de los ambientes con más endemismos en Chile lo representa el bosque y matorral esclerófilo, que cubre la zona central de Chile, siendo el Paque Nacional La Campana una muestra representativa de este ambiente. Este ecosistema alberga también una buena parte de la biodiversidad en aves, reptiles y anfibios. Especies como la turca, el águila, la perdiz chilena, la iguana chilena, y el sapo arriero son comunes en los valles y faldeos precordilleranos. También es posible encontrar a grandes mamíferos, como zorros y el solitario puma.
Más al sur, en los bosques templados, encontramos una fauna sorprendente, dentro de la cual sobresalen increíbles aves como el pájaro carpintero negro, que cumple su función de mantener los árboles libres de larvas. Los mamíferos también están presentes, siendo posible encontrar especies tan únicas como el monito del monte, uno de los marsupiales más primitivos del mundo, y el pudú, el ciervo más pequeño del mundo.
Los bosques patagónicos, principalmente formados por lengas y ñirres, son el hogar y refugio de muchas especies, como el carpintero negro, el gato de geofroy, y el imponente huemul. Este último es el ciervo más austral de América, y quizás uno de los más dóciles que podemos encontrar. Esta misma característica de su temperamento hizo que fuera muy fácil cazarlo, y por esa razón se estima que la población mundial actual no supera los 2.000 ejemplares.
Chile es un refugio de vida, que nos invita a internarnos en nuestra intrincada geografía, la cual está poblada por un fauna única y maravillosa. Solo hace falta abrir nuestros sentidos y dejarnos llevar por el ritmo natural de esta naturaleza indómita.
Los invito a descubrir esta increíble fauna en mi reciente libro “Chile, Naturaleza Indómita”, donde a través de mis fotografías recorro este largo territorio al sur del continente sudamericano, que alberga una variedad única de paisajes y ecosistemas, interconectados entre sí, pero a la vez muy diferentes entre ellos. Cada imagen de este libro cuenta una historia. Una historia de una naturaleza que no ha podido ser doblegada, que ha sabido encontrar el camino en épocas difíciles, de cataclismos y extinciones. Una naturaleza de la cual somos parte. Una naturaleza Indómita.
Autor: Jean Paul de la Harpe Zubiaur
Editorial Kactus, 144 páginas (más de 150 fotografías). Tapa dura.
El libro se encuentra en las principales librerías del país, y también se puede comprar directamente escribiendo al correo info@abtao.cl, en cuyo caso el libro irá autografiado por mí.