Ricardo Segovia, investigador del Instituto de Ecología y Biodiversidad: “Esperamos conformar una comunidad Latinoamericana en informática de la biodiversidad”
Ricardo Segovia, integrante del Programa BIODATA, participó en el VI Foro Internacional de Justicia Ambiental, un encuentro interdisciplinario que contó con la participación de expositores nacionales y extranjeros, quienes debatieron y compartieron experiencias sobre aspectos legales, científicos y tecnológicos, en torno a la justicia ambiental y la conservación de la naturaleza.
Desarrollar las capacidades para permitir la toma de decisiones basadas en evidencia y conformar una fuerte comunidad Latinoamericana en informática de la biodiversidad, fueron los grandes desafíos que adquirió el IEB durante el VI Foro Internacional de Justicia Ambiental, realizado el 18 y 19 de noviembre.
La actividad interdisciplinaria, organizada por el Segundo Tribunal de Justicia Ambiental, de Santiago, tuvo por foco abordar los desafíos en la protección de la biodiversidad, con la participación de expositores nacionales y extranjeros, quienes debatieron y compartieron experiencias sobre aspectos legales, científicos y tecnológicos, en torno a la justicia ambiental y la conservación de la naturaleza. Todo esto, considerando los retos actuales y grandes impulsores de la pérdida de diversidad biológica, tales como el cambio climático, la contaminación, la sobreexplotación de recursos naturales, la pérdida de hábitats y la introducción de especies exóticas invasoras.
Durante la inauguración del foro, la Presidenta del Tribunal Ambiental, Marcela Godoy, explicó que para definir la temática de esta versión del Foro, se consideró la creación y puesta en marcha del Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP).
Bases de datos para la protección de la naturaleza
La jornada se desarrolló a través de cinco paneles temáticos y dos charlas magistrales. En una de esas mesas, denominada “Biodiversidad y Cambio Climático: Impactos y Adaptación”, participó el investigador del Instituto de Ecología y de Biodiversidad y de la Universidad de Concepción, Ricardo Segovia, quien compartió detalles del trabajo realizado en el Programa BIODATA, enfocado en el desarrollo de una base de datos de la biodiversidad de Chile, creada en colaboración con las colecciones biológicas de Chile.
Al respecto, el científico recalcó la importancia de generar algo que aún no existe: un catálogo confiable que permita integrar la base de datos de la Biodiversidad de Chile. Esto es clave para tomar decisiones en conservación, y en el cual se está trabajando.
“Ésta es una actividad muy importante y como IEB es la primera vez que asistimos. Las iniciativas en materia de biodiversidad que tiene el Tribunal Ambiental de Santiago buscan presentar un marco legal para la resolución de conflictos. Una institucionalidad así es fundamental para la conservación de la biodiversidad en Chile. Por otro lado, que el IEB se vincule con el sector público es fundamental, porque le da sentido a la investigación que se realiza en este centro, saliendo de los papers y avanzando hacia el espacio social, tanto público como privado”, indicó Segovia.
En tanto, Cristián López, Ministro de Ciencia del Segundo Tribunal Ambiental, destacó la importancia de la participación del IEB en este foro. “Estamos trabajando en la ley que crea el SBAP. Para ello, la justicia ambiental requiere la mejor información, y en ese sentido, al vincularnos con centros de investigación nacionales e internacionales y universidades, estamos promoviendo mejor justicia, más oportuna y más adecuada para la toma de decisiones en materia ambiental”.
El investigador de la UDEC, se refirió también a la ventaja de tener bases de datos locales, que pueden tener “un mayor cuidado con la información”. Esto por ejemplo, al momento de poner un margen de error en las locaciones de especies amenazadas por el tráfico ilegal.
Además, destacó la relevancia de unir esfuerzos a nivel regional: “Esperamos conformar una comunidad Latinoamericana en informática de la biodiversidad. Hemos desarrollado muchas herramientas y podemos avanzar en construir una comunidad de soporte y apoyo para implementarlas en distintos contextos. Esto permitiría empezar a pensar en herramientas de monitoreo de la biodiversidad en una escala continental. Creo que es posible y están las condiciones dadas”.
Ejemplo y colaboración internacional
Entre las y los invitados, también destacó la presencia de Cecilia Londoño, Coordinadora de SIB Colombia (una Red nacional de datos abiertos sobre biodiversidad) e investigadora del Instituto Humboldt de ese país. La bióloga fue parte del panel “Ciencia y Tecnología para la Conservación de la Biodiversidad”, en el que abordó la importancia de los datos de biodiversidad para la toma de decisiones y la experiencia del trabajo realizado en Colombia.
“Los datos son el ingrediente general para dar soluciones y entender los problemas que tenemos, ayudando a la transformación de los conflictos ambientales. A mayor calidad de los datos, mejores serán las decisiones tomadas. Necesitamos constituir sistemas de información no solo de especies y su identidad taxonómica, sino de muchas otras variables, como los procesos ecosistémicos. La informática de la biodiversidad ha avanzado mucho, pero hay que seguir adelante, generando una mayor cultura de los datos, especialmente en América Latina”, indicó la investigadora colombiana.
La bióloga destacó la importancia de “descolonizar” la ciencia, generando mayor retribución hacia las comunidades locales Latinoamericanas que habitan los territorios y colaboran en el monitoreo y levantamiento de información sobre biodiversidad, permitiendo un acceso libre y más justo a la información. En ese marco, se refirió al aporte que realizan comunidades indígenas en Colombia en el monitoreo de sus ecosistemas. Asimismo, abordó el trabajo de SIB Colombia, orientado a que los registros biológicos puedan quedar a disposición de la ciudadanía y diferentes públicos. “Sin embargo, es muy importante entender que la información debe ser bien utilizada y por eso un lema de la ciencia de los datos es que debe ser tan abierta como se pueda, pero tan cerrada como se necesite”.
Cecilia Londoño señaló que es importante fortalecer alianzas en Latinoamérica y en ese contexto, indicó que están iniciando conversaciones con BIODATA y el IEB, a fin de incentivar futuras colaboraciones.
“Esperamos que pronto se pueda generar un marco de colaboración con el IEB. Al igual que el Instituto Humboldt, este centro también hace modelamiento de datos, tiene colecciones biológicas y posee una red académica detrás muy poderosa. Así que tenemos funciones y retos muy similares que podemos compartir”, afirmó la investigadora.
Charlas magistrales y discusiones
La jornada internacional también contó con dos charlas magistrales. Una de ellas, estuvo a cargo de la directora nacional del Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas, Patricia Ibáñez Crino, quien abordó los desafíos que enfrenta la implementación del SBAP. También, participó el fundador y CEO de LEMU, Atlas de la Biósfera, Chile. Leo Prieto, quien expuso sobre la brecha de datos de la naturaleza y el trabajo que realiza a través del primer satélite para la protección de la biodiversidad lanzado al espacio.
Por otro lado, Pilar Moraga, directora del CR2, habló en detalle sobre el Acuerdo de París y cómo los distintos países han incluido o excluido a las Soluciones Basadas en la Naturaleza, dentro de sus NDC (contribuciones determinadas a nivel nacional). Al respecto, destacó que los países “en desarrollo” son aquellos que más incluyen esta dimensión, considerando que son estas naciones las que más dependen de sus recursos naturales.
Esta nota fue realizada por el Instituto de Ecología y Biodiversidad IEB-Chile.