Dengue: qué se sabe sobre el virus que tiene a Argentina bajo un brote histórico
A la fecha, la oleada de contagios por dengue en Argentina lleva más de 230 mil casos reportados, y la triste cifra de 161 fallecidos. El virus, que se transmite a través del mosquito Aedes aegyptus acumula una incidencia de 495 casos cada cien mil habitantes. A esto se suman las disparidades en acceso a repelentes y vacunas, lo cual deja a más expuesta a la población más pobre del país.
Fiebre alta, dolor de cabeza y detrás de los ojos, náuseas, vómitos, dolores musculares y articulares, entre otros manifestaciones más graves como hemorragias y daño hepático, son algunos de los síntomas que genera el dengue, un virus originado en África, cuyo registro más antiguo data del 265 DC, y que en América se conoció a fines del siglo XVIII.
El dengue grave con peligro de muerte inminente afecta al 5% de los enfermos, y se caracteriza por extravasación de plasma, hemorragias y compromiso de órganos. Las personas con enfermedades de base presentan mayores riesgos en el caso de contagiarse con dengue grave, y los segundos contagios suelen ser muy agresivos también.
Respecto de la inmunidad post contagio, esta es permanente contra el serotipo específico con el cual se contagió una persona, pero la inmunidad cruzada (contra los otros tres serotipos) va solo de dos a seis meses, en el mejor de los casos.
El virus se trasmite por la picadura del mosquito Aedes aegyptus, el mismo que también puede transmitir fiebre amarilla, zika y chikungunya. No se contagia directamente entre personas, su vector es el mosquito. Así, cuando pica a alguien que está enfermo de dengue, este se infecta, y luego, al picar a otra persona, la contagia. El tema es un problema mundial, y cada año se producen alrededor de 390 millones de infecciones por dengue.
Cualquier recipiente que acumule agua puede convertirse en un criadero del mosquito, por lo cual es muy difícil de controlar. Las lluvias en verano, por ejemplo, generan pozas de agua estancada ideales para su reproducción, pero donde más se reproducen es en las casas: florero, bebederos de mascotas, baldes, botellas, tanques y más. De ahí la importancia de no acumular agua y de limpiar de manera permanente los recipientes.
El mosquito
El Aedes aegypti vive un promedio de tres semanas. El macho se alimenta de savia vegetal y la hembra de sangre, siendo esta la que transmite el virus. Ponen alrededor de 1500 huevos a lo largo de su vida.
Estos huevos, por su parte, pueden resistir la sequedad y sobrevivir por más de seis meses. Cuando el recipiente se vuelve a llenar de agua, se convierten en larvas. El ciclo de vida del mosquito, de huevo a adulto, puede completarse en siete días, y luego vivir semanas.
Por otras parte, este mosquito no vuela largas distancias: en toda su vida, vuela unas pocas cuadras (unos 150 metros del lugar donde nació).
El Aedes aegypti suele ser más pequeño que otros mosquitos, con menos de un centímetro de diámetro. Se puede reconocer por su color oscuro, que puede ser café o negro, y porque tiene rayas blancas en su cuerpo y patas. Esta última característica es la clave para diferenciarlo de otros mosquitos comunes.
El mosquito prefiere el calor y climas más tropicales, aunque se ha ido adaptando a climas más fríos, y expertos han advertido que ya no mitigará en invierno, como solía ser.
En diálogo con Infobae, el médico Fabio Ghilardi, referente para dengue en Médicos Sin Fronteras, comentó que “los cambios ambientales como el calentamiento global y los períodos de sequía seguidos de fuertes lluvias pueden ser factores de riesgo para el aumento de casos de dengue, ya que crean condiciones favorables para la reproducción y propagación del mosquito”.
Presencia en Latinoamérica y el caso argentino
Aunque la epidemia de dengue es regional y ha aumentado en toda América Latina y El Caribe, ha tenido mayor impacto en el Cono Sur, y los países más afectados son Brasil, Paraguay y Argentina. Le siguen Bolivia, Colombia, Perú y Ecuador, y también Uruguay. Por su parte, México y los países de Centroamérica han registrado más de 78 mil casos.
En el caso de Argentina, hasta el momento el dengue se ha hecho presente en varias provincias del país, en las regiones del Centro, noroeste y noreste. Esto incluye Buenos Aires, Córdoba, Entre Ríos, Santa Fe, Catamarca, Jujuy, La Rioja, Salta, Santiago del Estero, Tucumán, Corrientes, Formosa, Chaco y Misiones.
El Ministerio de Salud argentino informó que en lo que va de la temporada, hay registrados 232.996 casos de dengue y 161 fallecidos. Junto con esto, se aseguró que hay un mayor número de casos por semana en comparación con 2023.
Aunque existen cuatro serotipos de dengue en la región, en esta temporada, según las últimas informaciones del ministerio, se han identificado tres serotipos circulando en el país, con predominio del DEN-2, DEN-1 y DEN-3. Por otra parte, expertos aseguran que el descenso de contagios será lento, y que va a depender de las condiciones climáticas. De momento, las instrucciones son la eliminación de agua estancada en los hogares, el uso de repelentes e insecticidas. También se recomienda el uso de mosquiteros en ventanas y puertas.
Este problema de salud pública, en el caso argentino, lamentablemente no termina aquí. Los repelentes escasean hace semanas, en sistemas de comercio online los precios llegaron hasta $90 mil pesos por unidad, y la vacuna (salvo en algunas provincias que comenzaron a gestionar vacunas de manera independiente), no está asegurada por el Estado de forma gratuita. Vale decir, cada ciudadano debe pagarla por su cuenta, y su valor asciende a los $120.000 aproximadamente, lo cual genera una brecha importante en la población, quedando los sectores más pobres desprotegidos frente al virus. Y a esto se suman, además, las disparidades en el acceso a saneamiento de la población más vulnerable.
En Chile, por su parte, solo existe el dengue autóctono en Rapa Nui. Los casos de dengue identificados en Arica y el Maule han sido todos importados, es decir, los contagiados se han infectado en el extranjero. Si bien hay presencia del Aedes aegyptus en el norte del país, no existe dengue autóctono en el continente.