Tras la aprobación del SBAP: ¿Qué pasará con la administración de las áreas protegidas?

Durante el mes de junio, la Cámara de Diputados y Diputadas votó el informe que emanó de la Comisión Mixta permitiendo que el proyecto que crea el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP) quede listo para convertiste en ley, tras 12 años de tramitación. Dentro de las principales características del SBAP, está la creación de un servicio público robusto que ayude a enfrentar la dispersión institucional de las áreas protegidas, que estaban repartidas en cinco ministerios distintos (Agricultura, Economía, de las Culturas, Bienes Nacionales y Medioambiente).

En este contexto, la reciente aprobación de la ley que crea el Servicio Nacional de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP) ha generado ciertas dudas en la población respecto al futuro de la Corporación Nacional Forestal (CONAF), ente que hasta el momento era el encargado de administrar las áreas terrestres protegidas de Chile. La nueva ley ha determinado que todas las áreas protegidas administradas por la CONAF serán traspasadas al Servicio Nacional de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP), junto con sus recursos financieros. Así, después de 50 años de historia, esta nueva legislación transformará gran parte de las funciones de este organismo. Es importante mencionar que la Gerencia de Áreas Protegidas de CONAF «migrará» al SBAP, traspasando todos los conocimientos y experiencia que han adquirido durante estos años.

La CONAF es una entidad de derecho privado dependiente del Ministerio de Agricultura, cuya labor principal es administrar la política forestal de Chile y promover el desarrollo del sector. Fue creada en 1973, durante el gobierno de Salvador Allende, con el objetivo de contribuir a la conservación, incremento, manejo y aprovechamiento de los recursos forestales del país. En sus inicios, la CONAF se encargaba de velar por el resguardo de los parques nacionales y la protección de los bosques, contando con guardaparques y brigadas especializadas en combatir incendios forestales.

El Ministerio de Medio Ambiente asegura que la CONAF no desaparecerá con la creación del SBAP y que los demás programas, como el control de incendios forestales y el fomento forestal, continuarán operando. Junto a esto, un comunicado oficial del Ministerio de Medio Ambiente destaca que los sindicatos de la CONAF han sido escuchados durante todo el proceso de tramitación de esta ley.

Ladera Sur conversó hace unas semanas con la ministra de Medio Ambiente, Maisa Rojas, autoridad que comentó sobre este traspaso de CONAF a un único servicio público: “Hoy en día existen algo así como 500 guardaparques y cuando el servicio comience a funcionar va a aumentar a 1000, o sea, va a duplicar el número de guardaparques. Este cambio viene con un financiamiento sustantivo y de esa manera nos vamos a asegurar de que los parques tengan su guardaparque que puedan darle esa protección que con tanto cariño hacen en CONAF, de ese modo, este traspaso permite que puedan hacerlo mucho mejor”.

Juan José Donoso Rodríguez, ex jefe de la División de Recursos Naturales y Biodiversidad en el Ministerio del Medio Ambiente, quien trabajó por cinco años en la Ley SBAP y actualmente es director ejecutivo en The Nature Conservancy en Chile, comenta que esta ley crea este nuevo servicio público, que contará con todo el conocimiento y experiencia de CONAF en la gestión de áreas protegidas, ya que todo su personal será traspasado al servicio «generando una institucionalidad moderna y con los incentivos bien alineados: el SBAP 100% enfocado en la conservación de la naturaleza bajo la institucionalidad ambiental, y CONAF enfocado en el control y prevención de incendios y la gestión forestal, bajo el Ministerio de Agricultura».

Con respecto a lo que sucederá con la administración de las áreas protegidas en el país explicó que es un salto adelante en estas zonas, ya que elimina la dispersión de áreas protegidas gestionadas bajo distintos servicios públicos y ministerios, aunándolas bajo el SBAP, creando un Sistema Nacional de Áreas Protegidas único -el SNAP-, que integra tierra y mar, y que incluye áreas públicas y privadas.

Para hacerse una idea, antes del SBAP, Conaf administraba áreas protegidas terrestres; la Subsecretaría de Pesca y el Servicio Nacional de Pesca los Parques y Reservas Marinas; El Consejo de Monumentos Nacionales los Santuarios de la Naturaleza; El Ministerio de Bienes Nacionales los bienes nacionales protegidos; y el Ministerio de Medioambiente las áreas marinas costero – protegidas de múltiples usos, la custodia de santuarios de la naturaleza y supervigilancia de todo el sistema.

Con respecto a las categorías de áreas protegidas, Juan complementó que se establecen seis, en línea con las mejores recomendaciones internacionales, con su definición, objetivo y regulación. «Por ejemplo, en Reservas de la Región Virgen, Parques Nacionales y Monumentos Naturales se prohíbe la explotación de recursos naturales con fines comerciales. Además, se establecen una serie de prohibiciones en áreas protegidas y todo proyecto que pretenda desarrollarse deberá respetar la categoría del área protegida y ser compatible con plan de manejo».

Por el momento, todavía se espera la publicación de la ley que crea el SBAP en el Diario Oficial. En la entrevista antes mencionada con la ministra de Medio Ambiente, esta comentó que durante todo el proceso de tramitación se hizo un trabajo con los guardaparques. «Este proyecto tiene más de 160 artículos que regula muchas cosas y hay un par de artículos que también tienen que ver ahí con la carrera funcionaria, con asegurarse de que ese traspaso se haga bien«.

Así mismo agregó que este hecho es un trabajo gradual de al menos tres años: “Esto tiene que ocurrir más o menos rápido porque se tiene que promulgar y eso toma un par de meses. Luego de eso, tenemos plazo de un año para que se efectué el decreto supremo, dando paso a la creación del servicio y hacer que en un año más haya alguien a cargo; directora o un director del Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas (…). Finalmente, esto tiene un traspaso gradual de tres años”.

Adicionalmente, se está tramitando una ley paralela que definirá el futuro exacto de la CONAF, incluyendo su nombre. Algunos rumores indican que podría llamarse Serconaf.