Parque Tantauco 
Créditos: Benjamin Valenzuela
Parque Tantauco Créditos: Benjamin Valenzuela

Ubicada en la costa de la Región de Los Lagos, a 1.229 kilómetros de Santiago, la Isla Grande de Chiloé es un destino ideal para quienes buscan una aventura en la naturaleza o simplemente quieren escapar de la rutina.

Con una superficie total de 8.394km² y alrededor de 168 mil habitantes, algunas de sus principales ciudades son Ancud, Quellón, Dalcahue y Castro, siendo esta última la capital de la isla. Tanto en estas localidades como en sus alrededores existen lugares imperdibles para quienes busquen visitarla, a través de sus parques, playas, muelles y más.

«Para mi visitar Chiloé significa que aún puedes tener encuentros con fauna salvaje, hay lugares que aún no han sido irrumpidos por el ser humano y que se conserva de muy buena forma. Es un muy buen lugar para conectar con la naturaleza sin tener que bajar de lleno a la Patagonia, donde hay un acceso difícil», comenta el fotógrafo Benjamín Valenzuela.

A continuación, compartimos algunos imperdibles.

Parque Nacional Chiloé

Con una superficie de 42.567 hectáreas, este parque forma parte de las comunas de Ancud, Castro, Chonchi y Dalcahue. Es uno de los principales destinos turísticos de la isla gracias a su diversidad de fauna y flora. Cuenta con dos accesos principales: Chepu (por Ancud) y Abtao (en las otras 3 comunas). También hay un acceso por el sector Cucao-Chanquín.

En este parque hay senderos de diferentes dificultades, adornados por su flora dominante. Entre las especies están la luma (Amomyrtus luma), la pitra (Myrceugenia exsucca), el arrayán (Luma apiculata) y el coigüe de Chiloé (Nothofagus nítida), entre otros.

Dentro de las opciones de trekking y senderos dentro del parque están:

  • El Tepual: Sendero familiar, de dificultad baja, de unos 45 minutos en 1,8 km. Pasa por frondosos bosques sureños.
  • Sendero playa y desembocaduras es una caminata de 3 km, ida y vuelta, que pasa por un bosque sobre la duna en que comienza una amplia playa. Dificultad fácil.
  • Sendero Dunas de Cucao. Es un recorrido de dificultad baja de 1,4 m, que se puede realizar en una hora. Su principal atractivo hay un mirador con vistas a la playa y las dunas de Cucao.
  • Caminos y senderos del sector Huentemó, Cole Cole. Son una secuencias de caminos y senderos a 10 km al norte de Cucao. Se puede llegar a la playa de Cole Cole por un sendero de 4 km.

En la entrada del parque hay una caseta de guardaparques en la que se entregan más detalles de los senderos.

«El sector sur del norte tiene senderos muy familiares, aptos para realizarlos todo el año. Por otro lado, la zona norte la recomendaría hacer solamente en verano, ya que con las lluvias del invierno muchas zonas se vuelven inaccesibles, hay muchos ríos difíciles de cruzar», explica Benjamín.

Como mencionamos , este parque cuenta con dos grandes sectores, el sector Chepu, al norte, y el sector Abtao, en el centro del parque. Para llegar el primero, hay que ir desde Ancud por la ruta 5 al sur hasta el cruce río Chepu. Continuar hasta el Puerto Anguay y embarcarse en un bote por el río Chepu. Desde ese punto se camina por un sendero costero hasta llegar al río Lar, donde estará ubicada la caseta del guardaparques.

Para llegar al sector de Abtao, hay que ir en dirección norte por la ruta 5 desde Castro, hasta llegar a Llau Llao. Se va en dirección oeste pasando por el puente Puchagrán, llegando finalmente al fundo Pichihue. Tras dos horas de recorrido, te encontrarás en el área del parque.

También, teniendo la suficiente paciencia, es posible sorprenderse con la fauna única de Chiloé. Entre la increíble variedad de aves presentes se ven el concón de Chiloé (Strix rufipes sanborni), diuca de Chiloé (Diuca chiloensis), el carpintero negro (Campephilus magellanicus) y muchos más. También, gracias a la condición del territorio se mantiene una gran variedad de mamíferos, como lo son el zorro de Darwin (Lycalopex fulvipes), el ratón topo de Chiloé (Notiomys valdivianus chiloensis) o el pudú (Pudu puda) entre otros.

Además, en este lugar habita la famosa rana de Darwin (Rhinoderma darwinii). Eso sí, se necesita la vista bien afilada, ya que rara vez esta ranita supera los 3 centímetros de longitud, haciendo difícil su encuentro.

Rana de Darwin
Créditos: Benjamin Valenzuela
Rana de Darwin Créditos: Benjamin Valenzuela

Si no se cuenta con un vehículo para llegar a estos lugares, existen buses que se dirigen hacia las entradas principales e incluso algunos tienen tours específicos en dirección a estas, principalmente saliendo desde Ancud y Castro.

La entrada para el parque puedes se puede comprar vía online, con un valor de $3.700 adultos y $2.600 jóvenes entre 13 y 17 años (menos de 12 entran gratis, al igual que personas con discapacidades).

Parque Tantauco

En el extremo sur de Chiloé se encuentra el gran Parque Tantauco, ubicado en la comuna de Quellón, al límite de la Patagonia chilena. Con una expansión de 118.000 hectáreas, este parque cuenta con grandes bosques milenarios, turberas correspondientes a la última glaciación, grandes lagos y ríos.

Aquí se pueden realizar muchas actividades en la naturaleza. Es posible acampar en diferentes puntos, realizar trekking de diferentes dificultades o hacer los senderos disponibles por el día o en más de una jornada. En total, los recorridos del lugar suman más de 130 km.

Entre los más simples están el sendero río Yadad, de baja dificultad en 3km, que se puede realizar entre hora y media o tres horas. También, de similar dificultad, se encuentra el sendero Los Ñirres. Existen otros senderos que pueden ser de varios días, como el clásico sendero Transversal que cruza el parque. Todos los detalles de sus senderos están disponibles en su página web.

Sobre el sendero Tantauco, con una extensión de alrededor 100 kilómetros, Benjamín comenta que «mi experiencia fue muy buena, hay diferentes partes en el sendero que tienen un tránsito de personas muy bajo, encontrándote con un pedazo de historia que no está tocado por el hombre. El Parque Tantauco refleja muy bien cómo era Chiloé antes de que llegara el humano». Toda esta travesía del fotógrafo está documentada en su canal de Youtube.

Parque Tantauco Créditos: Benjamin Valenzuela
Parque Tantauco Créditos: Benjamin Valenzuela

Por la zona norte, se puede ingresar por vía terrestre desde Quellón o Castro. Por la ruta 5 sur, 14 kilómetros al norte de Quellón, hay un cruce que indica el camino. Desde ahí, se llega hasta la Portería Yaldad, en donde está el inicio del parque. Desde este punto es posible tomar diferentes rutas para llegar a senderos cortos, encontrarse con algunos puntos de camping, o visitar el Lago Chaiguata, donde se puede practicar kayak.

Otra forma de ingresar es desde la zona sur, es en avioneta desde Castro o por mar en un lanchón municipal que sale desde Quellón. Este sector del parque es Caleta Inío, siendo el pueblo más aislado de Chiloé y el único habitado dentro del parque, en donde se encuentra la Casa Huésped y el Museo de Inío.

Una playa escondida en el Parque Nacional

Dentro del Parque Nacional Chiloé se encuentra la playa Cole Cole. La gente habla de ésta como si se tratara de toda una leyenda, en honor a la dificultad que resulta llegar.

El viaje comienza en Castro, desde se toma un bus en dirección hacia Cucao en un viaje de aproximadamente 2 horas. Desde el final de la carretera, donde deja el bus a sus pasajeros, hay un camino de casi 16 kilómetros (solo ida). Es por esto que se recomienda acampar y volver al día siguiente.

Se cruza el puente Chanquín y desde ahí en adelante se inicia la caminata. Primero se cruza la laguna que separa la carretera de la playa, caminando con el agua hasta las rodillas. Al cruzar, se camina hacia el norte hasta encontrar la comunidad de Huentemó, para llegar, tras unos cerros, a la caseta de registro.

Allí comienza el camino demarcado, un sendero rodeado de selva valdiviana, que abre opciones a toparse, si se tiene suerte, con un zorro de Darwin o un monito del Monte. Tras 50 minutos de caminata, hay un acantilado que enmarca la famosa playa Cole Cole. Al bajar, se puede comer y descansar lo suficiente como para recuperar las energías para el retorno.

El fotógrafo Diego Navarro señala: «la playa es hermosa, vale completamente la pena hacer la caminata. Me da la sensación de estar en la prehistoria, una selva muy primitiva. Si bien es cierto que llega mucha gente a acampar durante el verano, a lo largo del año casi no va nadie. La paz del lugar hace que se te pase todo el cansancio».

Playa Colce Cole
Créditos: Diego Navarro
Playa Colce Cole Créditos: Diego Navarro

Las pingüineras de Puñihuil

Si lo que se quiere es ver fauna marina en su hábitat natural, esta es una de las mejores opciones.

Ubicada en la comuna de Ancud, 27 kilómetros al suroeste de esta misma ciudad, se encuentra el Monumento Natural Islotes de Puñihuil, siendo uno de los pocos lugares del mundo en donde se conserva la nidificación y reproducción de los pingüinos de Magallanes (Spheniscus magellanicus) y de Humboldt (Spheniscus humboldti)

La época ideal para ir es entre septiembre y marzo, ya que es el tiempo donde más posibilidades hay de ver a los pingüinos.

El acceso es sencillo, y cada 20 minutos se realizan servicios de navegación hacia las pingüineras. Además de estas aves, hay presencia de chungungos (Lontra felina), cormoranes (Phalacrocorax sp.), carantas (Chloephaga hybrida) y fardelas (Pterodroma sp.). Como siempre en turismo de naturaleza, es primordial respetar la flora y fauna del lugar, no alimentar a los animales ni bajarse de la embarcación.

El costo de los servicios de navegación de $10.000 los adultos y $5.000 los niños.

Muelle de la Luz

Chiloé es una isla de muelles. Entre ellos, un clásico es el Muelle de la Luz, ubicado en Chepu.

La historia detrás de esta obra arquitectónica es interesante: se dice que, en los años 2000, los lugareños vieron muchas luces procedentes del mar. El escultor Marcelo Orellana Rivera se inspiró en esta leyenda para construirlo, siendo apodado de esta manera.

Es un panorama ideal para los enamorados. Supuestamente, si caminas con tu pareja por el muelle, estarán juntos de por vida. Tras el camino de madera es posible apreciar la infinidad del mar.

Para llegar a este lugar, se toma la ruta 5 sur hacia el sur y el desvío del kilómetro 25 que dice Chepu. Se llega al Puente Anguay, en donde se toma un bote que te acercará a tu destino. Luego se camina otros 10 minutos.

Antes o después de visitar el muelle, es recomendable pasar por Chepu -incluso puedes visitar los Senderos de Chepu y su famoso recorrido en tren- y comer un rico curanto o probar los deliciosos milcaos, típica gastronomía de la isla.

Isla Aucar (Quemchi)

La isla Aucar o “Isla de las almas navegantes”, como la llamó el escritor Francisco Coloane, es un atractivo de Quemchi, en donde se une la naturaleza con la religión. Cuenta con un largo de 300m y un ancho de 110m, siendo una isla pequeña.

Isla Aucar Créditos: Benjamin Valenzuela
Isla Aucar Créditos: Benjamin Valenzuela

En el centro hay una hermosa iglesia, en la cual se desarrollan diversas actividades. Todos los 23 y 24 de septiembre se celebra una fiesta religiosa en honor a la virgen de las Mercedes. De la misma manera, el tercer domingo de noviembre se acostumbra a celebrar la fiesta en honor al Jesús Nazareno.

Para llegar a la isla, hay que tomar un bus desde Castro hasta Quemchi, cuyo recorrido dura cerca de una hora. También, hay diferentes tours que se pueden tomar de manera online.

«Este es un lugar muy particular, muy bonito en términos fotográficos. Además, se conserva muy bien lo que es la antigua cultura chilota, cuando antiguamente se llevaban a la gente que fallecía en bote hacia la isla, tiene una iglesia en medio y además un cementerio al lado», dice Benjamín.

Isla Aucar Créditos: Benjamin Valenzuela
Isla Aucar Créditos: Benjamin Valenzuela

Lagos Cucao y Huillinco

En la comuna de Chonchi, al sur de Castro, se encuentran los dos lagos más grandes de Chiloé: el Lago Cucao y el Lago Huillinco. Con una superficie de aproximadamente 3.030,6 hectáreas, en 2022 estos lagos fueron declarados Santuarios de la Naturaleza de Chiloé por el Ministerio del Medioambiente, entrando en el Plan Nacional de Protección de Humedales (PNPH).

En este sector, vive una gran cantidad de avifauna, contando con alrededor de 80 especies. Entre ellas se encuentra el diucón de Chiloé (Pyrope pyrope), el concón de Chiloé (Strix rufipes), el rayadito de Chiloé (Aphrastura spinicuada).

La recomendación es ir en primavera o verano, ya que es la época donde se aprecia más fauna por las condiciones ambientales, y el terreno es más amable gracias al cese de las lluvias.

Ambos lagos se conectan a través del estrecho Contento, desembocando a través del río Cucao hacia el océano Pacífico.

Para llegar, hay que tomar un bus desde Castro en dirección Cucao o Parque Nacional Chiloé. Desde Cucao, solo se caminan unos 500 metros para llegar a la entrada del Parque Nacional.

Recomendaciones para tu viaje

El clima de Chiloé es impredecible. Puede haber días hermosos, despejados e ideales para recorrer, así como otros en los que no para de llover. Por esto, siempre revisa el clima y lleva ropa idónea para la lluvia.

También, hay que tener en cuenta que el transporte público de toda la isla deja de funcionar entre las 8 y 9 de la tarde. Te recomendamos realizar tus panoramas lo más temprano posible, ya que algunos recorridos pueden llegar a ser de hasta 3 horas. De esta manera, con una buena organización podrás llegar a tiempo para tu bus de vuelta.

Por otro lado, si se va en auto, hay que respetar los límites de velocidad para proteger a la fauna silvestre. ¡A disfrutar!

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