Acercarse a las riquezas de la cuencas del río Maipo, pero también exponer las amenazas y daños causados en esta zona  son parte de los objetivos de la nueva investigación “Humanidad en las cuencas – Usos y abusos: Río Maipo desarrollada por la ONG Ecosistemas y publicada recientemente como un libro.

En 10 capítulos, este trabajo aborda la situación poblacional, bioecológica y usos y abusos en el territorio, poniendo énfasis en la utilización de las aguas para actividades industriales como riego, saneamiento, generación eléctrica, entre otros. En el documento, la ONG Ecosistemas enfatiza la necesidad de protección y restauración de la cuenca para revertir la degradación y genere sustentabilidad social y ecológica.

Portada “Humanidad en las cuencas: usos y abusos -Río Maipo” cuencas
Portada “Humanidad en las cuencas: usos y abusos -Río Maipo” cuencas

“Hacer este recorrido de cordillera a mar, por la cuenca del río Maipo es una travesía dolorosa, pero conocerla en mayor profundidad, y evidenciar su historia socioambiental, sus valores y atributos, abre la posibilidad de un cambio de rumbo, de encontrar soluciones a los problemas, de recuperar lo perdido y restaurar, antes de que sea aún más tarde y difícil, dados los cambios macro que están ocurriendo, tales como la megasequía producto de la histórica deforestación y el cambio climático provocados por la humanidad”, explica Juan Pablo Orrego, presidente de Ecosistemas y quien estuvo a cargo de la coordinación de la investigación.

Así, de acuerdo a Paulo Urrutia, geólogo que participó en la investigación y la elaboración de los mapas del documento, dice que se trató de un “proyecto desafiante por la multiplicidad de usos de la historia que tiene la cuenca y los conflictos que existen en torno a ella, que muchas veces son invisibilizados”, además de que es “fundamental la visión de Ecosistemas que no solo busca generar un análisis de la explotación en la cuenca sino que da luces de posibles caminos a seguir, en el contexto de que tomar acciones inmediatas para la conservación de la cuenca más habitada del país sea urgente. Y no solo eso, es cuestión de seguridad nacional”.

Río Maipo ©Paulo Urrutia
Río Colina, vista al glaciar Nieves Negras ©Paulo Urrutia

Impactos desde el pasado

La zona centro-sur de Chie, de la cual es parte las cuenca del río Maipo, es uno de los 35 puntos de biodiversidad más importantes a nivel mundial según la ONG Conservation International. Solo la comuna de San José de Maipo cuenta con 443 especies de flora vascular y de ellas, el 50% es endémica, es decir, que solo existen en este territorio. En términos de fauna, existen 138 vertebrados terrestres, entre ellos pumas, zorros y algunos reptiles entre otros. Además, la zona alberga una gran cantidad de glaciares que alimentan a la cuenca.

Y, pese a su importancia para el ecosistema y la salud humana, se mantienen amenazados. “En la cuenca del Maipo, casi el 50% de las especies categorizadas de los reinos animal y vegetal, y un 10% del reino fungi se encuentran amenazadas», dice el documento de la investigación.

Pato cortacorrientes, río Maipo ©Paulo Urrutia
Pato cortacorrientes, río Maipo ©Paulo Urrutia

A través de un recorrido de la historia de la población en la cuenca, desde 14.000 años atrás hasta la actualidad, se explica cómo fue avanzando y, a medida que aumentaba en números, aparecieron nuevas necesidades e intereses. Por ejemplo, desde el siglo XVIII los españoles empezaron a impulsar la minería en la zona alta de la cuenca, y los mismos arrieros de la zona registraban posibles zonas a explotar. Y también, en el S.XX con la llegada de la electricidad, se empezaron a impulsar proyectos hidroeléctricos.

Así, de acuerdo al documento, la minería, la expansión urbana, la agroindustria, la infraestructura energética, la extracción de áridos, los desechos industriales y domiciliarios, el turismo masivo y la intervención portuaria se han transformado en las amenazas principales de la cuenca del río Maipo y todo el ecosistema que alberga, contribuyendo en deforestaciones, urbanización de zonas ambientalmente vulnerables, la instalación de infraestructuras viales industriales, canalización de caudales, vertimientos industriales y contaminación de cursos de agua.

Extracción-de-áridos,-sector-la-obra-Paulo-Urrutia
Extracción de áridos, sector la obra ©Paulo Urrutia

De esta forma, sin que muchos lo sepan, la cuenca alta del Maipo ha dado su vida, bosques, biodiversidad y aguas para el bienestar de la masiva población de su cuenca. Por esto se han impulsado dos proyectos para su protección: uno que busca que la comuna de San José de Maipo se reconozca como Geoparque Mundial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO); y el ya conocido ¡Queremos Parque!, que busca proteger 142 hectáreas de tierras fiscales de las subcuencas de los ríos Colorado y Olivares bajo la figura de Parque Nacional. Algo que se hace especialmente importante si se considera que solo el 5,76% de la superficie de la cuenca está protegida como Santuario de la Naturaleza o iniciativas de conservación Privada. Eso es menos de la mitad del promedio nacional.

La gestión integrada de cuencas

De acuerdo al documento, una cuenca hidrológica se define como “el área que abarca todos los cursos de agua afluyentes que drenan y convergen desde hitos geográficos, que llamamos divisorias de las aguas, hacia un río principal».

En este caso, es el río Maipo, que fluye desde los pies del volcán Maipo en la Cordillera de los Andes hasta su desembocadura en el Océano Pacífico en el sector de Llolleo. Y, a lo largo de su recorrido, recibe agua de afluentes de diversos tamaños. Así, abarca un área de 15.304 km2, tomando toda la Región Metropolitana y pequeñas porciones de la Región de Valparaíso (provincias de San Antonio y Valparaíso) y del Libertador Bernardo O’Higgins (provincia del Cachapoal).

Cajón del Maipo ©Diego Astorga
Cajón del Maipo ©Diego Astorga

Así, abarcando todo ese territorio, esta cuenca abarca procesos geológicos, hídricos y atmosféricos con todos los organismos que la habitan. Sin embargo, en Chile no existe normativa para la gestión integrada de recursos hídricos a nivel de cuenca, lo cual es fundamental.

Por lo tanto, dice Urrutia, “este proyecto ha sido desafiante por lo diversa de la información disponible y lo difícil que es generar un análisis a un nivel de cuenca, en el contexto de que la información -sobre todo institucional- se encuentra disponible solo a nivel regional, por lo que muchos análisis se toman dentro de los límites políticos administrativos y no consideran los impactos acumulativos que se generan a nivel de cuencas, donde el río es el que articula la gestión”.

Río Colina ©Paulo Urrutia
Río Colina ©Paulo Urrutia

En este sentido, el documento plantea que la gestión integrada de cuencas es actualmente una necesidad: “la gestión sabia de las aguas puede ser el factor ordenador y articulador, que potencie el manejo de toda la cueca. Dada la importancia del Maipo y la influencia de las zonas altas en las bajas, es urgente plantearnos como objetivo realizar una gestión integrada de la cabecera de las cuencas que incluya protección, conservación y restauración ecosistémica”.

Para esto, Urrutia dice que este libro es fundamental para avanzar en la gestión integrada de cuencas porque “no solo se genera una investigación del estado de la cuenca, si no que también se genera un análisis de las relaciones políticas de poder en torno a ella y los conflictos que ocurren en torno a los usos que se generan, además de manera histórica”.

Conflictos socioambientales

El estudio menciona también cinco conflictos socioambientales vigentes, entre ellos el Proyecto Hidroeléctrico Alto Maipo, de AES Gener que el año pasado estuvo nuevamente en la agenda pública luego que tras una serie de denuncias de la Coordinadora Ciudadana No Alto Maipo, la concejala de San José de Maipo Maite Birke y un grupo de integrantes de la Red Metropolitana No Alto Maipo, el Segundo Tribunal Ambiental determinara oficiar a la Dirección Ejecutiva del Servicio de Evaluación Ambiental, a la Superintendencia de Medio Ambiente, a la Corte de Apelaciones de Santiago y al proyecto solicitando una serie de antecedentes, entre ellos, la Evaluación Ambiental de Alto Maipo y una visita en terreno por parte del Tribunal para inspeccionar las obras.

Proyecto Alto Maipo, Sector Embalse el Yeso
Proyecto Alto Maipo, Sector Embalse el Yeso

Un cambio de mirada ya no puede esperar, es por eso también que han surgido una serie de campañas ciudadanas, muchas de ellas lideradas por la Coordinadora No Alto Maipo y autoridades y organizaciones de la zona. Asimismo, días antes de las reclamaciones en el Segundo Tribunal Ambiental en junio del año pasado, Federico y Tomás Mekis, hermanos, deportistas outdoor y activistas medioambientales lanzaron con el apoyo de Patagonia el documental “Defiende Maipo” que destaca el daño que el megaproyecto dejaría en la zona natural que además activó una campaña ciudadana digital para enviar correos a las autoridades ambientales exigiendo la protección de la zona ante el desarrollo del megaproyecto.

A este proyecto se suman otros como Los Bronces Integrado (Anglo American) y el proyecto de expansión de Puerto Exterior de San Antonio (COMACO S.A).

©Queremos Parque
©Queremos Parque

De esta forma, hacer un zoom en la realidad actual de la zona y levantar las alertas es fundamental para dar un paso más en el camino de crear conciencia en la ciudadanía y mirar la naturaleza desde una perspectiva socioambiental.

Descarga la investigación aquí

Sector-Lo-Valdés-Paulo
Sector Lo Valdés ©Paulo Urrutia


Investigación y mapas: Paulo Urrutia Barceló
Investigación, edición y coordinación: Juan Pablo Orrego Silva
Asistente investigación y edición: Mitzi Urtubia Salinas
Diseño y diagramación: Constanza Concha Sahli
Fotografía: Paulo Urrutia B., Diego Astorga C., Guy Wenborne, José Gerstle.
Ilustración contraportada: Benjamín Contador Cortés
Revisión de contenidos: Pilar Valenzuela Delpiano

La publicación de Ecosistemas cuenta con el auspicio de las Fundaciones Lush Charity Pot, Marisla, Patagonia Inc. y Weeden.