Más de 40 embarcaciones chinas son detectadas bordeando área marina protegida de Rapa Nui
El Consejo del Mar de Rapa Nui, Koro Nui O Te Vaikava, colaboró con la Armada de Chile en una exitosa fiscalización que detectó más de 40 embarcaciones chinas bordeando el área marina protegida de la isla. Esta iniciativa marca la primera participación directa de los isleños en la vigilancia de su zona, destacando la necesidad de recursos locales para proteger la pesca ancestral y conservar la biodiversidad marina frente a la amenaza de la pesca ilegal industrial.
El Consejo del Mar de Rapa Nui, Koro Nui O Te Vaikava, participó de una fiscalización en las 200 millas náuticas que protegen las áreas marinas de la isla. “Probablemente ha sido la más exitosa de todas. Detectamos más de 40 embarcaciones chinas, incluso un barco nodriza. Se encontraba en el borde de nuestra Zona Económica Exclusiva”, explica Sebastián Yancovic, consejero de la organización. Él explica que el área protegida está dentro de la ZEE y que, en este caso, el 100% de esta zona es área protegida. Por ello, los barcos bordean tanto ZEE como el área protegida.
El trabajo fue en colaboración con la Armada de Chile, y actualmente, las flotas están bajo vigilancia satelital para controlar la pesca ilegal y no declarada, además de resguardar los parques marinos protegidos, donde solo se permite la pesca ancestral y artesanal de la isla. “Es habitual encontrar flotas pesqueras alrededor de nuestra ZEE, principalmente chinas, japonesas, españolas, e incluso rusas, pero no encontrarlas en esta magnitud”, cuenta Sebastián.
Te Moana Tapu a Hotu a Matu’a es área marina protegida declarada en 2018 y ocupa el espacio de la ZEE. Las fiscalizaciones se dan a manos de la Armada desde entonces. También se creó el área de múltiples usos, donde el pueblo Rapa Nui se sienta en la mesa a tomar decisiones respecto a la zona a través de este Consejo Directivo, el cual nace en el decreto número 10 del Ministerio del Medio Ambiente.
Esta es la primera vez que participan los habitantes de Rapa Nui, representados por Koro Nui O Te Vaikava, en la fiscalización . “Queremos que esto se amplíe. Estamos insistiendo con las autoridades para poder tener los medios para poder hacer la fiscalización desde acá, desde la propia isla y no tener que esperar que vengan los barcos o aviones desde el continente”, dice el consejero.
«Con la captura que hace un barco de estos, nosotros comemos durante un año. Eso merma de manera considerable los recursos pesqueros, especialmente los peces pelágicos que podrían estar llegando a nuestra agua», concluye Nicolás sobre los impactos de la flota industrial en la ZEE, agregando que también es el hogar de tortugas, mamíferos marinos y aves.
