Llanquihue avanza en la conservación de sus humedales urbanos
En la ciudad de Llanquihue se está llevando a cabo un ambicioso proyecto que busca restaurar, conectar y poner en valor más de 790.000 metros cuadrados de espacios naturales de la ciudad. Aquí todos los detalles del Plan de Infraestructura Verde, impulsado por Fundación Legado Chile, que ya cuenta con su primera intervención finalizada: el Parque Humedal Baquedano.
Desde mayo de 2017, diversas autoridades, empresas y vecinos de Llanquihue han participado en la implementación del Plan de Infraestructura Verde, iniciativa impulsada por Fundación Legado Chile y el Magíster de Arquitectura del Paisaje UC. En el marco de una metodología participativa para la gestión de ecosistemas urbanos, denominada Plan de Acción Medioambiental, este plan busca restaurar, conectar y poner en valor más de 790.000 metros cuadrados de espacios naturales de la ciudad, alcanzando un índice de 48 m2 por habitante.
Con esto, Llanquihue busca transformarse en la ciudad con mayor índice de áreas verdes por habitante del país. Bajo dicho contexto, la configuración de la infraestructura verde como una red sinérgica y articulada de diversas unidades de paisaje (parches, corredores, bordes y ecotonos) propone un nuevo enfoque de desarrollo sostenible y conservación de la naturaleza para la ciudades, al potenciar la provisión de diversos servicios ecosistémicos que contribuyen al bienestar general de personas, comunidades y economías.
La idea es asegurar un desarrollo sostenible y la conservación de los ecosistemas urbanos de la ciudad. Para ello el Plan de Infraestructura Verde no sólo se presenta como una plataforma complementaria e indicativa para alimentar los actuales instrumentos de planificación territorial de la ciudad, sino que también contribuye a generar otros instrumentos que favorezcan una gestión integrada en materia de paisaje, conservación y espacio público.
Desde Fundación Legado Chile, esperan que esta experiencia sirva como un modelo potencialmente asimilable a otros casos de ciudades regionales de escala intermedia menor, caracterizadas también por la problemática asociada a la degradación de espacios naturales y al mejoramiento de la calidad de vida de sus comunidades.
¿En qué consiste?
El Plan de Infraestructura Verde Urbana para Llanquihue se basa en la activación de unidades de paisaje estructurantes que hacen parte del patrimonio natural y cultural de la ciudad, insertos dentro del perímetro urbano:
- Humedal Baquedano
- Estero el Sarao
- Humedal el Loto
- Humedal los Helechos
- Humedal las Ranas
- Borde lacustre del lago Llanquihue
- Nacimiento río Maullín
Sobre estas unidades de paisaje se desarrollan diversas operaciones de proyectos orientadas a tres objetivos estratégicos: restaurar, habitar y conectar.
RESTAURAR
Recuperar la ecología de borde de los ecosistemas urbanos, entendida como pieza clave para su puesta en valor e integración a nivel ciudad.
HABITAR
Integrar programas sociales en las iniciativas de restauración y rehabilitación de los ecosistemas urbanos, promoviendo la apropiación sustentable por parte de la comunidad
CONECTAR
Articular los diversos ecosistemas urbanos mediante una red continua de espacios públicos, conformando circuitos y corredores que conectan social y ecológicamente las diversas unidades del Plan.
El caso del Parque Humedal Baquedano
En octubre de 2017, el Gobierno Regional de Los Lagos financió el proyecto Parque Humedal Baquedano, a través del Fondo Regional de Iniciativas Locales (FRIL). Este constituye el primer proyecto ejecutado del Plan de Infraestructura Verde Urbana para Llanquihue, siendo diseñado por Fundación Legado Chile, el Magister de Arquitectura del Paisaje UC y la Secretaría de Planificación de la Ilustre Municipalidad de Llanquihue.
Con 9.506 m2 de superficie, el Parque Humedal Baquedano asoma como una pieza clave en el mejoramiento de las condiciones de vida para los habitantes en zona norte de la ciudad. Elste proyecto piloto se sitúa en el humedal Baquedano, uno de los humedales con mayor presión y en peor estado de conservación del sistema hidrológico de la ciudad. Este humedal, de 2.360 m2 aproximados de espejo de agua, ha sufrido rellenos sistemáticos en torno a sus bordes, empobreciendo considerablemente la presencia de vegetación nativa, y quedando expuesto a la presión urbana, contaminación y degradación.
El Proyecto Humedal Baquedano se estructura en base a tres tipos de operaciones: franjas, nodos y áreas. Las franjas determinan ámbitos de conexión y movilidad entre las unidades de paisaje del sistema. Estos pueden favorecer la movilidad humana en contacto directo con diversos componentes del paisaje, o bien contribuir a conservar procesos ecosistémicos y generar conectividad ecológica a lo largo del territorio. Los nodos constituyen sitios notables dentro del sistema, ya sea por los componentes de paisaje que se encuentran en ese lugar, por la visibilidad hacia el paisaje circundante o bien por su aptitud programática como espacio público significativo. Las áreas constituyen espacios de mayores dimensiones, que albergan ecosistemas de alto valor ecológico, las cuales requieren de medidas de manejo o gestión diferenciada destinadas a promover su recuperación y conservación.
Con un costo total de $90.000.000, el proyecto dispone una serie de circulaciones perimetrales, huellas, senderos, plataformas, franjas de infiltración de aguas lluvias, áreas de mejoramiento de suelo y restauración de la vegetación de borde y el ensanchamiento del espejo de agua. Con esto, asoma un nuevo paradigma de inversión de espacio público para las ciudades del país, donde nuevos enfoques disciplinares, como el de la infraestructura verde, permiten la conservación y reactivación de ecosistemas amenazados en torno a lugares significativos que mejoran la calidad de vida de sus comunidades, con menos recursos y mejores estándares de diseño.