Entrevista exclusiva con la ministra Maisa Rojas desde la COP16 en Cali: «Chile presentó sus metas nacionales alineadas al marco global de biodiversidad, que son las que tenemos que cumplir al año 2030»
La COP 16 del Convenio sobre la Diversidad Biológica, que se está llevando a cabo en Cali, Colombia, reúne a 196 países para abordar la urgente crisis de biodiversidad a la que nos enfrentamos en la actualidad. Chile, bajo el liderazgo de la ministra de Medio Ambiente, Maisa Rojas, presentó sus 35 Metas Nacionales alineadas al Marco Global. Además, la autoridad fue nombrada como Champion de la convocatoria, teniendo un rol clave en las negociaciones. Desde Colombia, pudimos conversar en exclusiva con la ministra.
La Conferencia de las Partes (COP) del Convenio sobre la Diversidad Biológica, que se está celebrando este año en Cali, Colombia, es un evento crucial que reúne a representantes de 196 países, organizaciones intergubernamentales y actores de la sociedad civil, para discutir la conservación y el uso sostenible de la biodiversidad. Esta dieciseisava edición se presenta como una instancia esencial para establecer compromisos y marcos de acción en medio de una crisis ambiental que exige atención urgente.
Desde su adopción en 1992, en la Cumbre de la Tierra en Río de Janeiro, el Convenio busca conservar la biodiversidad global. En este sentido, la COP 16 es particularmente significativa porque es la primera conferencia en realizarse desde la implementación del Marco Mundial de Biodiversidad de Kunming-Montreal, que estableció 23 ambiciosas metas para frenar la pérdida de biodiversidad, incluyendo la protección de al menos el 30% de las áreas terrestres y marinas para 2030.
En este contexto, la Ministra del Medio Ambiente de Chile, Maisa Rojas, ha sido nombrada Champion de la COP 16. Su rol implica facilitar el diálogo y la cooperación entre los países en temas críticos como la biodiversidad marina, costera e insular. Este nombramiento destaca el compromiso de Chile con la conservación y la gestión sostenible de sus recursos naturales.
La ministra ha acumulado una notable experiencia en foros internacionales, habiendo desempeñado roles clave en conferencias anteriores, como la COP 27, donde ayudó a establecer un fondo histórico para los países en vías de desarrollo afectados por el cambio climático. Por otra parte, en la COP 15, trabajó en la negociación sobre Información Digital Sobre Secuencias de Recursos Genéticos, contribuyendo al avance de temas críticos que serán discutidos en la actual conferencia.
Asimismo, cabe destacar que durante esta COP Chile presentará sus avances en la restauración de ecosistemas y en la creación del Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP), iniciativa clave para cumplir con el Marco Global de Biodiversidad. Respecto a esto, en ocasiones anteriores la ministra Rojas subrayó la importancia de contar con recursos adecuados para implementar las metas acordadas, especialmente para los países en desarrollo, y enfatizó la necesidad de movilizar financiamiento internacional para cerrar la brecha en la conservación.
Uno de los enfoques destacados por Chile en esta conferencia será la inclusión de la perspectiva de género en la conservación, así como un innovador Compromiso por la Conservación de los Hongos, el que busca reconocer la importancia de este reino biológico en las políticas públicas y acuerdos multilaterales.
Para conocer más sobre los desafíos que se están discutiendo en esta COP 16, así como sobre la participación de Chile, logramos conversar en exclusiva con la Ministra de Medio Ambiente, Maisa Rojas, desde Cali, Colombia.
— La COP 16 representa una oportunidad crucial para avanzar en la conservación de la biodiversidad global, ya que solo a través de la colaboración entre gobiernos, comunidades locales y organizaciones internacionales será posible enfrentar efectivamente la crisis de biodiversidad que amenaza nuestro planeta. En este contexto, ¿qué mensaje le gustaría entregar al resto del mundo desde esta COP 16?
—Estamos ya en la Conferencia de las Partes de biodiversidad (COP), aquí en Cali, con una cantidad muy importante de iniciativas que compartir con el mundo. Chile presentó junto a más de 100 países sus Metas Nacionales, alineadas al Marco Global de Biodiversidad, que son estas 23 metas que tenemos que cumplir al año 2030. Nosotros nos comprometimos con 35 Metas Nacionales. Estas 35 metas son parte de nuestra Estrategia Nacional de Biodiversidad, que está en el proceso de actualización, pronto a entrar a la consulta pública, para después pasar por la última etapa en el Consejo de Ministros para la Sustentabilidad y el Cambio Climático.
Así que estamos implementando el Marco Global de Biodiversidad a través de estas 35 metas, pero también hemos hecho anuncios importantes en otro tratado, que es como un hermano, un complemento, que es el de Alta Mar, BBNJ por sus siglas en inglés, al cual Chile, además, quiere ser su Secretaría cuando entre en vigor. Para que entre en vigor debemos tener 60 países ratificados. Chile fue el segundo país en ratificar este tratado y estamos en una coalición para llamar a que muchos más países ratifiquen, para que pueda entrar en funcionamiento. Pero no es solamente eso, una vez que entre en funcionamiento, que esperamos que sea el próximo año, también estaremos lanzando una alianza, que se denomina en inglés “First Movers”, para ser así los primeros que vayan empujando este tratado BBNJ, proponiendo áreas marinas protegidas en la alta mar, porque no vamos a poder cumplir el 30% de nuestros océanos protegidos si no tenemos funcionando este tratado del alta mar, así que estamos con mucha energía y con mucho que mostrar y compartir en esta COP en Cali.
—Su nombramiento como Champion de la COP 16 subraya la importancia de Chile en las negociaciones. En este contexto, ¿cómo planea utilizar este cargo y de qué manera influyen en esta tarea sus experiencias previas, como la vivida en la COP 27?
—La experiencia previa yo creo que es supercrucial, y yo creo que de alguna manera es una de las razones importantes también, además del reconocimiento a Chile de tener una historia muy coherente de protección en los océanos, que es el otro factor que se toma en cuenta. Un ministro, una ministra, que tiene ya experiencia de manejarse en el multilateralismo obviamente ayuda, como todo en la vida, cuando uno tiene más experiencia ayuda a la tarea.
Ahí hay algunas cosas bien importantes, como el Sistema de las Naciones Unidas, que es por consenso, uno tiene que asegurar la transparencia de escuchar a todos. Aquí no hay países más grandes o más chicos, todos tienen el mismo peso, el mismo voto. Valen lo mismo. Entonces, cuando hay conflictos poder escucharlos a todos es un elemento muy central, y normalmente, como todo en la vida, escuchar es la tarea más importante. Uno obviamente también, escuchando, puede ir proponiendo quizás alguna solución.
—Latinoamérica alberga el 40% de la biodiversidad mundial, pero las poblaciones de vida silvestre han tenido un descenso de 95%. ¿Qué grandes pendientes existen para detener esta pérdida de biodiversidad y cómo enfrentar la carrera particular por la pérdida de la Amazonía?
—Justamente el Marco Global de Biodiversidad, y la implementación efectiva de estas 23 metas, lo que persigue es revertir esta pérdida de especies que lamentablemente escuchamos hace una o dos semanas atrás, en este Informe Planeta Vivo 2024 de la World Wildlife Fund (WWF), el que reveló esta situación tan crítica. En el caso de la Amazonía, yo creo que ahí es justamente esta visión de que cambio climático y pérdida de biodiversidad son dos caras de la misma moneda, porque los bosques no solamente son el hábitat de muchas especies, sino que también son enormes sumideros de carbono. Por lo tanto, juegan un rol fundamental en revertir la crisis climática.
Tenemos que asegurarnos de no seguir perdiendo Amazonía, de resguardarla y de restaurarla donde sea necesario. Para eso obviamente que los países amazónicos juegan un rol muy importante, de tener ellos el liderazgo, el interés y el lineamiento político de resguardar la Amazonía como un bien común para todos en el planeta. Sin embargo, no podemos dejar la responsabilidad a ellos solamente, sino que el resto de los países, aunque no seamos parte de la cuenca del Amazonas, tenemos que ayudar para que esas condiciones se den, para que esos países puedan también cuidar ese bien común. No solamente el Amazonas, sino que también estoy pensando en el Congo, en todos los otros bosques tropicales que juegan este rol de, por un lado, albergar una enorme cantidad de diversidad de vida, y también ser estos importantes reservorios de carbono.
—Solo 35 países entregaron su Plan de Acción de Biodiversidad en esta COP 16, de estos solo dos corresponden a países de la cuenca Amazónica. ¿Por qué Chile no presentó el suyo y qué se espera del resto?
—Creo que es fundamental clarificar algo. La Convención de Diversidad Biológica dio dos rutas para cumplir con esta tarea de actualizar las metas en esta COP. Lo que les interesa aquí es que los países estén implementando o estén viendo cómo implementar el Marco Global de Biodiversidad. Para eso podían actualizar el instrumento, que es el instrumento legal que tenemos con la Convención, que son las Estrategias Nacionales de Biodiversidad y los Planes de Acción, o incluir las Metas Nacionales alineadas al nuevo Marco Global de Biodiversidad.
Las estrategias, yo me imagino que en todo el mundo es igual, pero en el caso de Chile es un instrumento que tiene toda una regulación. Nosotros estamos en el proceso de actualización, pero recordemos que estamos en un proceso de actualización con un cambio regulatorio bien importante, que es la creación del Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP). Estamos prontos a tener el anteproyecto, pero en el caso de Chile ese anteproyecto tiene que después pasar por consulta pública, por el Consejo de Ministros para la Sustentabilidad y el Cambio Climático, y pasa a tomar razón de la Contraloría. Entonces, lo que nosotros decidimos hacer es, como estamos trabajando en la actualización de la estrategia, subir las 35 medidas, las 35 metas, en la plataforma de la Convención, como las Metas Nacionales. Lo importante es que con esas metas nacionales ya entregadas a la Convención son compromisos que el país tiene, que ya se están implementando y en los cuales ya estamos trabajando.
—El financiamiento suele ser una de las “piedras de tope” en relación con la conservación de la naturaleza: ¿cuál es el “desde” al que deberíamos apostar en términos regionales? ¿Cuál debería ser el mensaje principal para los Gobiernos en relación con los presupuestos destinados a la materia en esta COP16?
—Yo diría que el desde es lo que se negoció en la COP15, que eran esos, si no me equivoco, 20 billones de dólares al año, que es el financiamiento desde los países desarrollados a los países en desarrollo. Ese debiera ser el desde, así que es importante que nos aseguremos de que efectivamente eso esté ocurriendo.
En el caso nacional nosotros, cuando se crea el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas, que estuvo tantos años en el Congreso parado por muchos temas, pero uno ellos, que salía bastante recurrentemente, por el cual había una fuerte crítica, era que el informe financiero de ese proyecto, que era del 2014, era muy insuficiente y que, en general, el dinero público que Chile estaba gastando en conservación de su naturaleza era muy bajo, incluso si nos comparábamos con países vecinos. Así que lo que nosotros hicimos el año 2022 fue que presentamos un nuevo informe financiero, y se produjo un aumento muy significativo, que llegó a ser entre dos o tres veces más de lo que originalmente estaba.
Eso significa que estamos duplicando el número de guardaparques, por ejemplo. Una parte importante del financiamiento es poder contar con guardaparques. Lo que sucedió en Chile, en los últimos 10 años, es que estábamos creando muchas áreas protegidas, pero no estaban aumentando el número de guardaparques. Entonces, eso fue un aspecto bien relevante, el que se haya logrado destrabar en la discusión en el Congreso. Eso es financiamiento público, pero adicionalmente Chile en el 2022 también crea el Fondo Naturaleza Chile, que es esta organización sin fines de lucro que permite recibir donaciones, tanto nacionales como internacionales, tanto privadas como públicas, para la conservación. Entendiendo de que hay una parte del financiamiento que es público, pero que con eso nunca va a ser suficiente y, por tanto, debíamos tener un mecanismo, que ahora lo tenemos, para que se pueda conseguir financiamiento para la protección efectiva.
También se creó el Comité de Capital Natural, que es un comité en el cual trabajamos con Ministerio de Hacienda, con el Banco Central, con el Ministerio de Ciencia y el Ministerio de Economía, para avanzar en contar el valor económico de nuestra biodiversidad, de nuestra naturaleza. Eso también nos va a ayudar a cuantificar de mejor manera, por un lado, lo que nos aporta la naturaleza, y por el otro cómo cuidarla. Entonces, yo creo que estamos usando hartos instrumentos distintos para asegurarnos de que efectivamente contemos con el financiamiento suficiente.
—Dentro de los objetivos de esta COP, está invertir la pérdida de biodiversidad para 2030, teniendo distintos objetivos y las 23 metas del Marco Global para la Biodiversidad, lo que incluye aumento de la conservación y reducción de especies invasoras ¿Cuáles cree que son los principales desafíos para lograr acuerdos en esta materia? ¿Y qué medidas específicas se están ejecutando en Chile a este respecto?
—La crisis de pérdida de biodiversidad se debe a cinco amenazas. Una de ellas son las especies exóticas invasoras, otra es la pérdida de hábitats, la destrucción de hábitats, el cambio climático, la contaminación, y el uso no sustentable de los recursos naturales. Esas son las cinco amenazas que tenemos identificadas, y estas 23 metas justamente abordan estas cinco amenazas. Entonces, existen metas para reducir, por ejemplo, las especies exóticas invasoras. En Chile nosotros tenemos, de hecho, un departamento de Especies Exóticas aquí en el Ministerio, y existen varios instrumentos, pero yo diría que el más fuerte es el SBAP.
Es muy evidente de que contar con un servicio público 100% enfocado en la conservación, en la preservación y restauración de la naturaleza, es una condición básica para que podamos implementar de manera efectiva el Marco Global de Biodiversidad, así que yo diría que esa es la medida principal, contar con este servicio, con alguien que esté 100% enfocado en esto y, de hecho, yo diría que es el legado más importante de este Gobierno al medio ambiente del país.
—La biodiversidad marina, costera e insular son temas destacados en esta COP. Por lo mismo, ¿cuáles son los principales desafíos que enfrenta Chile y la Región en estas áreas y cómo se abordarán durante la conferencia?
—Chile es muy orgulloso de siempre decir que tenemos un 42% de nuestra Área Económica Exclusiva protegida, pero cuando uno mira los ecosistemas que uno tiene que proteger hay varios que están bastante subrepresentados, y muchos de ellos son costeros. ¿Por qué? Porque en la costa es donde los humanos realizamos todas nuestras actividades, de pesca, de marisqueo, de deporte, están nuestros puertos, etcétera. Entonces, obviamente, que es donde las tensiones por protección versus el uso son más evidentes. En el alta mar, claro, quizás llega la pesca industrial, pero es mucho más vasto y grande, en cambio, en la zona que es muy cercana a la costa es donde esas tensiones se hacen más evidentes.
Chile tiene un desafío importante en proteger ciertas ecorregiones, que son muy valiosas, en las que hemos tenido avances, pero donde todavía hay que generar más áreas protegidas. Estoy pensando, por ejemplo, la ecorregión que se llama Humboldtiana, que cubre desde el norte de Chile hasta alrededor de la quinta región, donde tenemos como un 2% de protección. Ahí debemos llegar al 30%, y ese desafío yo creo que lo tienen todos los países. En el fondo tenemos un territorio, un maritorio en este caso, en el cual ocurren muchas cosas y hay que ponerse de acuerdo. Entonces, la figura que nos ha servido a nosotros es la de las Áreas Protegidas de Múltiples Usos, que justamente ayuda a hacer compatibles diversos usos de cierto ecosistema. Creo que por ahí va la solución.