Las temperaturas en Canadá rompieron el récord de los 50 grados Celsius este miércoles. Crédito: © AFP
Las temperaturas en Canadá rompieron el récord de los 50 grados Celsius este miércoles. Crédito: © AFP

Más de 200 fallecidos y decenas de personas hospitalizados ha sido el saldo que ha dejado una extrema ola de calor que asfixia el oeste de Canadá y Estados Unidos. En Canadá, las altas temperaturas y los reportes ya han desbordado a los servicios de emergencia: Se estima que al menos 134 personas han fallecido repentinamente desde el viernes en el área de Vancouver y cientos más en la provincia de Columbia Británica, según la policía canadiense y el servicio forense local.

Los expertos lo atribuyen esta ola de calor a un fenómeno que han denominado «domo de calor». Aunque el término no responde a una figura meteorológica estrictamente definidase cree que se deba a la presencia de enormes áreas de alta presión atmosférica, lo que lleva a cielos muy despejados y días soleados. En la medida en que el patrón de alta presión se mantiene, la ola de calor se hace crónica y se expande haciéndose más extrema por el efecto del sol, como si ejerciera de un tapón que impide ventilar el territorio afectado. En un movimiento de convección, el aire cálido trata de salir de la zona, pero ese «tapón», lo retiene y empuja de nuevo hacia la superficie, lo que libera más calor, en un ciclo continuado, que ejemplifica a la perfección el «efecto invernadero», reseña el Hufftington Post.

La ola de calor afecta principalmente al oeste de Estados Unidos y Canadá. Crédito: © TodayIn24
La ola de calor afecta principalmente al oeste de Estados Unidos y Canadá. Crédito: © TodayIn24

“Las temperaturas registradas esta semana no tienen precedentes, se han perdido vidas y el riesgo de incendios forestales está en un nivel peligrosamente alto”, dijo el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, en declaraciones a la Agence France Presse (AFP).  En Canadá el miércoles los termómetros alcanzaron los 49,6°C en el pueblo de Lytton, en la provincia de Columbia Británica, que se mantienen en un rango de temperatura similar este jueves por cuarto día consecutivo.

Armel Castellan, portavoz de la agencia de meteorología canadiense, ha expresado que se encuentra “sin palabras” ante los acontecimientos, si bien ha admitido que era de esperar que el calor “resultara mortal”, según informaciones de la cadena CBC.

«Si bien es demasiado pronto para decir con certeza cuántas de las muertes están relacionadas con el calor, es probable que el aumento significativo en las muertes reportadas (del 195% en comparación con otros años) sea atribuible al clima extremo que ha experimentado la Columbia Británica y continúa afectando a muchas partes de nuestra provincia», dijo Lisa Lapointe, directora forense de esta provincia. La mayoría de las víctimas eran ancianos o tenían problemas de salud, y el calor fue un factor determinante. Muchos de los fallecidos, además, vivían solos, en casas sin ventilación.

En Estados Unidos, específicamente en el estado de Washington,  se han documentado al menos 16 decesos relacionadas con la ola de calor, incluidas dos personas que murieron de hipertermia, según han dicho a medios funcionarios de salud locales. Las altas temperaturas en el valle, las montañas y las áreas desérticas de California dispararon los temores de incendios forestales en medio de condiciones meteorológicas secas y ventosas, con tormentas eléctricas que podrían provocar fuegos en varias zonas del oeste de Estados Unidos.

Alerta en la Casa Blanca

La intensa ola de calor que afecta a Estados Unidos y Canadá provocó este miércoles que el presidente Joe Biden sostuviera una reunión organizada con miembros de su Administración, gobernadores y representantes del sector privado. Aunque el foco principal del encuentro estaba puesto en mejorar la respuesta federal a los incendios forestales (con medidas como subir el sueldo mínimo a los bomberos), el mandatario ha reconocido que estos son inextricables a otros factores como el cambio climático y la histórica sequía que en el oeste de este país y las temperaturas extremas.

La ola de calor que estamos viendo en el oeste no solo amplifica el riesgo de incendios sino que es un riesgo en sí misma”, dijo Biden, que ha asegurado que “el cambio climático está impulsando la peligrosa confluencia” en la que se unen “el calor extremo, la sequía prolongada y fuegos de más intensidad que se mueven a más velocidad”.

Biden recordó que los incendios forestales del año pasado arrasaron más de 4 millones de hectáreas en todo el país, una cifra récord, y causaron “cielos anaranjados que parecían el fin de los días”, pero advirtió que este año “podría ser aún más difícil”. Algunos funcionarios federales dicen que la temporada de incendios ya está superando en gravedad la del año pasado, la peor registrada en California, producto de una dura sequía.

Unos 9 mil bomberos fueron desplegados para combatir incendios en una docena de estados de Estados Unidos, con especial atención en el Lava Fire, que se ha devorado ya más de 7 mil hectáreas en el norte de California.

Comenta esta nota

Comenta esta nota

Responder...