Publireportaje
SíMiPlaneta toma acción en la restauración ecológica implementando bosques nativos en terrenos públicos y escuelas
El movimiento SíMiPlaneta ha contribuido durante los últimos años a diversas iniciativas de reforestación y educación ambiental, transformando terrenos degradados en espacios de vida con la colaboración de organizaciones ambientales.
En un contexto marcado por la crisis climática, las iniciativas de restauración ecológica se posicionan como una respuesta esperanzadora a los desafíos socio-ambientales de nuestra época. En esta línea, la transformación de terrenos degradados en espacios llenos de vida se hace posible gracias al trabajo en equipo y alianzas estratégicas que inspiran a las personas a adoptar hábitos más sostenibles en beneficio del planeta.
Este enfoque es fundamental para el Movimiento SíMiPlaneta, que desde su llegada a Chile ha promovido la acción ambiental como un legado para las futuras generaciones. Su compromiso se refleja en diversas iniciativas, desde jornadas de limpieza hasta proyectos de reforestación, destacando entre ellos la creación de un bosque Miyawaki en la Escuela Santos Rubio Morales de Pirque. En este proyecto, estudiantes y docentes trabajaron juntos para transformar el patio del establecimiento en un pequeño pulmón verde, compuesto por más de 30 especies nativas, enriqueciendo el entorno educativo y fomentando la biodiversidad.
Otra intervención relevante tuvo lugar entre enero y marzo de este año en el Parque Vicente Huidobro, también conocido como “El Pueblito de Artesanos”. Este terreno, que anteriormente funcionaba como estacionamiento de camiones, se transformó en un bosque en crecimiento y un refugio para la biodiversidad local gracias a un proyecto Miyawaki concretado en 2021 a raíz de una colaboración entre la ONG suiza SUGi Project y Fundación Bosko. Más adelante, Farmacias del Dr. Simi se sumó a esta iniciativa, aportando con la renovación del sistema de riego, la limpieza del terreno y la replantación de 300 especies nativas, consolidando así su compromiso con la restauración ecológica.
La metodología Miyawaki, creada por el botánico japonés Akira Miyawaki, ha sido clave en estas intervenciones. Este enfoque permite la creación de bosques densos y de rápido crecimiento que ofrecen múltiples beneficios, como la restauración de suelos degradados, la regulación de temperaturas, la mejora de la calidad del aire y la creación de hábitats favorables para la fauna local. Además, actúan como barreras naturales frente a fenómenos climáticos extremos, contribuyendo a la protección del entorno.
Más allá de los beneficios ambientales, estas acciones tienen un impacto social notable, ya que no solo se busca responder a los desafíos climáticos, sino que también fortalecer la unión comunitaria en torno al cuidado de la naturaleza. Con cada árbol plantado, cada terreno rehabilitado y cada persona involucrada, se pueden lograr cambios significativos hacia un futuro más equilibrado y sostenible.
“Crear bosques nativos en terrenos públicos o escuelas no solo restaura el medio ambiente, sino que crea espacios de encuentro, aprendizaje y conexión. Estos bosques fortalecen el sentido de comunidad, promueven la educación ambiental y generan áreas verdes accesibles para el disfrute de todos, mejorando la calidad de vida y cohesionando a las personas en torno a la naturaleza”. Magdalena Valdés, Fundadora de Bosko