Semana del Clima de Nueva York: Más de 60 ministros firman para terminar con la contaminación por plásticos al 2040
Ministros pertenecientes a la Coalición de Alta Ambición (HAC), reafirmaron su lucha global para acabar con la contaminación por plásticos antes de 2040, en la Semana del Clima de Nueva York. En la instancia, firmaron una declaración en la que destacaron la urgencia de establecer normas vinculantes a nivel global para transformar el ciclo de vida de los plásticos y crear una economía circular, entre otras cosas. Organizaciones celebran estos avances y llaman a los países a actuar con firmeza ante presiones de la industria.
En el marco de la Semana del Clima en Nueva York, los 67 ministros de la Coalición de Ministros de Gran Ambición para Acabar con la Contaminación por Plásticos publicaron una importante declaración con miras a la próxima ronda de negociaciones del Tratado Mundial sobre Plásticos (INC-5), que se llevará a cabo en noviembre en Busan, Corea del Sur.
Entre los países firmantes de América Latina se encuentran Chile, Colombia, Costa Rica, República Dominicana, Ecuador, México, Panamá, Perú y Uruguay, quienes han unido fuerzas con otras naciones para enfrentar de manera decidida la crisis de la contaminación plástica. Junto al equipo de Periodistas Por el Planeta, elaboramos un resumen de los principales puntos de esta declaración.
Puntos claves de la Declaración
La declaración de los ministros destaca la necesidad de un enfoque integral que aborde todo el ciclo de vida de los plásticos, desde su diseño y producción hasta el consumo y la gestión de residuos. Este enfoque está alineado con lo establecido en la Resolución 5/14 de la UNEA, que llama a acciones globales urgentes para frenar la contaminación plástica.
Uno de los mensajes más importantes es el llamado a que todos los miembros de la comunidad internacional redoblen esfuerzos colectivos. En este sentido, los ministros subrayan que los intereses particulares no deben obstaculizar la responsabilidad compartida de abordar el problema de los plásticos, cumpliendo así con las expectativas globales.
Además, se reafirmó la ambición de acabar con la contaminación plástica para 2040, y los ministros enfatizaron que para lograrlo, se deben establecer normas globales vinculantes que garanticen la transformación hacia una economía más circular y sostenible. Esto es crucial, sobre todo, para apoyar una transición justa en los países menos desarrollados, y para evitar los costos económicos innecesarios que genera el actual modelo de producción y consumo de plásticos.
Apoyo a países en desarrollo
Uno de los grandes retos es la financiación adecuada para que los países en desarrollo puedan implementar las medidas necesarias para cumplir con el tratado. Los ministros solicitaron que los fondos sean previsibles y accesibles, asegurando así que las naciones con menos recursos no queden rezagadas en la lucha contra la contaminación.
Se destacó también la responsabilidad de los contaminadores por sus actividades y productos. Este principio es clave para promover esquemas de responsabilidad extendida del productor, que obliguen a las empresas a hacerse cargo de los impactos que generan sus productos plásticos.
Metas y medidas concretas
Los ministros pidieron un acuerdo que incluya medidas comunes y vinculantes, con metas claras y plazos mensurables. Además, señalaron la importancia de establecer criterios globales para eliminar progresivamente productos plásticos problemáticos y evitar aquellos polímeros y sustancias químicas que suponen un riesgo para la salud humana y el medio ambiente.
Algunas organizaciones como WWF han mostrado su satisfacción con los compromisos asumidos por la Coalición de Alta Ambición (HAC) para poner fin a la contaminación por plásticos. En su declaración, WWF destacó la importancia de que los países miembros cumplan con los acuerdos propuestos durante la próxima ronda de negociaciones del Tratado Mundial sobre Plásticos, INC-5 en Busan. La organización enfatizó que este tratado debe ser ambicioso y vinculante, abarcando todo el ciclo de vida de los plásticos, desde su producción hasta su eliminación.
WWF recalcó que los compromisos de la HAC son un avance clave en la lucha global contra la contaminación por plásticos, pero señaló que es crucial que los gobiernos mantengan una postura firme frente a las presiones de la industria petroquímica y otros sectores que podrían intentar debilitar el acuerdo. La organización instó a los países a aprovechar esta oportunidad histórica para establecer medidas legales que impidan que se sigan produciendo los plásticos más dañinos y que promuevan una economía circular más sostenible.
Susan Díaz, vocera de WWF Chile, también valoró los esfuerzos de Chile y otros países de la HAC, subrayando que no se debe permitir que intereses de corto plazo de sectores industriales retrasen la implementación de «leyes robustas, como la ley nacional sobre plásticos de un solo uso».
Desde la organización recalcaron que es fundamental que el tratado incorpore medidas claras y vinculantes para proteger tanto a la población como al medioambiente, en línea con las cuatro recomendaciones principales de WWF: prohibir los plásticos más peligrosos, mejorar el diseño de productos, garantizar la financiación de la transición hacia una economía circular, y asegurar que el tratado se fortalezca con el tiempo.