Trekking a la Cordillera de Huayhuash, la inspiración de «Touching the void”
¿Has visto la película o leído el libro “Touching the void”? ¿Sabías que está basada en la experiencia que tuvieron dos montañistas en la Cordillera de Huayhuash, en Perú? Nuestro colaborador Manuel Mingo nos invita a conocer este lugar y nos da las recomendaciones necesarias para tener una experiencia inolvidable!
La Cordillera de Huayhuash es sin duda uno de los lugares más bonitos e imponentes que he podido visitar. Ubicada en Los Andes peruanos, por la parte norte es vecina de la conocida Cordillera Blanca, la cual constantemente visitada por turistas y montañistas de todas partes del mundo.
La fama de la Cordillera de Huayhuash se remonta a 1985, cuando Joe Simpson y Simon Yates alcanzaron la cumbre de Siula Grande, de 6.344 msnm, por primera vez. En el descenso tuvieron un grave accidente del cual lograron sobrevivir y esta experiencia fue la que inspiró a Simpson para escribir el libro Touching the Void o Tocando el Vacío. En 2003, 15 años después de su publicación, se filmó una película basada en el libro. El relato de esta historia, tanto en su formato escrito como audiovisual, ha sido premiada en diferentes ámbitos del arte y la cultura.
¿Cómo llegar a este lugar?
Primero que todo, hay que tomar un avión o bus hasta Lima, Perú. Una vez ahí, hay que llegar a la localidad de Huaraz, ubicada en el departamento de Áncash. Una alternativa es viajar en bus durante ocho horas (se puede tomar el viaje nocturno y así ahorrar una noche de alojamiento en Lima) o tomar un vuelo interno que tarda una hora y media. Ubicada a 3.052 msnm, Huaraz es un pueblo turístico y muy bonito, que vale la pena conocer con calma para adentrarse en la cultura local y poder visitar sus alrededores. Al servir como último punto de abastecimiento para todas las expediciones de la Cordillera Blanca y de Huayhuash, ha tomado el rol de “estación de servicio” para los montañistas y aventureros. Y por esta misma razón, este lugar es a la vez el escenario de festejos y celebraciones de los grupos y expediciones de montaña que van de paso, vuelven de su aventura o bien deciden recuperar energías del cerro del cual regresan. Así, la vida nocturna de Huaraz también merece conocerse.
Una vez en Huaraz es recomendable contactar a un operador local para realizar el tour. Tomé los servicios de la empresa Go 2 Andes y funcionó muy bien. Ellos mismos coordinan el bus de Huaraz a la localidad de Chiquián, que está ubicada a una altitud de 3.374 msnm. Chiquián es un pueblo cordillerano colonial, muy pintoresco, edificado sobre una meseta desde donde se tienen vistas muy privilegiadas. Una buena alternativa para alojar en Chiquián es el Hotel Nogales.
La siguiente y última parada está a pocas horas de Chiquián. Llamác es el punto de partida y acceso al circuito de Huayhuash. Una vez ahí, solo queda disfrutar del paisaje, sus vistas e imponentes montañas que vigilan el sendero desde arriba.
Circuito de Huayhuash
Hay distintas alternativas para hacer el trekking. Es posible hacer el recorrido en sentido horario o bien inverso a este, usar mulas para portear los equipos y comodidades o bien cargarlas tal como lo hacían los Incas y lo siguen haciendo los locales.
Mujeres con sus hijos a cuestas o recolectoras de leña y alimentos te saludan al pasar y una que otra exige un peaje por usar la ruta que ella recorre a diario.
Pequeñas aldeas de piedra y techos verdes se encuentran en cada momento. Estos son “puestos” de arrieros locales donde reúnen al ganado. A diferencia de lo que ocurre en nuestras latitudes, las cordilleras de Huayhuash y Blanca se encuentran mas cercanas al Trópico, por lo que su posición orográfica genera condiciones donde a los 4.000 msnm es común ver hasta huertos.
Si tienen la suerte de encontrarse con algunos de los habitantes de estas aldeas, vale la pena escuchar e intentar entender sus historias. El lenguaje que ellos usan para comunicarse es el Quechua, pero quizás algún guía local o arriero pueda ayudarlos. Y en esos momentos de pausa, una buena conversación acompañada de un pedazo de queso de cabra son perfectos para luego seguir el camino con energía.
Itinerario tipo
Día 1: Chiquián – Llámac (4.300 m)
Día 2: Llámac – Jahuacocha (4.070 m)
Día 3: Jahuacocha – Paso Zambunya (4.750 m) – Cuartelwain (4.170 m)
Día 4: Cuartelwain – Qaqanan (4.750 m) – Mitucocha (4.230 m)
Día 5: Mitucocha – Paso Carhuac (4.600 m) – Carhuacocha (4.138 m)
Día 6: Carhuacocha – Paso Carnicero (4.630 m) – Huayhuash (4.330 m)
Día 7: Huayhuash – Paso Portachuelo (4.750 m) – Viconga (4.407 m)
Día 8: Viconga – Surasaca (4.380 m)
Día 9: Surasaca – Churín – Lima.
Recomendaciones generales
- Compartir con los habitantes y usar los servicios propios del lugar, ya que de esta forma se contribuye a que las comunidades se empoderen, salgan adelante con micro-emprendimientos y el turismo local se incremente.
- Es importante respetar tanto la cultura y las tradiciones locales como las tierras que se recorren.
- En cuanto al equipo, es recomendable no llevar cosas de más y moverse livianos, ya que los senderos suelen atravesar sectores por sobre los 5.000 msnm, con lo cual disminuye el oxígeno en el aire y la presión atmosférica, causando un efecto de cansancio con esfuerzos menores a los habituales.
- Para evitar malestares y dolores de cabeza por la altura se recomienda hidratarse antes y durante la caminata.