Tres maneras en la que el uso de distintos drones han podido aportar al medioambiente

Los drones están tomando cada vez más protagonismo en Chile. Esta aeronave, que puede ser controlada a distancia y entregar tomas desde altura, ha sido cada vez más adquirida en nuestro país, tanto para labores da fiscalización y vigilancia, como de recreación. Es más, hasta el mes de diciembre de este año, 3160 pilotos de drones han sido certificados por la Academia de Drones de Chile, de acuerdo a la aprobación que exige la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) para quienes manejan drones con ciertas especificaciones.

Sin embargo, más allá del uso recreacional, los drones se han usado mundialmente para labores ligadas al medioambiente. En este artículo seleccionamos algunas maneras en las que los drones han podido ayudar al medio ambiente en el mundo. Pese a que en cada una de ellas se necesitan drones con diferentes especificaciones técnicas que incluso pudieron haber sido diseñados para cada tarea en específico, aquí te mostramos una explicación general de cómo pueden ayudar en algunas labores. Entre ellas, la fiscalización forestal, reforestación e investigaciones científicas de glaciares.

Fiscalización forestal

Parte del plan nacional para prevención y combate de incendios forestales para esta temporada incluye la incorporación de 50 drones que se distribuyen en las brigadas de todo Chile, dentro de otros recursos para la prevención de los incendios forestales. Dentro de los últimos años, el personal de la Corporación Nacional Forestal (CONAF) ha recibido capacitaciones para poder manejar estos aparatos y aportar en la fiscalización de las zonas forestales para prevenir incendios forestales, entre otras labores de fiscalización en general.

¿Cómo pueden ayudar? Por ejemplo, al poder tomar altura, el dron da una perspectiva aérea, en tiempo real y con mayor espectro visual. También permite supervisar terrenos de supervisión que tienen difícil acceso. “A los fiscalizadores se les permite controlar en tiempo real lo que ocurre en el bosque nativo, plantaciones o formaciones xerofíticas, con mucha precisión en zonas de difícil acceso, mediante la captura de fotografías que pueden ser analizadas de forma individual o procesadas en su conjunto, en cuyo caso se obtiene una ortofoto de muy buena calidad”, dice una presentación desarrollada por Richard Martinez, jefe de sección de fiscalización forestal de CONAF.

Todas estas funciones funcional bajo el “Protocolo uso de Drones en Fiscalización Forestal” de la CONAF, que orienta o guía al operador del dron para realizar un vuelo seguro, considerando las principales variables y aspectos relevantes que se deben tener presentes al volar un dron.

Reforestación  

El uso de los drones para la reforestación es una actividad innovadora que, si bien todavía no se ha implementado en Chile, sí lo ha hecho a nivel internacional de manera exitosa como en Birmania y España.

¿Cómo funciona? El proceso se divide en varias etapas. Primero, el dron permite hacer un mapeo del territorio que se quiere reforestar. Es decir, evaluar los daños del lugar o documentar su estado actual a través de diferentes técnicas. Luego, se pasa a una etapa de análisis, en la que se pueden usar distintos modelos. Finalmente viene la etapa de reforestación. Lo importante es que dentro de los estudios se determine la semilla ideal -y la manera de plantarla- para reforestar el bosque, esperando que ojalá sean nativas o que no alteren ecosistémicamente el lugar en el que se ubican. Y finalmente, a través del dron se puede hacer un monitoreo.

Uno de los creadores y propulsores de esta tecnología es el británico Lauren Fletcher, quien también es ex ingeniero de la NASA. Al hablar de los drones para la reforestación, dijo que está la esperanza de que con estas aeronaves se pueda reducir el costo de la plantación de árboles, inspirando a los gobiernos a invertir en proyectos de reforestación.

Otro de los impulsores de esta tecnología es Juan Carlos Sesma, de España,  quien creó la empresa CO2 Revolution. Su plan inicial consistía en usas drones para comprender dónde plantar nuevos árboles y automatizar los procesos de siembra. Así, esta compañía creó una semilla especial envuelta en recubrimiento biodegradable, con la que, dicen, ha tenido una tasa de germinación exitosa de un 80%. 

Investigación sobre glaciares

Cierto tipo de drones también ha aportado con información sobre el deshielo de los glaciares. De hecho, ya se conoce información e imágenes de deshielo en países como en Groenlandia  o Islandia.

https://www.youtube.com/watch?time_continue=79&v=V87I44EL1TE&feature=emb_logo

Algunos de estos drones -como los usados en Groenlandia- permiten ser manejados en piloto automático a través de rutas programadas. O también pueden incluir sistemas GPS que permiten juntar fotografías tomadas en cada vuelo. Es más, también se han creado nuevas tecnologías que proponen nuevos sistemas, como el uso de dos drones coordinados en los que unos mapean el terreno y otros instalan GPS. Como sea, las tecnologías están en proceso de innovación y ayudan a poder estudiar territorios que son de difícil acceso para las personas.

Cabe destacar que estos estudios, se dan con previas autorizaciones en los lugares que lo requieran, y cuentan con pilotos certificados para poder desarrollar las tomas.