Niñas y niños del Sename disfrutan del aire libre y la naturaleza a través del deporte aventura
Una caminata por la Quebrada de Macul, la escalada en el Parque Los Silos, y el rafting en el Cajón del Maipo, fueron las actividades que niñas y niños del Sename realizaron junto a sus tutores, quienes han debido buscar opciones recreativas más seguras por la actual pandemia. De esa manera, pudieron disfrutar del aire libre y la naturaleza, con la compañía y orientación de deportistas y fundaciones. Conoce aquí más detalles.
Un equipo de deportistas voluntarios encabezados por Ignacio Hernández, profesor de educación física e instructor de deporte aventura y apoyados por las fundaciones Deporte Libre y Cultivando Sabia, permitieron la exitosa participación de 13 niñas y niños de entre 8 y 13 años, que viven en la Residencia Bilbao del Servicio Nacional de Menores (Sename) de actividades deportivas de rafting, escalada y trekking.
“Al principio teníamos miedo porque son deportes nuevos y desconocidos para nosotros, estamos acostumbrados a llevar a los niños a museos, zoológicos y centros recreativos, la pandemia nos hizo repensar nuestras posibilidades y fue así como nos decidimos por estas alternativas. El gran equipo de expertos en deporte aventura y seguridad, nos brindaron tranquilidad para que nuestros niños y niñas disfrutaran esta experiencia”, comenta Carmen Huenchumil, directora de la Residencia.
Todo comenzó con un contacto y posterior visita a la residencia de los voluntarios, ahí conocieron a los niños y se comprometieron a desarrollar un circuito de deporte aventura, luego de realizadas las charlas y posterior revisión médica, los niños y monitores iniciaron la travesía. La primera actividad fue una caminata por la Quebrada de Macul, instancia de preparación para conocer mejor a los equipos y desarrollar lazos de confianza, comenta Loreto Millar, Terapeuta Ocupacional y coordinadora de la actividad en la residencia.
“Fue una experiencia súper bonita la de junto a mi equipo apoyar a los niños e invitarlos a participar de salidas que no son las que acostumbran. Generamos una amistad, estos deportes permiten que los niños confíen en sus capacidades y eso es muy valioso. Todo esto lo logramos con el aporte desinteresado de muchos voluntarios y centros deportivos a quienes agradecemos infinitamente”, agrega el propulsor e instructor deportivo, Ignacio Hernández.
La segunda salida fue al Parque de Escalada Los Silos, centro donde los niños apoyados por la Fundación Deporte libre, pudieron disfrutar de la calistenia. Loreto agrega que “algunos niños, los más pequeños igual les dio susto, pero después se fueron soltando y al ver que tenían equipo de seguridad y que sus otros compañeros iban subiendo, les daban ánimo y tenían confianza, pues lo lograron”.
Finalmente, la última salida del circuito outdoor fue la más extrema de todas, llevando a los niños a un rafting por el Cajón del Maipo, instancia donde se sumaron voluntades para lograr una experiencia inolvidable, gracias a la Fundación Cultivando Savia, las agencias de turismo aventura Natural Madness y Ruta Vertical, se pudo organizar una salida con kayakistas en un sendero familiar.
Además, la Brigada Táctica de rescate Chile se sumó facilitando rescatistas que apoyaron la salida y dieron seguridad a los niños. “Los más temerosos fueron los primeros en lanzarse al agua cuando nos lo permitió el instructor», comenta la directora de la residencia.