Es uno de los observadores de aves o birdwatchers más destacados del último tiempo, pero Juan Pablo Culasso ve a las aves de una manera diferente: a través de su canto. Nació ciego, con sólo un 2% de visión que únicamente le permite distinguir luces, si es de día o de noche, pero que le impide ver formas, siluetas, y mucho menos colores.

De pequeño solía acompañar a su padre a las fincas de sus amigos, donde podía disfrutar de los sonidos de la naturaleza, pero fueron los pájaros y su trinar los que más lo marcaron. Sobre todo luego que su padre notara que Juan Pablo tenía un don excepcional para escuchar sonidos y sus matices e identificar en ellos notas musicales. Esta habilidad se conoce como «oído absoluto» y solo una de cada 10.000 personas en el mundo la posee.

© Juan Pablo Culasso
© Juan Pablo Culasso

Después de este hallazgo, su padre comenzó a leerle una enciclopedia sobre aves de Estados Unidos y Europa que venía con un casette con el sonido de sus cantos. «Mi padre me hacía escuchar el sonido y yo le decía qué ave era«, me cuenta Juan Pablo. «Luego me regalaron un cassette con sonidos de aves de Uruguay. Escuchando ese cassette, empecé a reconocer aves que escuchaba cuando iba al campo. A mis 16 años, en una salida de campo con biólogos, me dieron un grabador y un micrófono. Allí comenzó la pasión», añade.

La salida a la que Culasso se refiere, es la que realizó en 2003 cuando acompañó a Santiago Claramunt, Ph. D. de  la Universidad de Louisiana, Estados Unidos, durante una investigación científica de voces de aves neotropicales en la que el ornitólogo le pidió que grabara el sonido de una especie. Desde entonces, Culasso se ha dedicado a registrar en alta definición los sonidos y cantos de diversas especies alrededor del mundo, llegando a lugares tan remotos como la Antártica o tan únicos como una gruta en Colombia en el sector de Rioclaro, Antioquia, donde tuvo la suerte de escuchar a los guácharos, unas aves nocturnas que viven escondidas en cavernas, lo que él describe como uno de los sonidos más impresionantes que ha grabado ya que da la sensación de volver atrás en el tiempo y escuchar a los dinosaurios.

© Juan Pablo Culasso
© Juan Pablo Culasso

«Todo el mundo puede ver  con sus ojos un ave y dice: ‘ah, tiene una pluma naranja, tiene el copete amarillo, y siempre que ven esa especie, van a ver los mismos colores. Pero cada ave tiene cinco o seis cantos distintos. Algunas poseen muchos más«, señala Culasso, quien tomando esto en cuenta, ya ha memorizado alrededor de 3.000 sonidos de aves de 720 especies distintas.

Los invito a leer esta entrevista que hice a Juan Pablo Culasso a propósito de su visita a Chile para participar de la VII Feria de Aves de Sudamérica que se realizará el próximo 26 al 29 de octubre de 2017 en Puerto Varas, Región de Los Lagos.

¿Cuál es el canto que más te ha impresionado?

He grabado tanto que sería difícil definir un canto que me haya sorprendido. Son varios. Depende mucho de dónde lo grabé, en qué condiciones…. Hubo una especie de lechuza que demoré unos 5 días para obtener un par de vocalizaciones. Esos son los cantos que me impresionan.

¿Qué significa para ti el hecho de estar realizando esta labor, donde ya llevas registrados los cantos de más de 700 aves?

Grabar para mí es una pasión, lo llevo en la sangre. Significa muchísimo el poder grabar y principalmente divulgar los sonidos que capto, en videos, conferencias, discos… Es una manera distinta de conocer la naturaleza.

© Juan Pablo Culasso
© Juan Pablo Culasso

Esta pasión te ha llevado a viajar por varios países. ¿Hay algún lugar que guardes con especial aprecio? 

El lugar que visité y que llevaré por siempre es la Antártica. Fue una expedición de dos meses a la Isla Rey Jorge, en la base científica artigas. Realmente fue un lugar mágico en todo sentido. Una experiencia inolvidable.

Sabemos que en 2014 ganaste el concurso Supercerebros de National Geographic, ¿Cómo viviste esta experiencia?

Supercerebros fue un antes y un después. Me permitió conocer, grabar y divulgar los sonidos de la naturaleza como nunca antes. El reconocimiento que obtuve sigue dando sus frutos hasta hoy.

En 2014 el joven uruguayo puso a prueba su habilidad para identificar aves a través del sonido de su canto en el programa Súper Cerebros del canal NatGeo. En la prueba final tuvo que identificar 15 aves seleccionadas al azar entre un grupo de 250. Antes ya había tenido que identificar diez y no falló ninguna vez. Se llevó un premio de 45.000 dólares y de éste invirtió un gran porcentaje en equipos de sonido.

© Juan Pablo Culasso
© Juan Pablo Culasso

Ahora que viajas a Chile, nos gustaría saber: ¿Qué aves chilenas conoces y de cuáles de ellas ya has registrado sus cantos? 

Es mi segunda vez en Chile, la primera vez pasé por Punta Arenas, de camino a la Antártica. Estuve dos días allá, pero no pude grabar mucho. El primer contacto con las aves chilenas será ahora en la feria de aves. Ojalá pueda llevarme algunos sonidos de recuerdo.

Finalmente, ¿Hay alguna especie que pese a haberla buscado, haya escapado de tu grabadora?

Son varias las especies que han escapado, principalmente en Colombia. Colombia es donde más he grabado aves en los últimos años. Hay una especie, el cucarachero flautista que me resiste hasta ahora, jajaja. Es lo que tiene, la naturaleza decidirá cuándo podré grabarlo.

Aquí les dejo un video en el que Culasso explica qué significa para él esta pasión:

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