Juan Landaida: “Hoy una empresa que no apunta a ser verde, se va a quedar afuera”
El fundador de Stickers of Wood nos cuenta los detalles detrás de este innovador emprendimiento que busca imponer un merchandising más amigable con el medio ambiente y que en el último tiempo se ha expandido rápidamente. Para él, su reciente éxito tiene que ver con un cambio de conciencia que de a poco se hace más evidente en el país.
La primera vez que conocimos a Juan Landaida, llegó descalzo después de haber cruzado medio Santiago hasta nuestra oficina. Sin duda nos llamó la atención, hasta que conocimos más de su historia. Landaida vive en la Región de La Araucanía, vendió su auto para moverse en bicicleta, no tiene basurero porque asegura que dejó de generar basura hace mucho tiempo y tiene su propio compost. “No consumo nada que se empaque”, cuenta.
Es este estilo de vida y convicción, el que lo ha impulsado a seguir adelante con su emprendimiento Stickers of Wood, cuyo nombre es una traducción literal al inglés de “Adhesivos de Madera”, y en el que ha buscado siempre el camino más amigable con nuestro entorno natural. Hoy usan madera reutilizada, un adhesivo que no tiene químicos o solventes nocivos para el medio ambiente y el papel que se desprende de los stickers es 100% reciclado y biodegradable. Además no los cubren con ningún tipo de sellador, barniz o resina.
Entre sus clientes se encuentran marcas como Patagonia, Üped, Nativos, Haka Honu y sobre todo emprendimientos como Salvaje. Pero su éxito no siempre estuvo asegurado. “Traté de meterlo en el mercado en el 2012, pero no funcionó”, recuerda Juan. No fue hasta 2016 cuando un amigo le sugirió que volviera a intentarlo, que Stickers of Wood finalmente comenzó a resonar en el país. “Entre agosto y octubre del 2016 desarrollé la marca, como el concepto rápido, y la lancé oficialmente a través de las redes sociales”.
¿Te imaginaste alguna vez el recibimiento que ibas a tener?
Nunca me hice muchas expectativas, obviamente porque ya tenía un poco de experiencia emprendiendo. También por la experiencia que había tenido el 2012 de que no me habían prendido mucho los stickers. Entonces diseñé una estrategia muy básica y simple, con pocos recursos. Me dediqué a bombardear Santiago y el trayecto de los peajes de Chillán a Santiago con stickers. Y de hecho, funcionó mucho. Pegué muchos stickers por todos lados y empezó a llegar mucha gente a pedir stickers y mandar a hacer los suyos, porque habían visto estos que había pegado en los peajes. La gente sacaba fotos, nos escribía, nos mandaba un correo o nos agregaba directamente al instagram. Entonces, esa fue un poco la estrategia.
¿Y cómo llegas de ahí, a trabajar con grandes clientes como los que tienes hoy?
Mi estrategia fue en el fondo ser súper honesto con las marcas en cuanto a lo que estoy trabajando, que era un proyecto distinto a lo que ya estaba en el mercado. Era entregar una solución distinta a lo que hay hoy en el merchandising, que es el sticker tradicional de plástico y con adhesivos que no contribuyen mucho al cuidado del medio ambiente.
Principalmente, Stickers of Wood también nace por un tema de desarrollar y fabricar soluciones a través de la obtención de un desecho y transformarlo en un activo, y hacerlo de esta forma localmente, para potenciar un ecosistema. Yo estoy entre Villarrica y Pucón, entonces mi proveedor de madera es local, todo es hecho acá por nosotros y en el fondo eso es un poco lo que nos diferencia del tema. Toda la trazabilidad desde que nace una idea acá en Stickers of Wood y se termina de materializar, está asociado. Tengo máquinas que consumen muy baja energía eléctrica, menos que un refrigerador, funcionando 24/7. Y este año voy a dar el salto para poder incorporar paneles solares.
También las cajas en las que vienen los stickers para lo clientes son de madera rescatada…
E incluso los tubos de adhesivo que ocupamos para hacer los stickers los reutilizamos. Los ocupamos para hacer los packaging del Stick de madera, que es un perrito que era parte de la empresa, que murió. Mandamos a hacer una figura de él de madera con Salvaje, que no está a la venta, pero lo entregamos a clientes, en eventos o nuestros embajadores. Es un como un símbolo ícono de la empresa.
¿Crees que tu éxito está relacionado a que hoy hay más conciencia de la contaminación que genera el plástico?
Obvio, porque el 2012 claramente nadie me pescó y el producto era lo mismo, con la misma filosofía, el mismo ADN. Han pasado casi siete años y ha habido un salto exponencial al tema de lo que es sustentabilidad y el cuidado medioambiental, con el impacto social y económico que esto genera. Eso antes, el 2012, estaba recién en algunas empresas que estaban partiendo y nadie las pescaba mucho. Pasa mucho, pasó con Green Glass en su minuto, con Karün y hartas marcas que partieron en esas fechas y recién ahora están empezando a tener un punch súper potente.
Hoy día una empresa que no apunta a ser verde se va a quedar afuera, en el fondo pasa por ahí el tema. Ya no es un valor agregado decir «Oye yo soy pro-ambiente», porque en cinco o diez años más eso va a ser la regla. También creo que la madera en base a cómo se están trabajando los predios, el proceso de manufacturación completa, de generación de madera desde una chapa, un tablero, lo que sea, ha evolucionado mucho y hoy es mucho más amigable generar una plancha de madera. Creo también en base a la experiencia y a lo que he investigado y estudiado, que la madera va a ser el material del futuro.
¿Cuál es el proceso detrás de los stickers?
El proceso parte por la recolección de la madera, que lo hacemos en Folimag. Ellos son los que me proveen a mí de los restos que no calificaron para exportarse y se desecharon, pero esa madera está buena. Yo tengo que entrar a picar porque, imagínate, hay cerros de madera y hay que empezar a buscar la que está buena.
Después, cuando ya la seleccionamos, la traemos acá al cuartel y pasa por un proceso de secado, que igual es lento. Cuánto se demore depende de cuánta humedad tenga la madera, pero son hartos días a temperatura ambiente. Después la madera pasa por un proceso de planchado por decirlo así, porque la madera viene como con ondulaciones y yo necesito que esté estirada. Hacemos un proceso muy parecido a planchar la ropa y después la prensamos y se deja reposar. Al final viene el otro proceso que es el dimensionado. Generas como una hoja de madera, y se le aplica la pintura si es que hay que aplicar color. Porque también hago stickers sin color, eso es lo que yo más trato de promover. Se le aplica el adhesivo y cuando está aplicado el color con el adhesivo va a la máquina, donde se aplica la gráfica.
¿Y qué adhesivo usas?
Mi adhesivo es 3M. La gracia es que con 3M venimos trabajando en este proceso hace muchos años atrás, antes de crear Stickers of Wood, por otro de mis emprendimientos. Te estoy hablando del 2012-2013. Yo tuve un apoyo súper potente de parte de 3M para lograr llegar a ese adhesivo más amigable con el medio ambiente y que funcionara con el sticker que hoy día nosotros estamos trabajando. Para mí fue un apoyo súper importante en la primera etapa, porque ahí conocí al Gerente de Comercialización e Innovación de 3M Chile. Nos trató súper bien, nos prestaron las instalaciones, nos pasaban gente que nos asesoraba con los adhesivos, llevábamos material y hacíamos las pruebas. Las pegábamos en notebook, celulares y veíamos si despegaban o hasta que estaba todo listo.
Han cambiado bastante desde que empezaste entonces…
Yo partí haciendo los stickers con coligues y con cartón reciclado. Antes eran gruesos, súper toscos, hoy son súper flexibles, usaba otro adhesivo… igual ha ido evolucionando todo el tema. Y cuando empecé no había nada similar en el mercado.
¿Y cuáles son tus planes para el 2018?
Desde que creé Stickers of Wood, nunca pensé solamente en hacer stickers. Entonces vamos a desarrollar nuevos productos. Estamos haciendo eso, vamos de a poco también porque somos una empresa chica y hay que ir paso a paso. He tenido ya la experiencia de emprendimientos anteriores y tampoco quiero que me gane esta ansiedad de querer que la empresa crezca, de ser conocido y todo eso.
El 90% de los que conocen la marca llegan por lo que representa: una empresa que promueve una forma más consciente y que está buscando soluciones a problemáticas importantes. En el mundo, el área de la publicidad en base a lo que es plástico, entre otros, genera un impacto de basura a nivel mundial súper grande. Y eso llega al mar, entre otras cosas. Entonces, si yo puedo contribuir con un granito de arena aportando una solución, lo voy a hacer. Estoy apuntando a eso con los nuevos productos que voy a generar, a entregar esas otras soluciones. Es como decir «Mira tenemos esta otra opción. Tú eliges, quieres seguir con esta o usar esta otra». Ese es un poco el camino y nuestro slogan dice «pega tu huella». Creo que es una forma bien chora de cómo nosotros la estamos pegando.