Fotografía en cuarentena: ¿Alguna vez viste el rostro de un chanchito de tierra?
Probablemente más de alguno de nuestros lectores recordará alguna anécdota de infancia, jugando a ver cómo estos pequeños animales – comúnmente considerados insectos a pesar de ser realmente crustáceos de tierra – se enroscaban como método de defensa al ser tocados. Su presencia es común en los jardines, y el color de su cuerpo ovalado puede variar entre el color gris pizarra y el amarillo grisáceo. Debido a su pequeño tamaño, resulta difícil captar a simple vista algunos increíbles detalles de su cuerpo, como su pequeño rostro. Retratar al chanchito de tierra fue la misión que se propuso nuestro colaborador invitado, el fotógrafo Edgardo Reyes, quien nos enseña que con pocos recursos y mucho ingenio se puede crear un enfoque perfecto para capturar hasta los diminutos detalles de estas criaturas. ¡Y para hacerlo no hace falta conseguir un objetivo macro! ¿Cómo lo hizo? ¡Revísalo en el siguiente tutorial!
¿Cómo lo hizo?
Para la realización de fotografías macro, es lógico considerar que se debe contar con un objetivo macro, idealmente uno de entre 150 a 180mm f/2.8, para poder estar a cierta distancia del sujeto y así evitar que éste se aleje por temor a nuestra presencia, pero estos objetivos son de un alto costo, lo cual representa una gran dificultad.
Sin embargo, existe una forma más económica de hacerlo. Se trata de utilizar tubos de extensión para macro, los cuales son unos adaptadores, que se instalan entre el objetivo y el cuerpo de la cámara, para crear espacio entre ambos, con la finalidad de reducir la distancia mínima de enfoque, lo que permitirá que te aproximes a tu sujeto para captar esos detalles que tanto impactan. Estos tubos son considerablemente más económicos que un objetivo macro, y los puedes comprar para la marca de tu cámara a través de portales de venta en la web.
Si tienes un objetivo manual, podrás utilizar tubos de extensión simples, pero si tu objetivo es automático, como los que actualmente vienen con las cámaras digitales, será conveniente hacerse de tubos de extensión que tengan conexión electrónica con la cámara, de esta forma podrás mantener los puntos de enfoque (les recomiendo solo utilizar el central) y el control del diafragma del objetivo.
Es importante también considerar utilizar un flash, pero para esto recomiendo que puedas utilizarlo fuera de la cámara, ojalá de forma lateral, a una potencia muy baja, porque solo queremos aportar un pequeño golpe de luz para eliminar zonas oscuras y destacar a nuestro sujeto.
Para conseguir este fin, agregué un Snoot artesanal que yo mismo fabriqué a partir de un tubo de papas fritas, lo pinté de negro por fuera para darle un acabado más profesional y utilicé 2 capas de papel diamante que recorté del tamaño del diámetro del tubo y lo puse en la tapa del mismo, en el extremo contrario, de esta forma la luz que llegaba al sujeto estaba muy suavizada y bien direccionada. Lo bueno de este sistema, es que puedo usarlo sobre la cámara o quitarlo para utilizarlo desde otro ángulo. Les muestro como quedó.
Les dejo el esquema de iluminación, con lo cual creo que quedará mucho más claro como se hizo esta sesión.
Para vuestra tranquilidad, les aclaro que una vez que terminé de hacer la sesión de fotos al chanchito de tierra, lo dejé libre en su jardín, vivito y coleando sin ningún rasguño, la única diferencia es que ahora es un chanchito rockstar.
Espero que les sea de utilidad, para que hagan sus fotografías macro en estos días de cuarentena, no hay excusa para dejar de hacer fotografías, solo es cosa de ingeniárselas.