El inédito proyecto que busca rescatar al huemul en la región de Los Ríos

Era viernes por la mañana. La localidad de Neltume nos recibía con un día despejado pero ventoso mientras nos preparábamos para partir al Centro de Conservación del Huemul del Sur al interior de la Reserva Biológica Huilo Huilo. Iríamos a conocer las dependencias de este proyecto sin precedentes que ha logrado reintroducir al huemul en la región de Los Ríos, luego de que la especie desapareciera de la zona a fines de los 80’ a causa de diversos factores entre los que se cuentan su caza y pérdida de hábitat.

Luego de unos 30 a 40 minutos internándonos en el bosque y con vista a los volcanes Mocho y Choshuenco, llegamos a la guardería donde nos esperaban los guardaparques Yerko Parra y Francisca Ruiz.  Yerko, jefe de turno de los guardaparques, nos dio las indicaciones que deberíamos seguir: mantener silencio, no realizar movimientos bruscos, caminar siempre juntos y hacer caso a las instrucciones que nos diera nuestro guía.

Desinfectamos nuestros pies en el pediluvio y comenzamos la caminata bordeando la cerca que protege a los huemules de amenazas externas como los pumas y cazadores ilegales. No habían pasado 10 minutos cuando vimos a un huemul, escondido entre la vegetación. Se trataba de un macho juvenil, que se camuflaba perfectamente y se mantenía en silencio, observándonos desde la distancia.

Conversando luego con Francisca Ruiz, quien hace 1 año se desempeña como guardaparque en la reserva, me contó que ella al igual que sus colegas, ya eran capaces de identificarlos, y que incluso les tenían nombres. Así ella sabía perfectamente que el huemul que habíamos encontrado en nuestro camino, era un macho de 2 años de edad. La segunda cría más joven del grupo familiar.

Un hito para la conservación del huemul

El huemul es una especie emblemática para Chile, que junto al cóndor adorna nuestro escudo nacional. Lamentablemente este cérvido hoy se encuentra en peligro de extinción debido principalmente a amenazas como la caza ilegal, el ataque de perros asilvestrados y el contagio de enfermedades de animales domésticos, pero sobre todo por la reducción y fragmentación de su hábitat que mantiene a las poblaciones aisladas entre sí aumentando su probabilidad de extinción.

Hoy se estima que en el mundo no quedarían más de 1.500 ejemplares y que la gran mayoría de ellos (más del 70%) se encuentran en Chile, donde ya han desaparecido de varios lugares en los que solían habitar, entre ellos la región de Los Ríos. Sin embargo hoy gracias a los esfuerzos de Fundación Huilo Huilo y su Programa de Conservación del Huemul del Sur la especie ha vuelto a poblar la zona.

Este proyecto de conservación y reproducción del huemul se ha convertido en la única iniciativa en el mundo que ha logrado reproducir a la especie en un ambiente controlado, lo que ha permitido recabar valiosa información sobre el huemul y aspectos de su biología y comportamiento que a futuro podrían ser determinantes para la conservación de este cérvido endémico de Chile y Argentina. Además en noviembre de 2016, también lograron con éxito la liberación de un grupo de huemules al medio silvestre. 

La bases del proyecto

Todo comenzó en 2005 cuando una pareja de huemules traída desde Villa O’Higgins, a los que llamaron Tucún y Pewún, dio origen al centro que ya lleva 12 años trabajando en la conservación de la especie y que hoy ya cuenta con una veintena de huemules.

Fernando Vidal, director del Departamento de Vida Silvestre de la Fundación Huilo Huilo, cuenta que su técnica de reproducción pese a recibir algunas críticas en el ambiente científico, ha resultado ser bastante exitosa: “Se me ha criticado a mí como director del proyecto de por qué no existen encastes o montas dirigidas. En el caso mío, somos especialistas en el manejo de cérvidos, llevamos trabajando más de 20 años y sabemos que ese encaste dirigido o esas cópulas, son un error. Sabemos que son las hembras las que deciden con qué machos copulan y detrás de eso hay una decisión que tiene un sinnúmero de alcances que van más allá de lo que tú puedes ver como persona”.

Además, explica que los huemules se encuentran al interior de la reserva que cuenta con una superficie de 100.000 hectáreas protegidas, resguardados en dos áreas de 70 y 50 hectáreas. “El cierre está diseñado como para albergar a los animales de forma autovalete, pero los animales tiene un soporte técnico y tienen un soporte derechamente en su manejo con respecto a su nutrición y a las enfermedades que puedan desarrollar. Cuando los animales presentan algún problema son atendidos con toda la expertise que presenta el grupo”, agrega.

Estos esfuerzos de conservación les han valido el reconocimiento a nivel internacional de instituciones como World Legacy Awards de National Geographic, quienes en 2015 otorgaron a Fundación Huilo Huilo el primer lugar en la categoría Conservación del Mundo Natural, y los Premios Latinoamérica Verde, considerados como los óscar del Medio Ambiente, que este 2017 los seleccionaron como finalistas en la categoría “Biodiversidad y Fauna”.

Los siguientes pasos a seguir 

A pocos días del aniversario de la primera liberación de huemules realizada en la región de Los Ríos, Fundación Huilo Huilo se prepara para continuar su labor que busca repoblar la zona con esta especie emblemática. “Nuestra gran meta era reintroducir, eso ya lo hicimos y está funcionando. Nuestra segunda meta hoy día es que ya hicimos la solicitud para la nueva reintroducción, para introducir hembras. Ahora si me hablas de metas, yo te diría que la siguiente sería ver nacer un huemul en vida silvestre”, nos relata Rodolfo Cortés, Director de la Fundación Huilo Huilo.

Sin embargo, existe una gran interrogante que podría determinar el futuro de este programa de conservación y es que hoy la necesidad de contar con una mayor variabilidad genética es inminente.

“Estamos intentando traer más genética a través de conversaciones con el gobierno, pero no ha habido respuestas favorables al respecto, y la verdad es que este proyecto sí necesita más genética. Esa es nuestra piedra de tope”, confiesa Fernando Vidal.

La importancia de contar con nuevos ejemplares traídos de otras zonas de Chile radica en que, como en todo programa de reproducción, la consanguineidad puede producir múltiples efectos laterales adversos. “La falta de variabilidad genética golpea el sistema inmune y por lo tanto la capacidad de los animales de tener una vida sana entre comillas, y entre otras cosas también hay problemas de reproducción en el tiempo”, señala Vidal y añade que hoy esta población de huemules es el resultado de la cruza entre un macho y dos hembras de distinta genética, por lo tanto “el riesgo es inminente hoy día, es la percepción que yo tengo. No hay nadie en la Tierra que a ciencia cierta te diga cuándo viene el efecto adverso de la consanguinidad porque no existe esa persona. Piensa que esta es la única instancia de reproducción de huemules monitoreada, pero yo creo que estamos ad portas. Es inminente que tengamos problemas genéticos”.

El turismo como herramienta de conservación

Más allá de su trabajo de conservación, en Fundación Huilo Huilo han apostado por desarrollar un turismo diferente, que busca involucrar a la comunidad local y potenciar el gran atractivo natural de la región generando conciencia sobre las especies de flora y fauna que allí habitan. Así por ejemplo, según nos cuenta el Director de Fundación Huilo Huilo, Rodolfo Cortés, el 90% de los trabajadores en la reserva son habitantes locales.

Además gracias al apoyo de Latam y su programa Cuido mi Destino,  han comenzado a desarrollar iniciativas como charlas educativas sobre la importancia y cuidado de la biodiversidad en la reserva en los colegios de Neltume, la capacitación de tour operadores de la zona o la capacitación de artesanas y la construcción del Pueblo de Artesanos en el Parque Kümun para que éstas cuenten con un espacio en el que puedan desarrollar y comercializar sus artesanías inspiradas en la flora y fauna local, entre otros.