Isla de Baru, Colombia. Crédito: © descubreteviajando
Isla de Baru, Colombia. Crédito: © descubreteviajando

Visitar Cartagena de Indias puede ser una de las experiencias más memorables para cualquiera. La antigua ciudad amurallada, sus calles de piedra, carruajes halados por caballos, casonas antiquísimas y toda las historias ligadas al Premio Nóbel de Literatura colombiano, Gabriel García Márquez, quien hizo de esa ciudad su hogar y epicentro de su trabajo como periodista, la asombrosa gastronomía y mezcla de sabores, la modernidad —también— de su paseo marítimo y edificios residenciales brindan al visitante una amplia gama de vistas, sabores, olores, experiencias que difícilmente puedan ser borradas por el tiempo. Pero nada podría decirse que está completo sin conocer o visitar el mar en esta zona del Caribe. El mar es también símbolo de esta ciudad e Isla de Baru es sin dudas la mejor alternativa visitarla.

También conocida como Península de Baru, esta paradisíaca isla se encuentra en el Caribe, apenas a 45 minutos de Cartagena de Indias, una de las principales joyas turísticas de Colombia. Es una atracción natural que destaca por sus aguas color turquesa, sus palmeras, arena muy blanca y la amabilidad de su gente. Aunque la casi todas sus playas son privadas, hay una en especial entre todas y esto no necesariamente se debe a que sea la única playa pública: Playa Blanca.

Playa Blanca, la principal joya turística en Isla de Baru. Crédito: © Jesús Alberto Yajure
Playa Blanca, la principal joya turística en Isla de Baru. Crédito: © Jesús Alberto Yajure

Uno de los aspectos más curiosos es que Baru realmente no es una isla. Antes lo era, se encontraba separada, como si fuera una isla. Solo se podía acceder a ella a través de una lancha o balsa. En 2014, el gobierno local construyó una “carretera-puente” que permitió unir Barú a un sector conocido como Pasacaballos, el pueblo próximo del continente. De esta forma, se puede acceder a Barú por mar o por tierra.

Uno de los principales aspectos convincentes de los textos o relatos turísticos es cuando se siente que quien los cuenta o narra está contando una experiencia propia, personal, cercana. Por esta razón, en Ladera Sur hemos consultado a periodistas latinoamericanos que hayan visitado o recorrido esta paradisíaca isla para que nos cuenten algunos detalles de sus experiencias en Isla de Baru, las cosas que más destacan y sus recomendaciones para nuestros lectores.

«Recuerdo mucho el agua cristalina. Las tonalidades de azul claro y crema. La sensación de paz al mirar el mar. Pero lo más más que se me quedó fueron los locales. Cuando fuimos, en 2013, era un sitio que todavía lo ocupaban los locales, que ganaban su dinero del turismo. Vendían pareas, prendas hechas por ellas. No recuerdo si eran ellos quienes administraban también las cabañas para los turistas pasar la noche. Yo hasta cogí un masaje allí acostada en la misma arena. Si caminabas un poco más, encontrabas gente que todavía vivía allí, lavaba su ropa en la playa, etcétera. Es un sitio al que llegan los turistas, pero que también es muy de su gente«, cuenta la periodista puertorriqueña Laura Quintero.

La venta de artesanía y la prestación de servicios turísticos, alojamientos, restaurantes y alquiler de toldos y sombrillas son algunas de las actividades que son también medios de subsistencia de los locales. La comida típica colombiana, especialmente los platillos típicos de la costa e isleña mezclan sabores e ingredientes de manera increíble.

Gastronomía en Isla de Baru, Colombia. Crédito: © Expotur Colombia
Gastronomía en Isla de Baru, Colombia. Crédito: © Expotur Colombia

En Isla Barú puedes deleitarte de un plato de deliciosa y jugosa langosta, arroz de coco y patacones (plátano verde frito); o un rico ceviche de camarón. También, si deseas, puedes probar uno de los muchos tipos de pescados para comer y elegir si lo quieres frito o guisado (en este caso, recomendamos que lo hagas en crema de coco). De igual modo, recomendamos que acompañes tus comidas con jugos de fruta natural, como maracuyá, sandía fresca, naranja.

Puedes llegar a Isla de Baru por vía marítima o por vía terrestre. Todos los días y en distintos horarios salen tours de lanchas y yates hacia las diferentes playas de esta y otras islas del Caribe colombiano. Solo debes dirigirte al muelle turístico de la ciudad, ubicado cerca del Centro de Convenciones, que está entre la ciudad amurallada y el barrio de Getsemaní. También puedes llegar por vía terrestre: El punto de encuentro para esta ruta es Mall Plaza el Castillo, donde podrás tomar un bus que va directo a la isla. Solo debes indicar al chofer que deseas quedarte en el paradero de Playa Blanca que es el nombre que tiene la principal playa de Isla de Barú.

«Me gustó mucho el tramo del viaje en lancha y luego la playa. Creo que es una de las más lindas que he visto, en cuanto a temperatura del agua y las olas. Podría omitir la parte del viaje que hicimos por tierra«, relata la periodista argentina Gabriela Baygorrí, presentadora de un programa de televisión que pertenece al diario La Gaceta de Tucumán.

También, el periodista mexicano Noé Zabaleta, quien escribe para Proceso, relata un anécdota ligada a la tranquilidad del lugar, pero que también alerta a los turistas de los cuidados para no caer víctima de estafas o sobreprecios en servicios: «Recuerdo mucho ha playa, muy hermosa, la tranquilidad del lugar. Y recuerdo, también, la trampa de unos lugareños que me cobraron en 40 mil pesos colombianos unas ostras que en México me hubieran costado un dólar, jajajaja«, rememora jocosamente.

Playa Blanca, en Isla de Baru, Colombia. Crédito: © David Shankbone
Playa Blanca, en Isla de Baru, Colombia. Crédito: © David Shankbone

«Yo recuerdo sobre todo el mar. Era la primera vez que veía una playa con agua tan tan transparente. Recuerdo mucho eso y la noche en la isla«, cuenta Laura Hintze, periodista argentina que durante años escribió para el diario local El Ciudadano, en Rosario.

En la isla la electricidad solamente llega a través de plantas de generación. Desde la mañana hasta las seis de la tarde no hay energía eléctrica en toda la isla porque las plantas se encienden a partir del atardecer. Únicamente los locales pueden tener acceso a energía para el cobro de servicios, pero este no es algo que se ofrezca comúnmente a los turistas: la electricidad es limitada y los pagos generalmente se recibirán en efectivo. Esto obliga al visitante a ir preparado, llevando teléfonos y otros aparatos electrónicos ya cargados. Prácticamente no hay WiFi en toda la isla, apenas algunos alojamientos lo ofrecen, pero es muy limitado.

Un tema vital de la visita a Baru y sus playas es el suministro de agua potable y su servicio en la isla. Llevar agua potable a Barú es algo complicado y caro (al igual que todos los servicios), así que toda está condicionada y se cobra. Lo más recomendable es llevar bidones desde Cartagena. Todos los alojamientos cuentan con agua de garrafones para que los huéspedes se puedan bañar o lavar los dientes, y se te da una cantidad de litros que puedes usar limitada (en promedio 10 litros). Si quieres usar más, tendrás que pagarla.

La experiencia en Baru es en general positiva, porque permite al turista conocer a la gente local, disfrutar de sus playas, pasar un rato agradable, broncearse, disfrutar de la gastronomía y de sus artesanías. Es un buen destino para quienes desean conocer el Caribe colombiano, además de conocer un poco más de su historia y su pasado.

«De isla de Baru tengo recuerdos bonitos. Yo me acuerdo de mucho de las cabañas, de las hamacas. También del pescado, porque siempre me encantaba el pescado colombiano y el agua de coco. También de estar en la playa platicando hasta tarde, el paseo en la lancha.  La arena hermosa todo muy limpio, sin tanto turismo y el agua rica«, concluye desde Culiacán (Sinaloa), México, la periodista mexicana Lucía Mimiaga,  editora de la Unidad de Investigación de Debate.

Comenta esta nota

Comenta esta nota

Responder...