Alianza entre sector inmobiliario y ONGs permitirá resguardar nidificación del Pilpilén en La Serena
El grupo inmobiliario Serena Golf, la Red de Observadores de Aves y Vida Silvestre de Chile-ROC, y la Red de Observación y Conservación de Aves Silvestres-REDAVES han firmado un acuerdo para llevar a cabo acciones destinadas a proteger el ecosistema dunar, una zona vital para la nidificación del Pilpilén. En esta nota, nuestro colaborador, Diego Luna Quevedo, nos entrega más detalles.
El pilpilén común (Haematopus palliatus) es un ave playera que se encuentra clasificada en la categoría “Casi Amenazada” en Chile, según el Decreto Supremo N°16/2020 del Ministerio del Medio Ambiente. Esto, debido a que enfrenta diversas amenazas en las playas y dunas que habita, como el atropello y destrucción de hábitat y nidos por tránsito de vehículos y la depredación de huevos y pichones por perros, entre otras. La bahía de Coquimbo es uno de los sitios con registros de mayores abundancias de dicha especie en la costa de Chile.
Es por eso que el grupo inmobiliario Serena Golf, la Red de Observadores de Aves y Vida Silvestre de Chile-ROC y la Red de Observación y Conservación de Aves Silvestres-REDAVES acaban de suscribir un acuerdo con el fin de resguardar la nidificación del Pilpilén en el ecosistema dunar del proyecto Serena Golf en la comuna de La Serena, Región de Coquimbo. Esto, con el apoyo de la ONG norteamericana Manomet Inc., a través de su Programa de Rutas Migratorias.
Se implementará un esquema de co-manejo y buenas prácticas de conservación durante la temporada reproductiva en la zona de dunas comprendida por la línea de más alta marea y la propiedad de Serena Golf. La carta-acuerdo suscrita implica una implementación piloto de dos años de duración, con posibilidad de ser renovada luego de una evaluación y acuerdo de las instituciones firmantes.
Angelo Valdivia Tapia, Subgerente Técnico de Serena Golf, señaló que “uno de los pilares en nuestro desarrollo inmobiliario es el cuidado y respeto de la naturaleza. La conservación de esta área importante para las aves nos brinda la posibilidad de agregar valor a nuestro proyecto y genera la oportunidad para que propietarios y sus familias se puedan involucrar de manera directa en la conservación de estas especies”.
Sharon Montecino, Coordinadora del Programa de Aves Acuáticas y Humedales de la ROC, menciona que “las acciones para resguardar la nidificación del Pilpilén están basadas en ciencia e incluyen instalación de cercos de protección temporal para resguardo de nidos, letreros, iniciativas de educación, difusión, capacitación, y monitoreo biológico”.
Por su parte Diego Luna Quevedo, Especialista en Política y Gobernanza de Manomet Inc. comenta que “las zonas costeras y playas de Chile atraviesan problemas complejos que requieren soluciones colaborativas, acuerdos y alianzas. El involucramiento del sector inmobiliario con buenas prácticas es fundamental para resguardar hábitats que son críticos para que las aves playeras puedan cumplir sus ciclos de vida en la ruta migratoria del Pacífico. El manejo a escala de sitio hace la diferencia”.
Rodrigo Condemarin, Presidente de REDAVES relató que “los datos generados por Redaves y la ROC a través de más de 10 años de monitoreo en el área, dan cuenta de que la bahía de Coquimbo es un sitio que acoge a una gran diversidad de aves, con un registro histórico de más de 170 especies que representan cerca de un tercio del total de las especies de aves que han sido registradas en Chile”.
Cabe mencionar que además de la importancia del área para la nidificación del Pilpilén, el sector norte de la Bahía de Coquimbo es también un sitio de relevancia para aves migratorias neárticas como la Gaviota de Franklin (Leucophaeus pipixcan), Playero blanco (Calidris alba) y Zarapito común (Numenius phaeopus), que se congregan allí en bandadas numerosas. Además, el sitio es utilizado para la reproducción y el completo ciclo de vida de otras aves playeras residentes como el Chorlo nevado (Charadrius nivosus) y Queltehue (Vanellus chilensis).
Este hito de acuerdo se enmarca en un proceso colaborativo de conservación que diversos actores vienen impulsando en la Bahía de Coquimbo y que ha convocado a los Municipios de La Serena y Coquimbo y a distintas ONGs, organizaciones comunitarias, territoriales y funcionales.