Christian Muñoz-Donoso e hijo y su participación en «Planet Earth II»
Nuestra periodista Francisca Jorquera entrevistó al cineasta chileno, Christian Muñoz-Donoso, respecto a su participación en la aclamada serie de naturaleza de la BBC junto a su hijo Christiaan. ¡No te pierdas esta interesante entrevista donde nos cuenta su experiencia y cuál es el mensaje de esta impresionante producción
Christian Muñoz-Donoso nos sorprende otra vez. Ya lo aplaudíamos por los cuatro premios Emmy que ganó gracias a su documental de naturaleza “Wild View”, y por estar detrás de exitosos proyectos como «Wild Expectations» y pronto a estrenar en el canal Chilevisión, junto al documentalista René Araneda, el programa «Wild Chile». Ahora nos enteramos que formó parte de una de las series de naturaleza con mayor impacto a nivel mundial: Planet Earth II. En esta oportunidad, el chileno trabajó junto a su hijo Christiaan, en secuencias grabadas en el altiplano boliviano y en el desierto peruano. Hoy desde Tierra del Fuego, nos responde esta entrevista, para contarnos cómo fue su experiencia, cuál es el mensaje que deja esta impresionante producción, y hace una fuerte crítica a la televisión chilena con respecto a este tipo de contenidos.
Es sabido que hace diez años, la serie “Planet Earth» de la cadena BBC de Londres, reestructuró la forma de hacer documentales de naturaleza en el mundo, entregándonos una verdadera radiografía de lo que significa la vida en la tierra. Esta vez, en su segunda parte, nos sumerge en increíbles paisajes y nos permite experimentar el mundo a través diversos animales que habitan tanto en selvas, como en desiertos y ciudades. Mientras responde mis preguntas, el cineasta chileno, está sentado a la orilla de una laguna en Tierra del Fuego, filmando castores para la televisión alemana.
Sin duda «Planet Earth II» ha impactado al mundo entero con escenas inéditas de la naturaleza. ¿Cómo describirías tú esta segunda parte?
Creo que sin lugar a dudas es una serie documental que nuevamente ha subido la barra que tenemos que alcanzar para la producción de documentales de historia natural a nivel mundial. La describiría como el primer documental “Landmark” de historia natural en el que BBC incluye al hombre y a los espacios no naturales como parte de nuestra naturaleza.
Tuviste la suerte de ser parte de Planet Earth II. ¿Cómo fue esa experiencia?
Sí, tuve la fortuna de trabajar con mi hijo Christiaan en la secuencia sobre los flamencos en el altiplano boliviano para el capítulo de las montañas, y también tuvimos a cargo la producción de una secuencia completa en el desierto peruano. En Perú filmamos 40 días divididos en dos viajes, uno en verano y otro en invierno, para mostrar el cambio dramático entre la estación húmeda y la seca, lo que terminó en una secuencia de 72 segundos para el capítulo de los desiertos, narrada por el carismático Sir David Attenborough.
El trabajo fotográfico y las historias propias de la naturaleza, cautivaron a la gente. ¿Por qué crees que es importante seguir trabajando en producciones como esta?
La tecnología audiovisual nos ha permitido alcanzar niveles nunca antes vistos, lo que permite realizar un trabajo cinematográfico impresionante, difícil de pensar hace solo 20 años atrás. Esto nos ayuda a conocer los aspectos más importantes y desconocidos de la naturaleza con la que compartimos este planeta. Sin los documentales de historia natural, no habría muchas alternativas para mostrar qué tan simple y qué tan dura es la vida de las plantas y los animales en los variados paisajes que existen en este planeta, y si no conocemos cómo se comportan y sobreviven otras especies, difícilmente podremos conocernos a nosotros mismos y malamente podríamos hacer algo para hacer entender al público en general lo importante que son las especies animales, vegetales y los ecosistemas en que vivimos para nuestra propia supervivencia.
¿Crees que una serie como esta pueda cambiar la vida de las personas?
La Vida en la Tierra, narrada y conducida por Sir David Attenborough, la primera gran serie de historia natural que produjera la BBC, cambió mi vida. ¿Por qué no podría cambiar la vida de otras personas?
Y en tu caso, filmando esta realidad a veces alejada de la humanidad, el cambio ha sido aún mayor.
Sabes, creo que el mundo natural no está alejado de nosotros. No necesitas viajar cientos o miles de kilómetros para apreciarlo. Precisamente eso es lo que ha influido en mi vida, eso que está al alcance de nuestros ojos y no lo vemos.
Cuando estudiaba en el liceo recuerdo que tomaba una micro para ir al centro y miraba los picaflores en el cerro Santa Lucía, los halcones peregrinos parados en los edificios más altos de Santiago, los cernícalos nidificando en las bellas iglesias que tenemos en la capital, o los zorzales alimentándose de lombrices en La Plaza de Armas o el Parque Forestal. Esos pequeños detalles le cambian la vida a cualquiera.
A tu criterio, ¿cuál es el mensaje que deja Planet Earth II?
Curiosamente el gran mensaje que nos deja esta nueva versión de «Planeta Tierra II» es un mensaje de conservación, que el mundo es muy frágil y que lo compartimos con nuestros hermanos menores, por lo tanto debemos cambiar nuestra forma de vivir, de construir jardines, casas y ciudades, que no invadan o alteren la armonía natural. Tenemos que aprender a compartir y respetar a los seres que nos rodean, e invitarlos a nuestro entorno haciéndolo más amigable con la vida silvestre.
¿Qué piensas sobre Chile con respecto a este tipo de series? ¿Los chilenos ven documentales de naturaleza?
Desafortunadamente en Chile no hay mayor interés, no tan solo en documentales de naturaleza, sino en la cultura en general como parte fundamental del desarrollo de nuestro país. Sin ir más lejos, si tú miras televisión abierta, un día sábado en la tarde lo único que ves son programas de cocina, un par de programas que te muestran lugares de Chile donde los conductores andan a risotadas o chacoteando y otros que hacen creer a los televidentes que están en una gran aventura en lo más recóndito del planeta cuando realmente están en un parque zoológico. Cero programación cultural, cero seriedad.
Para qué hablar de los documentales de naturaleza o historia natural, esa terminología no está en el vocabulario de los chilenos y los que la usan, piensan que historia natural se trata de los viajes de Jacques Cousteau o el Cazador de Cocodrilos. Y esto, no por que el televidente no quiera ver programas de naturaleza, sino porque los ejecutivos de los canales piensan que esto no vende, lo cual es un error muy grande. Los programas de naturaleza, especialmente de historia natural, son muy rentables y a los chilenos por supuesto que les interesa verlos, más aún cuando tratan temas locales.
Si tú sintonizas el canal estatal en horario prime en un país como Francia, Canadá, Estados Unidos o Inglaterra, puedes ver programas como Nature, Wildlife on One, Planet Earth. Y más aún, puedes ver documentales sobre los castillos de Escocia o la vida de John Adams. No importa el tema, siempre tienes cultura. Si lo haces aquí, ¿Qué ves? Una telenovela brasileña o turca mal doblada al español o un reality, y lo peor, esto es cada día de la semana. ¿Cómo nos hacemos llamar? ¿Los ingleses de América? Creo estamos muy lejos de serlo, por lo menos en el aspecto cultural.
Sinopsis del programa «Wild Chile» que se estrena este primer semestre en el canal chileno Chilevisión