Estudio ciudadano evidencia que el 99% de los encuestados cree que se deben proteger los ríos del país

Desde octubre del año 2019, Chile se enfrentó a un estallido social sin precedentes en los últimos 30 años. Esto propició espacios institucionales para una serie de discusiones que se venían desarrollando en el ámbito social y en los rincones autoconvocados del país. La necesidad de avanzar hacia una Constitución Ecológica, donde la naturaleza, el agua y el rol de las comunidades en la construcción del territorio que habitan, se tomaron el debate  constituyente en un contexto de crisis climática.

En este contexto, en 2019 surgió la necesidad desde Fundación Ngenko y Futaleufú Rivekeeper de conocer la información que la ciudadanía manejaba realmente sobre los ríos de Chile y la necesidad de proteger esos ecosistemas. Es así como ambas organizaciones formaron una alianza para llevar a cabo una investigación que buscaba determinar las barreras y oportunidades para establecer un mecanismo de protección de ríos libres en Chile, que requería primero conocer las preocupaciones e intereses de la población. Para ello, desarrollaron una encuesta de percepción ciudadana que tuvo por objeto comprender el conocimiento de la población sobre los ríos de Chile y su percepción sobre la necesidad
de protegerlos. Después del análisis y tabulación de los resultados, Fundación Ngenko desarrolló un informe que deja en evidencia la temperatura que se venía sintiendo en comunidades y distintas organizaciones no gubernamentales.


La encuesta de percepción ciudadana alcanzó un total de 4503 visualizaciones y 1612 respuestas completas a nivel nacional, donde un 99,6% de la población encuestada indicó que es necesaria la protección ambiental de los ríos de Chile. Si bien es complejo determinar el alcance conceptual del término protección, el hecho que casi la totalidad de la población encuestada reconozca la protección de los ríos como una necesidad, marca un hito relevante. Asimismo, el 81% de quienes sugerían avanzar en su protección, consideró que tal protección debería otorgarse a todos los ríos, independiente de su nivel de intervención o contaminación. Por su parte, un 44,3% señaló como mecanismo idóneo de protección la existencia de una ley especial destinada para tales efectos y un 33,1% señaló la necesidad de una protección a nivel constitucional. Ángeles Hermosilla, Directora de Agua Dulce de Fundación Ngenko, comenta que actualmente, a nivel legislativo, existen limitadas herramientas de protección para los ríos, todas de escasa aplicación y muy deficientes para el logro de sus objetivos. “Es necesario avanzar en un mecanismo de protección que pueda hacer frente a los desafíos que enfrentamos como sociedad en el mediano y largo plazo en contextos de variabilidad climática,” sostiene.

Otro dato interesante revela que el 86% de la población encuestada se relaciona de alguna manera con los ríos de Chile, posicionándose en los primeros tres lugares las relaciones vinculadas a actividades recreativas y turísticas (62,8%), las relaciones culturales (25%) y el río como fuente de agua (24,5%). Es interesante observar cómo las actividades recreativas y turísticas ocupan el lugar más importante en la relación de las personas con los ríos. Asimismo, son el sustento de varias comunidades que han encontrado una oportunidad de desarrollo económico local sostenible en torno al interés que despiertan sus ríos. Un viaje por Chile, para visitar los ríos Puelo, Futaleufú, Petrohué, Achibueno, San Pedro, Biobío, entre muchos otros, pueden marcar un antes y un después en la vida de aquellos que los visitan. Rocío González, Directora Ejecutiva de Futaleufú Rivekeeper menciona que, junto a la ONG Puelo Patagonia y los habitantes de dichos territorios, están buscando implementar una de las pocas herramientas disponibles para proteger los ríos Futaleufú y Puelo: la Reserva de Caudal. “Esta herramienta nos permitirá mantener el río Futaleufú fluyendo para garantizar el desarrollo económico local basado en el turismo sostenible y responsable para la nuestra y futuras generaciones”, enfatizó González.


Otro resultado que llama la atención es que, dentro de quienes no se relacionan con los ríos de Chile, un 38,9% lo atribuye a falta de acceso, lo que se contradice con la normativa vigente que establece que las riberas de lagos y ríos en Chile son bienes nacionales de uso público, cuyo acceso no puede ser negado, obstaculizado, prohibido o cobrado. Los resultados de la encuesta ciudadana de percepción de ríos, proporcionan información interesante en torno a la relación que establecen las personas con los ríos de Chile, su ubicación y los valores que se le atribuyen a los ecosistemas de agua dulce.

Si quieres conocer en profundidad los resultados de la investigación puedes inscribirte aquí: (https://forms.gle/mrLJcky7PrcnSFSt5) al conversatorio online a realizarse este jueves 18 de agosto a las 19.00 hrs.

“Los ríos son un puente que conecta a las personas y lugares, y en ellos se desarrollan diversas prácticas culturales, recreacionales y espirituales. Los ríos conectan al agua en todos sus estados, desde los glaciares en la cordillera hasta los humedales en las zonas costeras. Son corredores que unen los espacios marítimos y terrestres, transformando a la Tierra en un sistema interdependiente. Es necesario comprender esta visión holística, para poder realmente proteger a los ríos de Chile en forma integral. Para conseguir lo antes planteado, se deben coordinar los esfuerzos y necesidades de los diversos sectores de la sociedad. Esta mirada sobre los ríos libres en Chile, desde la percepción ciudadana, es un primer paso.” (Fundación Ngenko, “Ríos libres: una mirada desde la percepción ciudadana, 2022).

Los dejamos invitados a este interesante conversatorio: